capitulo 11

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La canción Sorry de Demi Lovato resonaba en el estéreo y a pesar de no saber la letra, la tarareaba sin parar.

-Buenos dias mi pequeño angelito- Dijo mi madre apenas entró en la habitación- Ya preparé tu Almuerzo

-Gracias mamá- murmuré

Cuando tomé la decisión de mi vida nunca pensé que iba a beneficiar mas a mi madre que a mi misma. Se que ella no quería permanecer en Caelum. Luego de la muerte de mi padre, no había mas nada que la retuviera allí. Solo yo.

Al llegar aquí, supuse que no sería un desafio para ella como lo sería para mi. Al fin y al cabo, ella no tendría que fingir ser un humano. Ella ya lo era. Por lo tanto se adaptaría perfecto a la sociedad. A los pocos días, ella ya había conseguido un empleo y hasta consiguió su primer aumento. Yo, en cambio, comencé a estudiar esta semana y espero poder encajar de la forma adecuada y aprobar todas las materias. Sin descartar que entré en medio semestre.

A pesar de todo, No puedo culparla. Ella no fue la persona que decidió venir aqui. Fui yo. Claro que siempre con un poco de presión por parte de ella en querer volver pero yo fui quien tomó la decisión de marchar para empezar una nueva vida.

-Es cuestión de acostumbrarse hija- Dijo como si leyera mi propia mente.

Cuando era niña, me encantaba escuchar las divertidas historias que contaba mi padre. Historias acerca de como se conocieron él y mamá o como fue que ella logró ¨acostumbrarse¨ a vivir rodeada de tanta fantasia.

Solo tenía que seguir sus pasos. Si ella pudo, yo tambien podré.

Según él, mi madre siempre fue una guerrera y consiguió superar todo obstaculo que se le presentaba en su camino con tal de seguir su sueño. Formar una familia.

Sin embargo no era el solo hecho de Acostumbrarse a algo sino que habia algo en mi interior que me decia que estaba haciendo lo correcto y que a la vez me estaba ahogando en un vaso de agua. pero....

¿Por qué me quedaría en Caelum? ¿ Para sufrir? ¿Casarme con alguien a quien no amaba? ¿Que clase de persona hace eso? Si alguien me dijera que se casó o se casaría con alguien sin amor con tal de tener el poder supremo, juro que aplaudiría a esa persona con mucho gusto.

Sin embargo, yo no soy esa clase de chica. No necesito a alguien falso a mi lado solo para gobernar un pais ni mucho menos conquistar el mundo. No necesitaba nada de eso. Yo solo necesitaba a alguien que me amara por lo que era y no por lo que tenía. Mis poderes no definían mi personalidad. Y al parecer la única que lo entendía era mi madre y Vanille.

Mis padres jamás se casaron por obligación. Lucharon contra cielo y tierra para poder estar juntos y eso es lo que quiero hacer el día que me enamore. Luchar por ese amor sin importarme una mierda las consecuencias que pudiera tener al respecto. Tampoco me importaría que dijeran u opinaran los demás.

NADIE PUEDE MANEJAR TU VIDA SIN TU CONSENTIMIENTO.

-Lo se, es que- Suspiré. No encontraba las palabras exactas para poder expresarme. La realidad es que no había explicación para lo que sentía- hay algo en mi que no se siente del todo satisfecha.

Aún estando lejos de mi hogar, lo sentía cerca. Era una sensación extraña. Es como si hubiera algun tipo de fuerza que me impide alejarme por completo. Tal vez algo o...alguien. ¿Quizás Vanille? Ella estuvo aquí hace un rato. Puede que quizás su presencia me haga sentir así. No lo se.

No le comenté a mi madre acerca de la Visita de Vani. No quería inquietarla. Se lo mucho que aprecia estar en su tierra Natal. No quiero arruinarlo. No, esta vez.

-Tranquila cielo- Se acercó y me dio un abrazo. Pero no fue cualquier abrazo, fu que me hizo remontar a la infancia. ¡¡Como extrañaba esos abrazos!!- todo estará bien. te lo prometo.

-¨Te Lo Prometo¨ es una oración muy grande madre.

-Lo se cielo- Besó mi frente- Lo Se.

Unos segundos de silencio bastaron para calmar mis nervios. Ya iba a encontrar la solución a mis problemas. Por el momento solo pensaba en disfrutar cada segundo de ese abrazo contenedor que tanto me animaba.

-Bueno- mencionó apartándose de mi- ¿Por qué lo hiciste mamá? ¿Por qué cortaste este maravilloso momento?- Apresúrate. El Almuerzo no se comerá solo y tú debes ir a la escuela.

Di un pequeño vistazo al reloj. 11:30 AM

-¿Y que hay sobre ti?- Pregunté tratando de no pensar tanto en mis necesidades y enfocarme mas en mi rutina- ¿Por qué no has ido al trabajo?

-Una de las secretarias enfermó. El jefe me llamó y me pidió que cubriera su turno. Asi que entro mas tarde.

-Entonces.....- vacilé mientras bajaba las escaleras.

-Entonces...puedo acompañarte a la escuela si quieres- Bromeó.

-JA...JA- si. eso fue un sarcasmo de acá a la China- muy graciosa madre. No me refería a eso. Me refería a que hora entras a trabajar hoy entonces.

-A las dos de la tarde.

-¿Que?- me senté en la mesa con esa respuesta aún rondando en mi cabeza- ¿A las dos?

-Lo siento cariño, es por trabajo y lo sabes. Si yo pudiera....

-Lo se, lo se- Exhalé- Lo entiendo- ¿Y a que hora volveras?

-Trataré de regresar lo mas temprano posible. Lo prometo

-No- Negué con la cabeza- No prometas cosas que sabes que no cumpliras. Puede que Quizas te crea cuando dices que todo estará bien. Pero no me pidas que te crea esta vez. Tu misma estas convencida que no es asi.

-Bueno, esta bien- Se aclaró la garganta- Trataré de volver lo antes posible.

-Ahora me gustó mas- En realidad no me gustó para nada. Asi como se que las Rosas son rojas también se que mi madre ni siquiera tratará de hacer el intento. Pero no pienso discutir por esto. Pensandolo bien, si ella no llega temprano, eso significa que.....No tengo que decirle que haré luego de la escuela. Un problema menos para mi.









DEBERÍA ODIARTE (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora