Balcony [Vkook]

なな

Había pasado alrededor de dos semanas y media de días rutinarios en donde no ocurría la gran cosa en su vida, en su ida al colegio a veces se topa con Jimin, lo que hace que puedan conocerse más entre ellos y más de lo que hubiese esperado, la verdad hasta que llega la hora de tomar caminos diferentes. Claro.

Ya en clases, pasa la mayoría de la jornada junto a su amigo Hoseok, quién no paraba de sorprenderle.

De vuelta a casa a veces se va con éste ultimo al escondite que tiene él y Yoongi, obvio, sin olvidar de que se trataba de la casa de Namjoon.

Es gracioso ver que aún el hombre no se acostumbra verlo por ahí.

Considerando lo que sea que tuviese con su hermano.

A él no podría importarle menos.

Bueno, al final de día quedaba lo que más le estaba interesando hasta el momento.

Sus conversaciones con Kim Taehyung.

Mentiría si dijera que no se le escapaba una sonrisa boba cuando leía que tenía un mensaje nuevo del castaño.

Sin olvidar que su hermano cada vez que lo veía comenzaba a molestarle con preguntas entrometidas rompiendo su burbuja de felicidad.

Pero en cuanto decidió retomar su conversación otra le llegó de pronto.

+8245778209: no te conviene acercarte a Jung Hoseok, créeme.

¿Disculpa?
¿Quién te crees que eres?
Visto a las 22:37.

+8245778209: ¿no te parece extraño que nadie se reúna con él en clases? Es un maldito enfermo.
Acabarás hecho un costal de golpes.

Realmente no iba a esperar a leer una maldita palabra más de ese numero, rápidamente le dio a la opción de bloquear sintiendo un mal sabor de boca al dejar su celular de lado.

Abriendo la ventana que daba para su balcón observó la de su vecino notando que su luz estaba completamente apagada.

Con un suspiro fue a tomar su guitarra y volvió, saliendo esta vez sintiendo inmediatamente la fresca ráfaga de viento que le proporcionaba la noche.

"Es un maldito enfermo"

Se sentó en el piso comenzando a tocar lo que sea que estuviera en su mente sin tener ganas en realidad de cantar.

Recordaba cuando no había pasado más que unos días cuando Hoseok había llegado hasta él bastante nervioso, realmente pensó ese día que se le iba a confesar o algo así pero al final solamente pidió su número de teléfono.

Rió.

También estaba aquel entonces en donde se había dejado su almuerzo en casa y en cuanto Hoseok lo había notado le había dicho un sonriente "Espera un momento" para luego correr quién sabe a donde.

Lo que pronto descubrió es que había ido a comprar un montón de chucherías y dulces.

"Oh, bueno. Gracias, hyung"

Había pensado que los dulces iban para él pero en cuanto fue a tomar uno de ellos, el mayor le había dado un sutil golpe en su mano negando con la cabeza sin quitar su característica sonrisa.