○Capítulo 27○

876 90 84
                                    

-Jack-

Eugene y Rapunzel junto con Yerai decidieron irse cuando sintieron el ambiente denso. Llegaron a la rápida conclusión de que necesitábamos estar solos y la verdad es que sí. Le necesitaba aclarar varias cosas al señor Arendelle, cosas que no me había atrevido a mencionarle y el necesitaba saberlo. Quedamos completamente a solas y un silencio nos inundó, el cual yo estuve a punto de cortar cuando abrí la boca para articular palabra, pero él se adelantó.

—E-explícame, ¿Cómo es eso de que... Mi hija esta embarazada...?... Y-ya no entendí esa parte —Me pasé una mano por el rostro. Sentía un tipo de enorme culpabilidad decírselo, también sentía pesar y un nudo en la garganta que me impedía decírselo con claridad.

Tome aire en un intento de darme valor, luego exhale profundamente —E-es que... Ah —Balbucee. Me puse de pie del sillón y me lleve una mano a la barbilla y baje la mirada para no encarar al hombre —N-no pude protegerla como hubiera querido. Creo que le falle —Me mordí el labio inferior —, el hombre que la retiene —Trague pesado —abuso de Elsa, él no los dijo —Ya no lo saque tan impulsivamente como lo había hecho antes.

Escuché como el hombre bufo y luego gruño dándole un puño al brazo del sillón —Ese maldito desgraciado —Vocifero en una cólera total —Jack, necesitamos encontrarlo ya, ¡Ese maldito le está haciendo mucho daño a mi hija! Pobre de mi pequeña, ¡Debe estar sufriendo mucho! ¡Ya la quiero de nuevo conmigo! Ya no quiero que sufra mas—Su voz se quebró, ya no sonaba como ese hombre duro, serio y correcto. Esta es una nueva faceta que experimentamos juntos. Le agradeceré para siempre el que no me deje solo y me deje consolarlo y que él me consuele a mí.

—Lo siento —Le repetí mi lamento —, lo siento tanto. Es mi culpa, señor Arendelle. Si yo la hubiera protegido como se debe, si la hubiese cuidado. Si no me hubiera despegado de ella ni por unos instantes ella estaría aquí y nada de esto habría pasado. Es toda mi culpa y solo mía.

El inhalo y exhalo para tranquilizarse. Se detuvo y no hizo más que serenar sus bufidos y gruñidos colericos—No, Jack. No, no. No es tu culpa, yo se que mi hija esta en buenas manos contigo. Eres un excelente hombre, no te lamentes de nada. Ya no te tortures mas de lo que ya estas, hay que trabajar juntos, con la frente en alto para hacer que Elsa vuelva —Subí la mirarla para mirarlo. Su mano posaba en su frente y apretaba los labios haciendo una tensa línea recta.

—Señor Arendelle, yo...

—Agnarr —Me interrumpió y ladeo una corta sonrisa confortable al destapar titubeantemente sus ojos cristalinos.

—Señor Agnarr —Me corregí—, le prometo que ahora más que nada lucharé para sacar a Elsa de ahí. Ya se de lo que es capaz ese hombre. Aster —Escupí con odio arrugando la nariz —. Asesino sin piedad a Pitch, un hombre inocente que se arriesgó por efectivo. Él iba a sacar a Elsa de ahí, pero su plan que parecía ser muy brillante falló —Me relamí los labios y le miré seriamente al hombre —sé que no dudará nada en hacerme algún daño a mí. Debo cuidarme la espalda. A partir de hoy dormiré con un ojo bien abierto.

El pelirrojo hombre se puso de pie y se colocó delante de mí, imponiéndome ante su percha admirable y su altura —Cuenta conmigo —Poso su pesada mano en mi hombro reconfortándome y dándome un poquito de tranquilidad.

—Muchas gracias —Fruncí mi entrecejo —le prometo que esta vez no fallaré. Mañana mismo iré a buscar a Lottie, no me importa si me topo con ese hombre, no me importa ya nada. Me veré con Lottie y le diré que clase de empleado tiene.

Él separo los parpados sorpresivamente —Jack, no. Eso es muy riesgoso, no sería bueno que el te viera. Podría hacerte algo o algo como huir. No quiero que huya. Elsa debe volver.

Another Stalker |#2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora