Only for you; Fillie

14: "Muerta"

Millie empujó al mayor con todas sus fuerzas, logrando al menos moverlo un poco.

- Demonios ya muevete.- dijo algo incomoda.

- ¿No te gusta el cierto?

- ¿Por que no regresas con Iris?

- Por que no quiero

- ¿Por que no? Anda se hace tarde

- Quiero estar solo contigo Mills.

Las palabras que salieron de los labios de Finn retumbaba en la cabeza de la muchacha, "Quiero estar solo contigo Mills" esa pequeña oración paso por su cabeza una y otra vez como un disco rayado.

El mayor puso una mano en el brazo de Millie y lo acarició lentamente, la piel de la joven muchacha se erizo al instante.

- Lo siento si pensaste que me canse de esperarte.- dijo con la cabeza gacha.- No lo hice solo... Ni yo se por que hago cosas tan estúpidas.

El pelinegro paso una mano por su cabello y dejo a la castaña libre. Ella lo miro atenta, sabia que el diría algo más.

- Es solo que... ¡Es que me gustas muchísimo Mills!.- se sentó en el sillón con las manos entre la cabeza.- No... No me gustas... Me encantas.... ¡Demonios me encantas!

Millie se acerco al joven y se sentó a su lado, le dio un beso en la mejilla y se acurrucó en su pecho haciendo que el se entrara normal para darle espacio.

- Lo siento.- dijo de nuevo.

- No digas nada más

Ambos se quedaron en el sillón, Millie le hablaba sobre un tema sin sentido, al menos para Finn no tenia sentido, pues el pelinegro estaba admirando las facciones del rostro de la muchacha.

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- ¡Demonios arruinaste mi plan de venganza!.- dijo sadie.

Millie río.

- No sadie, la venganza mata el alma y la envenena.- dijo Wyatt poniendo pose diva.- pero cuando te traicionan si vale la pena.

Ambas chicas rieron.

Millie le había contado a Wyatt y a Sadie lo que había pasado con Finn un día anterior, Millie recibió unos pequeños regaños de parte de ambos chicos debido a que perdono muy rápido a Finn.

El timbre de salida sonó, Millie salio corriendo para ver al pelinegro pues el le había prometido que vendría.

La muchacha diviso al chico en medio de toda la gente, se acerco a el y lo saludo con un beso en la mejilla.

- Hoy no iremos a su casa princesa.- dijo Finn sonriente.- Es sorpresa ¡Vamos!

Finn tiro de ella para ir corriendo a quien sabe donde.

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- Espero que tengas tiempo por que estaremos aquí toda la tarde.- dijo Finn.

La castaña y el mayor se encontraban en un parque de diversiones, había gente por doquier, olor a dulce, pequeñas melodías repetitivas de los juegos y cabinas de fotos. Ambos hicieron fila en la boletería y compraron varios boletos de varios colores y para diversos juegos.

Entraron primero a la rueda de la fortuna, luego a la montaña rusa, después entraron a la torre de terror y así siguieron hasta subir a todos los juegos.