[Finale 2/2: The Talk]

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Pov. Izuku:

-Dios mío! Izuku! Q-Qué pasó?!- Gritaba desesperada mi madre.

-ESTOY BIEN, MAMÁ! Pero necesito saber de Shocchan!- Dije, intentando zafarme de su agarre.

-Ah, no! No vas a ir a ningún lado!- Apretó más mi muñeca. Ya estaba a mi límite.

-YA SUÉLTAME, QUIERO VER A SHOCCHAN!- Mi madre me miró sorprendida. Después de todo sí tenía una pequeña y jodida razón para estar en mi situación.

No me podía acercar mucho, pero logré ver como una enfermera cargaba a Shocchan hasta la ambulancia. Volvieron esas náuseas, con la culpa de no poder haber evitado lo ocurrido.

[•••]

Estábamos en la sala de espera, sentado en una silla con mi mamá a mi lado, que me miraba preocupada porque mis ojos no se despegaban de un punto fijo;

La puerta.

Hace unas horas Shoto había entrado de urgencia al hospital, pero ahora simplemente esperábamos que la enfermera nos dejara pasar a verlo en cuanto despertase.

Luego de unos minutos esperando, llegó un hombre de semblante brusco, ojos azules y cabello rojo como el fuego.

"El padre de Shocchan..."

Me sorprendió muchísimo el cómo entró en la habitación sin siquiera tocar la puerta. Iba a asomarme pero mi madre me tenía bien sujeto de la mano, así que sólo pude escuchar lo descarado que era el hombre.

-S-Señor Todoroki! E-Eh... S-Su hijo podrá salir en unos días, cuando el médico le dé el alta...- Se oía a la que aparentaba ser enfermera aterrada. No me imaginaba lo que debía ser vivir con él, para que Shocchan fuese así de dócil y débil en algunos aspectos...

-No me importa, se lo puede tratar en casa- El pelirrojo dijo, indiferente a la actitud de su propio hijo. Qué imbécil.

-N-No creo, e-es decir... Incluso tiene varios psiquiátricos recomendados para volver a atenderlo...- Noté como la enfermera escogía cuidadosamente sus palabras, como si hablara con una bestia que podía atacar si se ofendía.

-Se supone que ya está curado y listo para volver a entrenar, no aceptaré que uno de mis hijos tenga problemas mentales sólo por ser débil- Exigió con rudeza, a mí sólo se me vino la imagen a la cabeza de como la mujer de cabellos negros debía estar temblando.

-N-No! Yo soy la médica de Shouto-kun​ ahora y sé lo que le conviene...

-Y yo soy su padre, y puedo despedirte si quiero, Kayama- No resistí y me asomé por la pequeña ventana, encontrándome una escena un tanto peculiar. La mujer miraba preocupada a Shocchan (quien llevaba una mascarilla de aire médica con varios tubos conectados a él) y su terrorífico padre miraba amenazante y frío a ambos.

Pero, para arruinar mi espionaje, el señor tuvo que voltear hacia la puerta.

-EY TÚ! QUÉ CREES QUE HACES, MOCOSO?!- Me alejé y la puerta se abrió de golpe mostrando al padre de Shouto ahora rojo de rabia.

-Y-Yo...

-La única que puede hablarle demandante a Izuku soy yo! Sentí como mi madre se colocaba delante de mí empujándome un poco hacia atrás.

-Y usted quién es?!- Ese tipo le gritaba a mi madre. Y ella qué había hecho? Sólo estaba reclamando su posición como progenitora!

-Es mí hijo, no el suyo... Y si me disculpa, esa no es forma de tratar a un niño.

-Qué?

-No soy sorda, Todoroki-san! Incluso si no me asomé como mi hijo- se detuvo y me miró por una fracción de segundo, algo avergonzada- Pude escuchar perfectamente, y ese no es el trato que debería darse a un infante!- El señor Todoroki siguió en silencio.

Letal [Revisando(?)]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora