El día transcurrió rápido y ya había anochecido, por lo que era hora de preparar la cena para los chicos.
Aunque esperaba no tener que hacerla también para las brujas.
Ellas no cocinan ni huevo, obviamente te obligarán.
Agh, a veces mi consciencia era un estorbo.
-Noona, ¿que edad tienes? -Me preguntó el pequeño Yunho, haciendo su tarea en la mesa de la cocina.
-Calcula cuántos tengo. -Le sonreí mientras preparaba la cena, pasta carbonara.
Yunho se quedó un rato en silencio por lo que supuse que estaba pensando bien mi edad, cosa que me causó gracia.
-¿Diecisiete? -¿Cómo lo supo?, de acuerdo, el niño era bastante listo.
-¡Correcto! - Lo miré sorprendida, Yunho sonrió tímidamente.
-Es que... calculé más o menos con la edad de sehunnie cuántos tendrías... y supuse que eras menor que él un año así que... ta dá.
-Se rió levemente, jugueteando con el lápiz en su mano.Reí negando con la cabeza y seguí encargándome de la cocina.
-Chico listo....
En efecto, tuve que servirles la cena a las crías de serpiente, digo a las mujeres que estaban allí. Al menos no criticaron mi comida como lo habían hecho con mi persona.
Menos mal, o ya les habría clavado el tenedor en los ojos.
-¿Mañana cenamos fuera, amor? -Otra vez la voz de zorra chillona de Krystal se escuchó.
¡Hablaba más que una anciana chismosa!
-Sí. -Murmuró Sehun, se le notaba poco animado ante la idea.
-¡Pero...!, ¡Oppa, prometiste llevarme al recital de mañana!
-La pequeña Yun Mi lo miró entre molesta y con ganas de llorar.-¡Mira mocosa, en la mesa mo grites o te quedas sin cenar!
-Espetó la bruja mayor con sus oxigenadas cejas arqueadas.Yunho se mantuvo callado como su hermano, comiendo con rapidez ante el miedo.
Fue ahí que me enojé a lo grande.
-Usted no es quién para decir si ellos cenan o no, la que esta a cargo de ellos soy yo señora, no usted. -Respondí de mala gana, ganándome gestos y murmullos de ofensa de parte de esas tres.
-Yo... lo siento, dongsaeng pero le había dicho a Krystal noona que la llevaría a cenar... -Respondió el hermano mayor con un mueca en su rostro.
Este era un completo idiota, ¿para qué promete algo si al final no lo cumple?
-Ya paren el drama, I cant eat without peace. -La pelinaranja oxigenada habló con fastidio, volviéndose a comer de su plato.
-Sí, mejor continuemos con la cena. -Musité más enojada con Sehun que con la dinosaurio rubia.
Al finalizar la cena me encargué de lavar los platos, Ji Eun se fue con sus dos hijas a dormir su "sueño reparador de cutis" o una tontería como esa. Ni con muchos sueños de esos iban a ser hermosas, lo que tienen adentro refleja más su fealdad.
-Buenas noches, noona. -Se despidió el pequeño de mí.
-Buenas noches, Yunho-ah. -Besé su cabeza y sonreí cuando se retiró de la cocina.
No me había percatado de que Sehun estaba apoyado en el marco marco de la puerta de la cocina.
-Seguro estás enojada. -Dijo sin quitar sus ojos de mí cada vez que me movía.
No quise responderle, sí estaba enojada, muy enojada.
-Tn___...
-Señor, estoy ocupada y y es tarde así que por favor vaya a dormir. -Espeté sin mirarlo mientras secaba los cubiertos.
Una gran mano me tomó de la muñeca, impidiendo que colocara un tenedor en su sitio. Me giré sorprendida y vi que Sehun me miraba afligido.
-Mira, Tn___, no hay necesidad de que me trates como un jefe, porque somos de la misma edad si no me equivoco. -Negué con la cabeza, observándolo. -¿no?, ¿eres una noona entonces?
-No, tengo diecisiete. -Susurré desviando la mirada, la suya me ponía nerviosa por alguna razón.
Él sonrió levemente y dejó escapar un suspiro. -Iba a pedirte si podías ser tú la que lleve a Yun Mi al recital.
Abrí mis ojos como platos ante sus palabras, ¿eres serio me estaba pidiendo ocupar su lugar?
-Discúlpame, Sehun, pero ella es tu hermana y en serio se desilusionó cuando dijiste que saldrías con la arpí...
-Mordí mi labio al darme cuenta de lo que pude haber dicho.-¿Arpía? -El castaño alzó una ceja, divertido por verme de seguro.
Agh.
-¡Lo que sea!, la cosa es que la dejaste a lado por una cena que bien puede dejarse para otra ocasión, pero el recital de Yun Mi no se repetirá. -Lo miré seriamente, era tan alto que tenía que inclinar mi cabeza un poco hacia atrás.
Nos quedamos por un rato largo mirándonos, ninguno decía nada y yo comenzaba a desesperarme por lo penetrantes que eran sus oscuros ojos.
-Piénselo. -Dije finalmente y me safé de él, terminé de acomodar el resto de cubiertos y huí de la cocina sin mirarlo.
Corrí hacia mi habitación y cerré la puerta, recargando mi espalda para dejarme caer al suelo.
-No, Tn___... el "príncipe" en su vida. -Susurré haciendo comillas con los dedos.
Oh Sehun iba a ser un problema para mí y lo sabia perfectamente.
-¡Yun Mi! -Había olvidado ir a verla, por lo que me levanté y salí de la habitación.
....
-¿Yun Mi? -Pregunté al tocar la puerta. -Soy yo, Tn___.
Un susurrado pase de parte de ella fue mi señal para entrar la habitación.
Y wow.
Aquel cuarto era mucho mejor que el que tenía en casa, claro comparemos mi casa de clase media con esta mansión. Era obvio que las habitaciones serian de este tipo.
Me senté en la cama de cuarto postes de Yun Mi, ella abrazaba un gran peluche de panda con una expresión triste en su infantil rostro.
-Oppa es un mentiroso... Krystal le enseña a mentir. -Hizo un puchero cosa que me causó ternura.
La abracé al acostarme a su lado.
-No re desanimes, ¿te gustaría que yo te llevara junto a Yunho?
-le pregunté con una sonrisa.-¡Sí!, aunque quería de oppa estuviera allí... él es una gran bailarín y quería que me dijera si lo hice bien. -Escondió su
rostro en la espalda del peluche.Así que él baila...
-No te preocupes, estoy segura que al final oppa se dará cuenta y asistirá para verte. -Besé su cabeza y acaricié su cabello negro.
- Tn___ unnie.. ojalá tu fueras la novia de oppa, eres muy amable y más linda que la arpía de Krystal. -Me sonrojé por las palabras de aquella niña, pero al final nos reímos de Krystal.
Aunque él estuviese soltero, yo nunca estaría a su nivel para poder llamarme su novia.
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Espero les guste ^^
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¿Cenicienta? /EXO Sehun / Rayita
Hayran KurguSi creen que esta es otra estúpida novela cliché de Cenicienta pues se equivocan, esto es la vida real y realmente mi vida se tornó una pesadilla cuando me convertí en la nana de los Oh. Una mansión, un matrimonio feliz con tres hijos, Una niña de...