No me desafíes

Capítulo 3

PIERE

Imbécil, soy un imbécil. Nunca supuse que Lara iba a aparecer así de repente y menos en el momento en que estaba con Gi declarándole todo lo que había estado sintiendo por ella durante todos estos años.

Lara era una de las tantas conquistas que había tenido durante estos últimos meses, y la cual en una noche de borrachera termino siendo mi novia y después al no saber cómo deshacerme de ella, dejé las cosas tal cual estaban, total no me influía en nada, ella aparecía de vez en cuando, no me molestaba, desaparecía y volvía a parecer cuando tenía ganas de sexo, pero de todos los putos días en los que aparecía, por qué justo hoy, y encima alegando y echándole en lcara a Gi que era mi novia, lo cual no podía desmentir porque era verdad.

Nada me destrozó más que ver el rostro de Gi, y esos ojos hermosos de hechicera verse nublados por lagrimas a punto de derramar, no la pude retener y solo pude escuchar cómo me insultaba llena de odio y con toda la razón del mundo para luego verla marchar en un taxi.

Pero esto no iba a quedar así, con todas las decisiones tomadas, me gire y me dirigí a Lara. Al acercarme ella quizo enredarse en mi en un abrazo a lo cual me negué, sacando sus brazos de encima de mí.

Ya no había argumento válido para seguir en una relación que ni siquiera llegaba a ser relación, dije todo lo que tenía que decir, ella largó un par de lagrimas de cocodrilo, me dijo que era una mierda lo cual no me importó, ya que los únicos insultos que me habían quebrado en mil pedazos eran los de Gi.

Luego de terminar la relación con Lara no me quedo de otra que volver al bar, mis amigos aún estaban allí, pero la que más me preocupó que estuviera era Tara.

Mis amigos ya me conocían, sabían lo que podría haber pasado y sabían que tenían que dejarme así, pero Tara se me acerco y me dijo que nos metiéramos en mi oficina donde hubiera mas silencio, que iba a hablar conmigo.

Cualquier cosa sería mejor que una conversación con mi hermana en este momento, ya que ella era peor que mamá, ella siempre fue mi confidente, ella me observa y para ella soy cómo un libro abierto, conoce cada detalle de mi persona.

Una vez que nos sentamos en la oficina ella comienza a hablar

- Tú la amas

- ¿Qué?

- Sabes de qué hablo, a lo mejor no te das cuenta aún, pero no solo te gusta, tú la amas, y no es de ahora

- Sea o no de ahora ya no importa

- Claro que importa Piere, desde cuando nuestros corazones y sentimientos no importan

- Tara, no entiendes. La cagué monumentalmente

- Pues solucionalo

- No se si pueda

- ¿Por qué no?

Paso a contarle todo lo que pasó en el estacionamiento, la cara de mi hermana es un poema, y pasa de estar seria a reírse a carcajadas

- Tara, ¿Te estás riendo de mis desgracias?

- Ay, que exagerado eres hermanito, yo solo me rio de lo imbéciles que pueden ser los hombres.

- Gracias, serás tonta

- Tonta a veces, pero nunca cobarde a la hora de luchar por lo que amo, tu bien sabes todo lo que pasé con Bastian y te aseguro que lo volvería a pasar si eso me lleva a este mismo momento de mi vida en el cual lo tengo a él y a mis dos príncipes.

- Sé que sí Tara, pero no sé qué hacer

Tara se puso de pie para marcharse, pero en el momento que estaba agarrando el picaporte de la puerta de la oficina, justo cuando creí que me iba a dejar ahí sin darme uno solo de sus sabios consejos me dijo algo que me dio la pauta de que lucharía hasta el último por estar con Gi a pesar de que sabía me costaría horrores.

- Tal vez estoy violando alguna regla no escrita en el código de amistad al decirte esto, pero te amo Piere eres mi hermano y amo a Gi es mi mejor amiga desde que somos pequeñas, y quiero que sean felices si es lo que está escrito en el destino, ella lleva 25 de sus 30 años enamorada de ti, tú eres la causa de que ella no haya empezado nada con nadie, ella mantenía la esperanza de que tu algun día te fijaras en ella, se aferró a lo que sentía por ti y tu ni cuenta te dabas y yo no dije nada por que creí que tu no sentías nada, pero al ver tu reacción de hoy ya no puedo callar, Gi siempre dijo que mientras tu estuvieras soltero sin compromiso ella se aferraría a la esperanza de tenerte en su vida y en su corazón. Así que viendo y consierando que ella en este momento cree que tu tienes novia, te recomiendo que te apresures, por que no te das una idea de la fila de hombres que están esperando a que ella deje de amarte para lograr tratar de conquistar su corazón.

Me levanté de la silla y fui directo a abrazar a mi hermana, ella siempre estuvo para mí y me seguía comprobando que siempre lo haría, mi pequeña hermana ya era una mujer casada, una madre, pero nunca dejaría de ser mi hermana y consejera y la amaba con todo mi corazón por ello.

- Gracias pequeña, te amo. Extrañaba esto

- De nada mi gigante, también te extrañado y no te he dejado de amar a pesar de lo tonto que eres a veces, ahora no la dejes escapar por mas difícil que te ponga el camino, sabes lo testaruda que es Gi

- Si lo sé pero te aseguro que va a ser mia

- Exitos hermanito

Me dio un beso en la mejilla y procedió a salir de mi oficina dejándome solo con mis pensamientos. Hoy empezaba la primera parte del plan para conquistar a Gi, ella va a ser mia, ahora que se lo que se no había nada que evitara que ella formara parte de mi vida.