Aplausos se hicieron presentes cuando terminó de cantar. Yo sabía bien que el tenía una hermosa voz, no tenía porqué negarlo. De todos modos lo sabría, soy su mejor amiga.
- ¡Gracias! -chillé haciendo una venia- Espero que les haya gustado.
- ¡Hermoso! -gritaron todos. La verdad que se sentía muy bien que halagaran a tu mejor amigo. Era algo único, hacer que la autoestima subiera.
- ¿Lo ves Ky? ¡Te dije que iba a funcionar! -exclamé abrazándolo.
- Gracias Di -dijo correspondiendo a mi abrazo- Sabes que te quiero ¿no?
- Yo te quiero más, Kyle -Susurré mientras sonreía.
Nos separamos lentamente y empezaron a caer gotitas de lluvia. Así que decidimos irnos a casa lo más rápido posible.
- Seguimos con el juego -dijo Kyle cuando entramos al departamento- ¿Verdad o reto Di?
- Verdad.
- ¿Tuviste un primer beso?
Okay, debo admitir que esa pregunta me puso en trance. Me removí incómoda en el sillón y decidí responderla. Era mi mejor amigo ¿Que podía hacer?
- No. ¿Verdad o reto?
- Verdad.
- La misma pregunta.
- No.
Quedé sorprendida por un momento. Tuvo millones de novias, ¿jamas besó a ninguna?
- ¿Que?
- Se que piensas que tuve varias novias. Y no, no las besé. Se crearon una imagen falsa de mi, yo quería que ese beso fuera con alguien especial. Alguien a quien de verdad amara.
Sonreí y estiré sus mejillas.
- Eres tan tierno.
- Lo sé, lo sé -respondió- ¿Verdad o reto?
- Reto.
Lo miré por un momento a los ojos. Esos ojos azules que podían transportar a otro mundo a cualquiera. Eran una de las razones por las que varias chicas habían caído en sus juegos alguna vez.
Me levanté del sillón y me dirigí a la cocina. Al volver, puse un tarrito de canela en polvo en la mesita, junto a una cuchara sopera.
- ¿Cuanto?
Hizo una mueca y trató de alejarse de mi.
- Ni lo sueñes Di. Si lo hago, tu vas a limpiar todo el desastre.
- Será parte de tu reto, Thomas. Limpiaras esto luego. Ahora veamos cuanto puedes aguantar -dije llevando la cuchara con canela a su boca, y metiéndola. Se quedó con los ojos bien abiertos y luego de un minuto, explotó.
La canela voló por todos lados, ensuciando el suelo y el sillón. Empecé a reírme como loca al ver su cara, volteó a verme y me señaló con el dedo.
- Ya verás Di.
- Lo que digas, Kyle. Ahora limpia esto.
Buscó la aspiradora y limpió todo lo que había escupido. Dejó la sala tal y como estaba, y se sentó a mi lado.
- ¿Verdad o reto, Aigner?
- Verdad, Thomas.
Se quedó pensando por un tiempo, y preguntó.
- ¿Haz ido a clases de danza antes, cierto?
Asentí sonriendo de lado.
- ¿Verdad o reto?
- Verdad.
- ¿Que soy para ti?
Se quedó en silencio por varios minutos, mirándome fijamente a los ojos.
- Mi todo. Mi mejor amiga, confidente y la única que siempre esta a mi lado para apoyarme.
Me acerqué a él y lo abracé con todas mis fuerzas. Nunca nadie me había dicho eso, ni siquiera mis padres. Valoraba bastante que él lo hiciera.
- Gracias por ser mi amiga Di.
- De nada Kyle.
Nos separamos y volvió a preguntar.
- ¿Verdad o reto?
- Reto.
- Te reto a que me enseñes a bailar.
Abrí mi boca un poco, sorprendida por su pedido.
- ¿Que?
- Dale -dijo levantándose y extendiendo su mano para que yo lo hiciera. La tomé y me puse de pie, aún sorprendida- Ponla en aleatorio, a ver que sale -añadió señalando mi celular. Sólo asentí y puse el reproductor en aleatorio.
Empezó a sonar ‘Dangerously’ de fondo. Me acerqué a él y tomé sus manos enredándolas en mi cintura. Puse las mías en su cuello y empezamos a movernos al compás de la canción. Pasos lentos, suaves y con un ritmo perfecto.
Apoyó su barbilla en mi cuello y yo hundí mi cabeza en el suyo, aspirando su aroma. Me separó de él y me levantó dándome vueltas alrededor de la habitación. Sonreí abiertamente hasta que me dejó en el suelo, volviendo a bailar al ritmo de antes. Hicimos un contacto visual tan fuerte, que nos costaba romperlo, hasta que terminó la canción.
Nos quedamos quietos. En la misma posición: sus manos en mi cintura y las mías rodeando su cuello.
Se acercó a mi lentamente e hice lo mismo hasta sentir su respiración en mi nariz. Nos miramos nuevamente, su mirada azulada y la mía café.
Pongan ‘pause’ nuevamente.
Meditemos por un momento.
Kyle era mi mejor amigo, mi hermano.
Todas alguna vez hemos empezado a sentir cosas por nuestro mejor amigo, en los mejores casos siempre termina bien. Pero en otros simplemente la amistad queda en el olvido.
Tomen nota de eso.
Supongo que no quiso arriesgarse o que pensaba que yo no quería hacerlo. No lo se...
Pero sólo besó mi nariz.
No me molesté, no tenía porqué hacerlo. De hecho me sentí aliviada, porque no nos liaríamos todos los días, ocultándonos el uno del otro por temor a lo que pensáramos.
Reí ante el contacto y lo abracé fuertemente.
- Reto cumplido querido.
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Cupcake de Cereza.
RandomCafetería "Paradise", 3:30 P.M. - Un capuchino y un cupcake de cereza, por favor.