Todo era nuevo para ella, Martina era nueva en la ciudad. Hace dos días que había dejado a su familia, amigos y a su perro Ron, de los que nunca se había separado, en su ciudad, Cádiz. Ahora tenía que empezar una nueva vida.
Todavía quedaba una semana para el master que iba a comenzar, había acabado la carrera de psicología y quería completar sus estudios en Madrid con el Máster en Psicología de la Actividad Física y el Deporte, en un futuro le gustaría poder ayudar a formar especialistas que intervengan en el ámbito deportivo. Desde que estudió en la carrera temas relacionados con esto ya le había llamado la atención y ahora iba a especializarse en ello.
Viviría con un chico y una chica, pero todavía no habían llegado. Tenía mucho tiempo libre, ya había ordenado la casa en la que iba a vivir varias veces y no sabía que más hacer. No conocía a nadie en la ciudad y decidió salir a dar un paseo y descubrir los rincones de por allí. Era septiembre así que se puso un vestido veraniego y se fue.
Iba caminando distraída observando los pequeños detalles de las calles y recordando el camino a casa, no se orientaba muy bien así que recordaba un tienda de cada calle para la vuelta a casa, también leía carteles de anuncios a ver si alguno le podía interesar ya que aún no había empezado el master y tenía mucho tiempo libre; uno le llamó la atención "clases de pintura" en un centro social de su nuevo barrio, siempre le había gustado la pintura y hace tres años que la había dejado apartada por la falta de tiempo, era momento de retomar, "mañana iré a preguntar" pensó.
Al día siguiente Martina se despertó y tras desayunar dos tostadas con tomate y café (su desayuno favorito) fue directa al centro social a preguntar. Allí dos chicas muy amables le atendieron y dieron información sobre las clases, si quería podía empezar esa misma tarde. Era jueves y las clases se impartían los martes y jueves, sin pensarlo dos veces accedió. Salió de allí y se fue a comprar algunos materiales que necesitaba.
Llego el comienzo de la clase, todos y todas se presentaron para conocerse mejor –era principio de curso y el curso de pintura había comenzado esa semana- llego el turno de Martina y contó que había estudiado psicología, iba a empezar un master...en resumen, su situación actual.
Pasaba el tiempo y cogieron como costumbre ir a tomar algo después de clase, eran un grupo pequeño y Martina cogió confianza con ellos, en especial con un chico del grupo, Daniel, de unos veintitrés años, el domingo Daniel le invitó a que fuera con él y unos cuantos amigos y amigas a tomar algo a la hora del vermú, por supuesto ella accedió.
Llego el domingo y se presentó con él y su grupo, era gente diversa, de distintas edades y gustos. Al principio le pareció un poco extraño ver gente de edades tan variadas juntas, además también le llamo la atención su vestimenta, extremadamente recatada, pero todos y todas la trataron con mucho cariño y se interesaron mucho por ella, sus gustos...Martina estaba sola en la ciudad y echaba de menos sentir ese ambiente de grupo, de que se preocuparan por lo que sentía, por cómo estaba...así que se sintió muy a gusto rodeada de esa gente. La tarde pasó muy rápido y cuando llegaron las ocho la invitaron a ir con ella a un local que tenían, Martina estaba cansada y tenía algunas tareas que hacer, quedó con Daniel en verse al día siguiente en clase de teatro, se despidió y se fue.
Paso el tiempo, Martina hacia su vida pero cada vez se juntaba más con ellos y ellas, ya había ido a su local, estaba lleno de cristos, vírgenes...eran muy religiosos, pero la trataban tan bien y se sentía tan a gusto con ellos que no le dio tanta importancia. Además también ayudaban a asociaciones y centros sociales de gente sin techo, daban meriendas los jueves a gente que lo necesitaba...así que ella no lo veía algo malo, aunque su familia nunca había sido religiosa y ella ni siquiera estaba bautizada.
Muchas veces pensaba en esos temas ahora que participaba repetidas veces con su grupo, algunas amigas del máster decían que veían algo raro en ese "grupo" con el que se había juntado tanto últimamente, pero a ella no le importaba, además estaba Daniel, con quien las cosas cada vez iban mejor, lentas, pero avanzaban, eso no le permitía ver todo lo que estas amigas le decían, pensaba "vosotras no les conocéis, no tiene nada de malo como creéis".
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Martina y su nueva vida
Kısa HikayeMartina es una chica que nunca ha salido de su zona de confort y por circunstancias de su vida debe mudarse a una nueva ciudad.