Just Blard.

18:30

Blard ya se estaba preparando para irse a su turno del trabajo nocturno, iba a ir a su tienda la cual siempre estaba más alejada para poder descansar, hasta las telas que eran usadas tenían magia para insonorizar el ruido exterior, se iba a poner las antorchas en las cintas que tenía amarradas en sus piernas para un agarre rápido cuando varios niños abrazaron sus pantorrillas con una mirada de angelitos, debilidad para el mayor.

"¡Señor Blard, por favor, baile con nosotros!"

A lo lejos se podía escuchar el sonido de las guitarras, uno de sus favoritos que aún no sabía tocar aunque realmente quería aprender, observó el cielo y suponiendo que aún teniendo tiempo rió con gravedad, corto y simple.

"Bien, vamos."

Las sonrisas de los pequeños monstruos se ampliaron y felices tiraron de las manos de Blard para llevarlo hasta el centro, no tardaron para que los demás comenzaran a acercarse a él o en parejas alrededor del fuego para bailar alegremente, no era su fuerte pero lo disfrutaba.

Aunque mucha gente crea que él era apartado, Blard amaba pasar rato con los demás, como siempre se decía, lo sacaban de su pesada rutina.