Lost Man

007: Yo no puedo lidiar con los demonios de alguien más cuando los míos...

 Yo no puedo lidiar con los demonios de alguien más cuando los míos están comenzando a crecer.  

LUCAS.

Acaricié la panza de Emily desde mi posición en el suelo, estaba dormida en el sofá con un libro sobre sus pechos de maternidad y llevaba más cansancio en el rostro que maquillaje.

Me pasé alrededor de los últimos meses muerto, no he parado de buscar a Liam como un loco porque sé que por alguna razón si ha desaparecido del mapa es porque un malnacido de esos lo tienen. Dejaron a Cassandra en el hospital, él ni siquiera volvió a verla para saber si estaba bien ¿Dónde puede estar?

—Llegaste. —Susurra incorporándose un poco, deja el libro a un lado y abre las piernas un poco. Recuesto mi mejilla en una de ellas.

—Estoy cansado.

—Desde que nos regresamos a chicago no has parado de caminar Lucas, él probablemente no esté aquí.

Cierro los ojos fuertes.

—No me voy a rendir Emily, debo encontrarlo... Se lo debo.

El cuerpo me tiembla cuando pasa sus dedos por mi nuca, se sacude un poco antes de darme cuenta que me encuentro sollozando.

Todo este tiempo he estado rodeado de gente que me quería asesinar, me tuve que deshacer de ellos desde el comienzo para que esto no pasara. Liam cayó en las peores manos y de seguro estaba viviendo el mismo infierno de nuevo, y hasta peor.

—Lo vamos a encontrar, solo tienes que aclararte. Pensar más y culparte menos.

Alzo la vista hacia ella, se ve tan cansada como yo pero la panza le ha dado que hacer.

—Vi a Cassandra...

Frunce los labios.

—Yo también. —Dice. —El día que compré ropa de bebé.

Arrugo el ceño.

—¿Qué?

—No te había dicho nada porque no quería que te preocuparas, ella está acá pero no es por Liam eso puedo asegurártelo.

—¿Qué hablaron? —Cuestiono sentándome a su lado en el sofá.

—No mucho, pero lo suficiente para saber que solo está escapando. No era ella misma, cambió demasiado desde la última vez que la vimos Lucas.

—Lo sé. —Concuerdo, la verdad es que no la vi igual. Sus ojos habían perdido el brillo, estaba desanimada y se había cortado el pelo.

—¿Le viste las marcas?

—¿Marcas? —La miro fruncido.

—Tiene marcas por todo el cuerpo, excepto una que la tiene en la cara. Con navajas lucas, como las que yo tengo en la espalda.

Parpadeo un buen rato.

—Dijo que estuvo embarazada, y me puse a pensar en todo lo que le pasó. Tú me dijiste que en ese estacionamiento pasó algo, es la última vez que viste a Liam porque tuviste que correr detrás de mí, sabíamos que el día que Robert nos dejó libre como si nada es porque tramaba algo. Entonces comenzaste a unir cabos. Los próximos días te las mantuviste atento con Liam, pero desde lejos. No te diste cuenta que Ryan fue a su apartamento, no te diste cuenta que lo perseguían hasta que lo cogieron en ese estacionamiento, justo esperaron que te fueras porque a quién seguían realmente era a ti.

Esto no puede estar pasando.

—Me levanté entonces en mi cama porque veía sangre, que no era mía... Te llamé llorando y huiste de ahí antes de que me diera algo, dices que la última vez que viste a Liam estaba saliendo con Cassandra en sus brazos de la casa de esta chica. Se refleja que probablemente lo agarraron ahí, fue entonces cuando lastimaron a Cassandra y cayó en el hospital.