The Art of Not Falling in Love (El Arte de no Enamorarse)

4.- Perdido en la Memoria

El cielo dividido...  un fenomeno causado por una sola razon la reunion de los dioses en el olimpo, esto sucede cuando una enorme nube de tormenta inusialmente muy oscura mas que gris con un tono negro acompañada con relampagos, truenos, lluvia y aires huracanados y al mismo tiempo la fuerza de los rayos del sol por el oeste y frente a este del otro lado de la nube la oscuridad de la noche y su manto estelar acaparando el cielo. lo que puede significar una sola cosa... Los dioses se han reunido...

aunque es muy raro el poder presenciar un fenomeno poco natural como este nunca olvidare la primera vez que lo vi eones atras en la Gran reunion, me encontraba en el olimpo cerca de los templos de mi padre observando con curiosidad a los mortales y sus habilidades para aprender las cosas, cuando de pronto en el horizonte pude ver ciertas actividades anormales en el mar, de pronto de este salio una enorme nube gris lo que indicaba que el Rey del mar se dirigia al Templo principal, dejando lluvia e inundaciones a su paso. 

a lo lejos tras maravillarme observando la majestuosidad de uno de los tres mas importantes dioses, algo me hizo observar hacia el cielo infinito del cual el ojo de los mortales no tienen acceso y curioso fue descubrir que justo en la punta del Monte olimpo se encontraban el cielo azul y el manto estelar de la noche ligeramente unidos en un sublime abrazo entre hermanos.

El llamado habia sido hecho, habia algo importante que escuchar, o simplemente era alguna fiesta organizada por Dionisio pero solo habia una manera de descubrirlo y ese era asistiendo al templo prinpipal de rayo el hogar de Zeus

al llegar al Templo del Rayo y cruzar su entrada erguida por enormes columnas pude comprobar la sospecha de la reunion solo era por un motivo de fiesta, y este era el nacimiento de una nueva constelacion bajo el cuidado de Astreo el guardian de las estrellas.

Y asistieron aquellos que pudieron otorgarles divinidad y gracia entre ellos los hermanos gemelos de Apolo y Artemisa respectivos dioses del Dia y la Noche, Guardianes de las dos Llaves de las puertas del Tiempo y Espacio, Palacios que se encontraban en el Sol y La Luna, junto a ellos se econtraban Mis padres, La diosa de la Belleza Afrodita y el dios de La Guerra Ares quienes miraban con atencion especial a aquella constelacion naciente, todo parecia ser dicha y regosijo en el olimpo, sin embargo de pronto una enorme oscuridad se apodero del lugar y con ella 3 sombras se dibujaron en el suelo del palacio, provocando que todos los presentes se pusieran alerta. 

Sin embargo El Gran Zeus y su hermano el Rey Poseidon no se mostraban preocupados, todo lo contrario, al parecer ya esperaban la visita de quien despues nos enteramos era nada mas y nada menos que el Emperador Hades gobernante del Inframundo y Los gemelos Hypnos El Dios del Sueño y Thanatos Dios de la Muerte fieles sirvientes de Hades desde que este les enseño a utilizar sus dones con sabiduria y Justicia. 

-¡Hermanos Mios!.- Exclamo el Emperador del mundo de los muertos tras tomar forma con su semblante imprecionante y unos ojos tan azules que a palabras de mi madre son un Azul Puro, el mas hermoso de todos. 

Los demas dioses asistentes hicieron reverancia al pasar del Dios Hades a Excepcion de sus hermanos Zeus y Poseidon.

-Ha pasado tanto tiempo- Dijo Poseidon al saludar a su hermano Mayor con un abrazo.

-Gran Zeus- exclamo Hades tras hacerle una reverencia a su hermano menos quien ocupaba el trono de Templo Principal. 

-Hermano mio- hablo Zeus mientras hacia un ademan de saludo.- Me alegra tenerte este dia tan especial.- agrego tras levantarse de su trono mientras todos los asistentes observabamos muy atentos y mas al ver por mi parte por primera vez a los Tres Grandes reunidos.

Todo era imprecionante, despues de los saludos a todos por parte del Emperador de los muertos y la introduccion de los Gemelos, Hades comentó el verdadero motivo de su visita que era el darle uno de sus mas preciados dones a la constelacion naciente sorprendiendo por mucho a todos en especial a Thanatos.