La historia del millonario que queria vivir como pobre

capitulo 13: el gran dia.

Luego de ver la temporada completa, nos quedamos dormidos hasta las 11. Desperté y tuve que despertar a Santiago. Tenía que ir a la barbería.

Mientras tanto dejamos a Ruben dormido en un silló, babeando. Nos fuimos a la barbería, yo no me cortaría el cabello pues tres o 4 días antes había tenido el gran cambio. La cita en la barbería era a las 12. Llegamos media hora antes y el barbero no estaba ocupado así que empezaron a cortarle el cabello. Yo tenía hambre así que salí del establecimiento y puse en marcha en coche. No sabía que comer, ya no quería hamburguesas, entonces decidí por tomar un Mango Maracuya en el Starbucks. Mi amigo no estaba pues era un invitado de la boda y se había tomado el día. Sentí que la bebida no solucionaría mi hambre por lo que me compre un pastel de chocolate, esta delicioso. Al terminar de comer, pedí un caramel frappuccino, para Santiago claro, con un pastel de queso new york style. Llegué a la barbería y aún seguían en su cabello así que le pase el frappuccino y guardé el pastel de queso o le caerían pelos.

Al final de tanto esperar le terminaron de cortar el cabello y la barba a la 1:30 p.m, yo casi me duermo pero en el coche estaba un libro de mamá que se llama " un ángel cada día", lo leí lento así que no avance mucho. Cuando se quitó de la silla del barbero, Santiago casi cae al suelo por quitarme la bolsa con el pastel de queso. Y en ese momento me acordé de Ruben. Saqué mi celular y vi que tenía 3 llamadas perdidas y un mensaje. No leí el mensaje ni le devolví la llamada, sólo le dije a Santiago: " es Ruben vámonos".

Pagó el corte de cabello y salimos, nos dirigimos a la casa y al llegar abrimos la puerta, no nadie, ni la empleada. Sólo escuche ruidos en mi cuarto. Era música electrónica. Santiago y yo subimos las escaleras y la puerta estaba entrecerrada, abrí con cuidado no quería asustarlo. Y para mi sorpresa y la de Santiago, estaba tirándose a la empleada, en mi cama! Con el ritmo de música electrónica. Fue traumante, no hicimos nada y decidimos asustarlos. Bajamos al sótano y buscamos un disfraz y recordé que el pasado halloween nos disfrazamos de soldados, con pasamontañas y todo, tome los pasamontañas y le pase uno a Santiago. Fui al armario general y tome dos camisas negras mías. Santiago era más delgado que yo pero tewnia músculos asi que eso compensaba el tamaño, le pase un jogger negro que le quedaba un poco flojo de la cintura y yo me puse un pantalón negro. Subimos a mi cuarto y de una patada abrimos la puerta y grité

- Esto es un asalto!!! Quiero todo el dinero y las joyas.

La empleada pego un greito despavorido y se tapo rápido, mientras que Ruben estaba ahí, acostado, petrificado, pálido, sin taparse y no pude aguantar la risa y me quite el pasamontañas.

- Lucy, no se preocupe no la despediremos, sólo lave la ropa de cama o quemela por favor. Y tú Ruben jaja tapate, no queremos ver tus miserias.- dije.

Lucy salió envuelta en mi sábana y Ruben seguía tapado con una almohada, mientras yo no me podía dejar de reir. Salimos para darle privacidad para que se pusiera su ropa, y bajamos a la sala de estar, minutos después bajo Ruben.

- Te pensábamos llevar a comer pero creo que no tienes hambre, te acabas de comer a la empleada- dijo Santiago.

No pude contener la risa, pero Ruben tenía un cara de tierra tragame que daba lástima.

- Ruben está bien, no estoy molesto. Me has hecho el día, sólo ya no hablemos de lo ocurrido y ya, vamos a comer, hace hambre.

Nos pusimos en marcha a comer horas antes de la misa. La misa estaba programada a las 5:00 p.m, teníamos 2 horas y fuimos a un lugar de comida china, yo pedí una sopa, y Santiago tambien, en cuanto a Ruben, dado quizá por su experiencia post sexo y su arranque de adrenalina pidió casi todo en el menú.

Y era tiempo de irnos y pase a dejar a Santiago a su casa, y Ruben regresó conmigo a mi casa pues ahí tenía la ropa de la boda, Piarlak estaba en casa de Lizzey. Nos cambiamos y nos apuramos para llegar a la misa.

* * *

El día era ahora. Memphis sabía que tenía que arruinar esa boda, y planeo todo, estaba encargado de la seguridad del lugar, la cual no pidió, o al menos la seguridad real.

- CHICOS!!! todo listo?- dijo Memphis en tono autoritario.

- Si señor, todo listo para esta noche. Despreocuparse.

Memphis se sentía ansioso, un poco nervioso, y sentía como la adrenalina empezaba a fluir. No pudo contener la risa malévola.

Memphis salió, fue a su casa y se puso su traje para asistir al evento.