Be my boyfriend [ChanSoo]

Capítulo 16

—Hmm.. Do Kyungsoo está siendo romántico —mencionó con una sonrisa, acariciando tiernamente las regordetas mejillas entre sus manos. Chanyeol abrió sus ojos para mirar los contrarios que se abrieron al mismo tiempo—. Es algo totalmente inesperado, te he escuchado tantas veces quejarte de esto que me es un poco extraño, pero admitire que me gusta esta nueva actitud tuya.

—¿Huh? —las mejillas de Kyungsoo volvieron a sonrojarse, sus ojos se abrieron mucho más por la sorpresa y su entrecejo pronto estuvo fruncido. Con su puño cerrado y sin aplicar tanta fuerza le dio un ligero golpe en el pecho por ser el motivo de su nuevo sonrojo, antes de aclarar—. No estaba siendo romántico, sólo estaba diciendo la verdad.

Y era cierto, él no es ni espera ser romántico, no ahora, no nunca. Kyungsoo detesta ver a las personas derramar miel, y si bien a veces disfruta de ver alguna que otra película con algo de romance, siempre rodaba los ojos en esas escenas. Así que si lo que le dijo a Chanyeol minutos antes para él sonó romántico, probablemente fue porque las palabras habían salido solas desde lo más profundo de su corazón.

—Ah, mirate, señor no entiendo porque sus mejillas se sonrojan cada que se miran —se burló el más alto ampliando la sonrisa en su rostro—. Estas sonrojado otra vez.

—Para ya, Park —advirtió, escuchándolo reír divertido—. No hagas que me arrepienta de haberte dicho que me gustas.

—Dilo una vez más.

—¿Que diga, qué?

—Lo que dijiste hace un minuto, dilo de nuevo —pidió emocionado—. Quiero escucharte decirlo otra vez.

—Hmm —aceptó en un murmuro, con un ligero asentimiento y confundido por la petición del otro—. No hagas que...

—No —Chanyeol negó con la cabeza, cubriendo los acorazonados labios con su pulgar, evitando así que pudiese continuar—. Dí sólo lo último.

—Ahh —cuando por fin cayó en cuenta de su petición, le mostró una sonrisa burlona antes de preguntar, evidentemente haciéndose el desentendido—. ¿Qué cosa?, ¿Chanyeol?

—No, Kyungsoo-ah.. —canturreo formando un pequeño puchero con sus labios y dedicándole una mirada suplicante, justo como haría un niño cuando su madre no quiere comprarle algo—. Sabes de qué estoy hablando.

Kyungsoo soltó una risita, mordiendo suavemente su labio y soltando un largo suspiro todavía sin poder creer que volvería a decir aquellas palabras que ni en sus más retorcidos sueños imagino que diría algún día.

—Me gustas, Chanyeol.

Y para su chico alto, oírlo repetir las mismas palabras le hizo sentir como si esa hubiese sido la primera vez que lo escucha decirlo; con su corazón latiendo emocionado, la sonrisa extendiéndose por todo su rostro y la emoción revoloteando en su estómago.

Sin poder resistirse, Chanyeol apresó entre sus brazos por primera vez en un largo tiempo, el pequeño cuerpo de su amigo quien inmediatamente correspondió feliz a aquel encuentro entre sus cuerpos. Con la llegada de la noche, el sereno y el frío viento corriendo por ahí, además de las gotas de lluvia mojandolos, su temperatura corporal disminuyó, por lo que para ambos era realmente placentero compartir su calor.

—No deberíamos seguir aquí, podrías enfermar —dijo Chanyeol con preocupación, por unos minutos había olvidado completamente que aún permanecían bajo la lluvia, y sólo pudo recordarlo tras sentir como el cuerpo de Kyungsoo temblaba sobre el suyo—. ¿Tienes frío?

—Sí, un poco —admitió aferrándose al cuerpo contrario.

—Había traído el paraguas para cubrirte y así evitar que te mojaras y no enfermaras después, pero míranos —frunció el ceño, molesto consigo mismo por haber sido tan torpe—. ¡Lo he arruinado!