10| Tengo miedo, Nik.

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"Si tu supieras cuánto pintas en mi vida, no tendrías más salida que vivirla junto a mí"Sergio Dalma

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"Si tu supieras cuánto pintas en mi vida, no tendrías más salida que vivirla junto a mí"
Sergio Dalma

Niklas Heine:

Perdonar...
El perdón nos ayuda a liberarnos de las cargas, nos ayuda a liberarnos del rencor y nos hace más humanos y humildes. Perdonar es muy difícil, sin embargo, es posible perdonar si aceptamos que somos humanos, que erramos y que todo el mundo merece una segunda oportunidad. Lo cierto es que, perdonar a alguien que te ha jodido es duro, pero es más duro saber que le puedes perdonar aunque no quieras hacerlo.

Es jodidamente difícil dar el brazo a torcer.

Y para ella no era la excepción.

Habíamos quedado en que trataríamos de llevar "la fiesta en paz", que trataríamos de entendernos; pero lo cierto es que ninguno de los dos podía cerrar los ojos y luego hacer como si nada hubiese pasado. Para mí era imposible, por qué yo aún la amaba y para ella lo era, por qué muy en el fondo de su corazón, no había podido perdonarme del todo.

Y la entendía perfectamente.

Juro que lo hacía.

¿Cómo no hacerlo?  Muchas veces me reproché a mí mismo el hecho de haberme dado por vencido tan fácilmente...de haber elegido por ella también; pero lo cierto es que siempre llego a la misma conclusión : Fue lo mejor para los dos. Y juro que pensé que sería aun más lo mejor para ella...aunque duele darme cuenta que no es así, que ha llegado hasta este punto.

Salomé siempre fue terca pero a la vez tenía un corazón blando; uno que solía dejar a un lado y le daba más valor a los demás. Para ella siempre estaba el resto primero y después ella, y no niego que esa era una de las cosas que más me gustaba de ella. Su amor por el prójimo, por los demás.

Pero jamás imaginé que llegaría hasta este punto.

Me dolía verla así, tan débil.

—Por favor abre la puerta, permíteme hablar contigo. Realmente lo lamento.

Seguí insistiendo por enésima vez sin recibir respuesta alguna de su parte.

—Está bien—dije dándome por vencido— No tengo otras opciones que digamos, así que me quedaré aquí afuera esperándote. En algún momento tendrás que salir al baño o a comer.

Esperé unos minutos sentado sobre una pequeña banca. El piso estaba muy frío cómo para sentarme ahí.

Por un buen rato no sucedió nada.

De repente escuché cómo abrían la puerta lentamente, así que me levanté de la silla y me paré justo en frente de ella.

Bajo sus hermosos ojos se dibujaban dos bolsillas oscuras a causa de tanto llorar. Su semblante era devastador. Tragué en seco al verla.

NIKLAS II (As long as you love me) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora