Lideres

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Maratón Especial 1/5

Pov. Jungkook

Definitivamente habían sido las 15 horas más largas de mi vida, podía jurar que sentía mi corazón latir, y muy rápido.

Me sentía inquieto, ¿Cómo enfrentaría a _____ después de haberla abandonado en San Francisco?

¿Cómo enfrentaría a Jimin después de haberlo matado con mis propias manos?

Fui muy ingenio al pensar que por ser mi mejor amigo me iba a perdonar.

Definitivamente ese era el problema principal.

-Llegamos- Anuncio G-Dragón poniéndose de pie.

Yo trague grueso, en definitiva controlar todas estas emociones era más fácil cuando me sentía como un vampiro.

Aun así, era reconfortante sentirse una vez más humano, imperfecto, mortal.

Primero bajo G-Dragón, se puso unos lentes de sol y saludo a un hombre muy parecido a ____. Se veía casi de la misma edad que ella.

Me asome un poco mas por la ventana y pude verlo, a aquel chico que alguna vez fue mi mejor amigo, mi mejor confidente, mi hermano, no de sangre, de alma.

Lagrimas se asomaron por mis mejillas, mojando mi piel mientras caían, preocupándome de uno hacer el mínimo ruido, porque sé el alcance del oído de un vampiro y no quería que me vieran, no aun.

Podía ver como Jimin alzaba su cuello buscando algo más dentro del avión. Tome aire y salí con lentes de sol igual que G-Dragón, esperando que al esconder mis ojos, mi llanto se escondiera con ellos.

Jimin no quitaba la vista de mí, pero yo no quería verlo, aun así el remordimiento pudo conmigo y voltee a verlo, nuestras miradas eran profundas, hablaban a gritos lo que nuestras bocas callaban.

Pero fueron interrumpidas cuando escuche un grito con mi nombre.

-¡JEON JUNGKOOK!- gritaron mientras me derribaban.- ¡Mocoso!, ¡No vuelvas a preocuparme así!-

-Lo siento Jin hyung- respondí con una media sonrisa mientras el mayor me atrapaba en un abrazo que me hubiera roto los huesos si siguiera siendo humano.

Extrañaba ese comportamiento materno que tenia Jin siempre que se trataba de alguno de nosotros, por primera vez en dos años me sentía completamente feliz, en los brazos de Omma Jin, de vuelta en la burbuja de cristal en la que él me mantenía.

Me di cuenta que no era así cuando voltee a ver al lugar en donde estaba Jimin y maldije bajo cuando me di cuenta que ya no estaba donde antes, ahora se encontraba delante de mí, con una mirada bastante aterradora.

Vi su mano cerrarse en un puño, el iba a golpearme y aunque yo pudiese esquivarlo no lo haría, eso me lo merecía, y también cualquier golpe que el quisiese darme.

Quite cualquier resistencia que pudiese poner mi cuerpo y espere a que su golpe impactara en mi rostro. Un golpe que me saco volando casi 15 metros y me hizo parar únicamente por la presencia de un cuerpo en el camino, el cuerpo de Jimin.

Cerré los ojos en espera de otro golpe, un golpe que nunca llego. En su lugar hizo algo que nunca espere.

Envolvió los brazos en mi cintura y me sostuvo como si temiera que fuera a desaparecer. Mis ojos se aguaron nuevamente cuando sentí húmeda la parte de mi cuello en donde Jimin escondía la cabeza.

-¿Cómo te atreves a hacerlo?- dijo con la melodiosa voz que tantos recuerdos me traía.- ¿Sabes cuanto sufrí cuando no dejabas ninguna pista que nos dijera que seguías vivo?- el nudo que había en mi garganta se hizo más pesado y las ganas de llorar también incrementaron.- ¿Sabes acaso cuanto llore cuando te fuiste sin siquiera despedirte? ¿Cómo te atreves a hacer sufrir tanto a las personas que te quieren?- esta vez alzo un poco más la voz.

Lost (Jungkook y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora