Alcohol, el olor a alcohol llega a mi nariz haciendo que comience a abrir los ojos lentamente y, al hacerlo, me encontré con el rostro de Erik... con máscara, claro, que sostiene un algodón cerca de mi nariz.
- ¿Erik? -Dije y él me miro sorprendido.
- Al fin despiertas -Dice un tanto aliviado.
Comienzo a observar a mi alrededor, estoy en la casa de Erik, me giré hacia él y me di cuenta que estaba recostada en sus piernas y él estaba sentado en la orilla de una cama.
- ¿Qué me pasó? -Dije mientras trataba de levantarme.
- ¿No lo recuerdas? -Negué con la cabeza- Te desmayaste después de ver... algo
Ahora lo recuerdo, me desmayé porque vi aquel vestido detrás de la cortina.
Ese vestido estaba en mi mente desde hace días pero aún no entiendo el porque y, mucho menos, el porque es idéntico al de Erik.
- Erik -Dije mientras me giraba a verlo- ¿Por qué tienes un vestido de novia escondido? -No respondió- ¡¿Es para Christine?!
- ¡Da igual si es para Christine o no! -Dijo mientras se levantaba de la cama- Pero lo que no da igual -Se acercó a mi- ¡Es que tú lo vieras!
- ¡¿Por qué?! -Dije mientras Erik se arrodillaba ante mi- Porque puedo decírselo a Christine y arruinar tu futura boda
- Lo dedujiste -Dijo poniendo sus manos en mis rodillas- Serías buena ayudante de Sherlock Holmes
- ¿Porque crees eso? -Dije y él retiró sus manos de mi rodillas mientras desviaba su mirada de la mía- Yo te dije que te ayudaría a conseguirla
- Lo se... pero tu también conoces a ese tal... Raoul y lo puedes ayudar para que no este conmigo
- ¡Tonto! -Dije mientras me levantaba de la cama- Nunca, pero nunca, voy a decirle nada a Raoul -Me giré hacia él y él hacia mi- Quiero que seas feliz
Mis ojos se humedecieron, estaba a punto de llorar y no se el porque, tampoco se porque quiero ayudar a Erik.
- Agh -Gruñí- ¡Nunca debí haber caído por aquel pasadizo!
Salí del cuarto y comencé a correr hasta salir de la casa de Erik, las lágrimas estaban resbalándose por mis mejillas, me siento tonta pero no se el porque.
Volví a correr, necesitaba salir de las catacumbas, necesitaba llorar abiertamente en mi cuarto sin la presencia de Erik.
Ahora estoy en los pasadizos, no recuerdo cual era el que quedaba más cerca de mi cuarto, gracias a mis lágrimas ahora los veo todos borrosos.
- Te ves tonta -Dijo una voz a mi izquierda.
Me giré a donde escuché aquella voz, era Erik, estaba al lado mio con una mano recargada en la pared.
- ¿Por qué? -Dije tratando de sonar calmada.
- Porque estas corriendo y llorando por la nada
- No -Reí sin gracia- ¿Por qué eres tu?
- No lo se, pero lo que si se es que no quiero que vuelvas a decir eso
- ¿Qué?
- Lo de que mejor no hubieras caído en ese pasadizo
- ¿Por qué no quieres que lo vuelva a decir?
- Porque por fin puedo platicar con alguien en persona después de muchos años
- ¿Qué soy para ti? -Dije haciendo que Erik se confundiera.
- ¿Cómo? -Dijo Erik.
- Lo que escuchaste -Dije seriamente- ¿Qué soy para ti? ¿Una amiga? ¿Una cómplice? ¡¿Qué?!
Erik retiró la mano de la pared, caminó varios pasos hacia atrás y, con sus manos, cubrió su cabeza. Lo había hecho dudar, lo noté al ver como sus manos se movían alisando su ya perfecto cabello.
¿Por qué le pregunté eso?
Ni siquiera yo se que es Erik para mi.
Limpié las lágrimas de mis mejillas, Erik se giró hacia mi y me observó fijamente.
- No lo se -Susurró- Pero... ¿Yo que soy para ti?
Rayos, exactamente lo que yo estaba pensando fue lo que el me preguntó ¿acaso puede leer mi mente? no, no puede, solo pensó seriamente al igual que yo, comenzó a analizar la pregunta para encontrarse con que yo no le dije que era él para mi antes.
Es confuso, muy confuso, tu mente se llena de ideas y sientes que de un momento se explotará porque no tienes la respuesta a algo, pero es ahí cuando tu cerebro incluye a la personas de tu alrededor para poder ver si ellas pueden responder aquella pregunta que ellos te hicieron; pero con ellos el ciclo se vuelve a repetir hasta que genera una gran confusión que hace que todo lo que pienses, y pensabas, se revuelva y se quede en nada haciendote caer en otra pregunta: ¿qué estaba pensando?.
Creo que todo eso que acabo de pensar no tiene mucho sentido y si lo tiene no lo encuentro.
Además de que no debería ponerme a analizar tan profundamente o acabaré mareada.
Erik para mi es un hombre solitario que busca dejar la soledad adquiriendo el amor de una mujer que solo lo ve como su maestro de canto, o ángel de la música, no le gusta que desobedezcan sus órdenes y puede matar personas sin pensárselo dos veces.
Pero también es un poco caballeroso, porque conmigo no siempre lo es, infantil, testarudo, elegante, formal, un poco vanidoso, un mago, un excelente cantante y un hombre increíblemente guapo.
Si él no fuera tan bipolar sería un hombre casi perfecto, un hombre que haría de todo por ver a su amada feliz y no dejaría que nada, ni nadie la dañaría.
.
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Un momento.
Si acabo de pensar todas esas cosas de Erik quiere decir que ya no lo veo como una simple persona.
¡Oh por dios!
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¡Me he enamorado de él!
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Soledad Bajo Tierra
FanficQuedarte no siempre es bueno cuando quien amas ama a otra persona. No debí enamorarme de él sabiendo que estaba enamorado de ella. Mi nombre es Abigail y estoy enamorada del Fantasma de la Ópera. ❌PROHIBIDA SU ADAPTACIÓN O COPIA*❗❗❗ Basado en "El...