Junto con Dave esperamos a que fuera la siguiente clase para poder entrar al respectivo salón.
Cuando sonó la campana Dave se fue un momento ya que quería ir al baño. Solté una risita y dije que fuera.
Caminé hasta el salón en soledad pero algo detuvo mi camino:
- Tenemos que hablar - su voz, lo que más podía reconocer era su perfecta voz.
- ¿Qué? - volteé y lo miré a la cara.
- Acompañame por favor - pidió tomando mis manos.
- No - me solté bruscamente.
- Por favor Lily, tienes que saber la verdad.
Verdad, ¿Cuál verdad?
- ¿Qué verdad? - pregunte un tanto enojada con su presencia.
- ¿Puedes venir? - suplicó con un puchero muy tierno.
- Tengo que entrar a mi clase, lo siento - volví a voltear con la intención de irme de ahí.
Volvió a poner su mano en mi hombro. Rodeé los ojos.
- ¿Qué quieres? - suspiré cansada.
- Sólo ven - tomó mi mano y me dirigió al patio, el mismo lugar donde me terminó.
No me quedo más opción que seguirlo. Llegamos y se plato en frente mío.
- Tienes que saber la verdad, ya no puedo seguir con esto - suspiro - yo termine contigo por-
Lo corté.
- Ya sé Justin, terminaste conmigo porque querías conservar tu estúpido puesto de trabajo - rodeé los ojos.
- ¿Qué? - frunció el ceño.
- Sí querías recordarme lo miserable que soy, no era necesario - mi voz se corto y limpie con brusquedad algunas lágrimas que habían caído por mis mejillas.
Me volteé con dirección a la puerta de salida, solo quería encerrarme en mi cuarto y llorar.
- ¡No, Lily! ¡Así no fueron las cosas! - exclamó, pero no volteé.
Sentí sus pasos detrás de los míos así que empecé a correr.
¿Acaso no entiende que él me hace daño?
Llegué a mi casa corriendo, no veía por las lágrimas y tampoco escuchaba nada, me encontraba aturdida. Entre como pude y tiré las llaves a un lado de la mesa.
Eran las 11 de la mañana y por ende no había nadie.
Subí a mi habitación y me encerré en esta. Me senté en el suelo con mi espalda apoyada en la cama y lloré, lloré y lloré como si no hubiera un mañana.
Mis manos empezaron a picar, pero no debía hacerlo. Dave dijo que no debería.
Me resistí por unos minutos, pero no pude más. Tomé una navaja de unos de mis cajones y la miré unos minutos.
No sabia que hacer, era un maldito desastre.
Sentí un golpe en la parte de abajo de la casa y luego pisadas rápidas que venían de la escalera.
No le tome importancia y ese fue mi error. Seguí llorando con la navaja en mi mano y mis mejillas mojadas.
Acerqué el filo de metal a mi muñeca y pronto un pequeño hilo de sangre salió de mi brazo. Suspiré, dolía, pero no tanto.
Miré la sangre en mi brazo y el remordimiento se hizo presente. Le falle a Dave, soy una mierda.
Un golpe cercano me hizo levantar la cabeza y me asuste de inmediato al ver a la persona frente a mi.
- ¿Qué estás haciendo? - susurró con cautela.
- Nada - escondí mi brazo detrás de mi espalda - ¿Qué haces aquí Justin? ¡Lárgate! - exclamé.
- Muestramé tu brazo - se acercó poco a poco.
- No maldita sea, vete - dije intentando sonar enojada, pero solo quería llorar.
Se arrodilló para quedar a mi altura y saco mi brazo de su escondite.
- Qué mierda - mi miró con una expresión de espanto marcada en su rostro - Lily - susurró.
- Déjame Justin, vete - mi voz se rompió y volví a llorar - Vete y déjame sola.
- No Lily, tienes que escucharme - unas cuantas lágrimas cayeron por sus mejillas.
No respondí, me dediqué a llorar.
Sentí sus brazos rodearme, mi cerebro quería que se aleje pero mi corazón solo quería que me quedara toda la vida entre sus brazos, así que eso hice.
Empecé a sollozar incansablemente, mientras su camisa secaba mis lágrimas llenas de dolor.
- Perdóname por favor - susurro con la voz rota - fui un completo estúpido, pero tienes que saber la verdad - levanté mi cabeza para verlo.
>> - Bueno, después de nuestro accidente me dijeron que a mi madre le diagnosticaron cáncer - abrí los ojos - no tenia como pagar su tratamiento y bueno, como ya sabes Selena esta enamorada de mi y al parecer se enteró de la situación y le dijo a su padre que me ayudara ya que así ella pensaba que yo volvería con ella, cosa que yo no iba a hacer. Entonces su padre al darse cuenta de eso me dijo que me ayudaba con la condición de que yo estuviera con ella - tomó aire - y yo acepte, me encontraba desesperado, quería salvar a mi madre, y no sabia que hacer así que sólo dije que si y firme un estúpido contrato donde decía que todo terminaría a fin de año, osea en unos meses, así que luego tuve que terminar contigo y estuve con Selena por todo este tiempo. Pensaba terminar el contrato y luego decirte la verdad, pero hoy me llamo el idiota de Des y me amenazó. Dijo que tenía que pedirle matrimonio a su hija o si no te iban a hacer daño y ya no ayudarían a mi mama - se seco la lágrimas - y yo no quiero casarme con ella, porque yo te amo a ti Lily, jamás deje de amarte - tomó mis manos con delicadeza ignorando la sangre que empezaba a secarse.
No sabia que decir, esto era mucha información.
- Yo eso no lo sabía - susurré como idiota.
- Por eso te lo tenia que decir - sonrío de lado.
Suspiré sin saber que hacer.
- Yo también te amo Justin - lo miré a los ojos.
Sonrío y empezó a acercarse lentamente. Sonreí un poco y con la mano que no tenía sagre tome su mejilla y junte nuestros labios.
Todo mi mundo se volvió a juntar con ese beso, el moviendo de nuestros labios era una cosa impresionante, como si estuvieran hechos para encajar con el otro.
Nos separamos luego de unos segundos y lo miré a los ojos.
No sabía si creerle, no sabía que hacer. En verdad amaba a Justin, pero el me hizo daño.
Todo era confuso.
***
Espero que les haya gustadooooo.
Voten y comenten.
L@s quieroooo.
Nos leemos luego ♡.
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Mi Profesor
FanfictionPor tu culpa me hice daño, pero tu mismo fuiste el que curó mis heridas.