Don't Leave ↯ TaeDo

Uno

Luego de aquel día, Taeyong se había mudado oficialmente a Busan. Esperaba volver a Seúl algún día, quisiera volver a juntarse con los chicos, incluyendo a Jaehyun.

Taeyong estaba totalmente dispuesto a recuperar al amor de su vida, y no pensaba regresar a Seúl sin haberlo conseguido.

- Bien, Taeyong, pongamos en marcha el plan 'Doyoung, vuelve a mi'. - se dijo a sí mismo observando su pared. - ¿Entonces qué debería hacer primero? ¿Enviarle unas rosas? - se murmuró. - Mejor llamaré a Taeil. - tomó su celular y marcó el número del mayor.

- ¡Taeyong Lee, hola! - saludó Taeil.

- Hola, necesito tu ayuda. - Taeil rió levemente.

- De acuerdo, ¿qué necesitas?

- ¿Cómo enamoro a Doyoung de nuevo? - se mordió el labio nerviosamente.

- Yah, ¿de verdad preguntaste eso? - habló incrédulo.

- ¡Es enserio, hyung! - se quejó, haciendo reír al mayor. - No se qué hacer y estoy desesperado. - comenzó a morderse las uñas.

- Okey, okey. - se rió por la desesperación del chico y siguió hablando. - Tienes que conseguir a alguien que enamore a Jaehyun, así él se irá de la vida de Doyoung y te dejará el camino libre. - Taeyong abrió los ojos sorprendido.

- Vaya, ¿debo hacer eso? - murmuró. - Bien, trataré de conseguir a alguien, ¿luego que haré? - Taeil comenzó a reír. - ¡¿Y ahora qué?!

- No puedes hacer eso, Tae, sería caer muy bajo.

- ¡¿Entonces que debo hacer?! - se tiró en el sofá.

- Ser tú mismo. - contestó de inmediato. - Doyoung se enamoró de tí por como eras, así que no debes hacer nada más que eso.

Taeyong analizó bien esas palabras.

Taeil tiene razón.

[…]

Doyoung se encontraba con Jaehyun en la sala de estár, ambos reían por el programa que veían, mientras estaban tranquilamente abrazados.

- Doyounggie.. - llamó su atención.

- ¿Si, Jae? - alzó su vista y lo miró.

- Bueno.. - suspiro. - Olvídalo, ¿si? - trató de sonreír, pero se formó una mueca en su lugar. Doyoung se reincorporó en su asiento y lo miró preocupado.

- Vamos, Jae, sabes que puedes confiar en mi. - susurro tiernamente mientras deslizaba sus dedos entre el suave cabello de Jaehyun.

- Es solo que yo.. - bajo la mirada. - ¿Qué piensas acerca de que Taeyong haya vuelto? - Doyoung bajo la mirada y suspiró.

No iba a decirle que estaba feliz, porque lo estaba, y mucho; el punto era que Doyoung no quería lastimar a Jaehyun. Lo quería mucho, y sinceramente sentía un poco de amor por él, pero aún así su corazón tenía dueño, y ese era Lee Taeyong.

- Yo.. Bueno.. - balbuceó algo nervioso. - No me agrada del todo. - Jaehyun lo miró incrédulo y se levantó del sofá, colocándose frente a Doyoung.

- ¡¿Esperas que crea eso?! - alzó la voz. - Me di cuenta de como lo miraste la vez que estuvo aquí. - se cruzó de brazos.

- No, Jae.. - murmuró levantándose y tomando las manos del menor. - El único al que amo eres tú. - susurro suavemente sobre sus labios.

- No te creo. - dijo Jaehyun, haciendo un puchero. Doyoung sonrió por lo tierno que se veía y besó sus labios cortamente. - Mmm.. Aún me cuesta creerte. - sonrió, al igual que Doyoung, y éste último volvió a unir sus labios, en un besó más apasionado y tierno. - Bueno, ya te creo. - ambos rieron tontamente y se abrazaron. - Te amo, Do. - murmuró en el cuello del mayor.

Doyoung guardo silencio varios segundos, y después contestó.

- También te amo, Jae.

Cuánto le costó decir esas palabras.

[…]

- Perfecto, Taeyong.. - el chico acomodó su cabello mirándose en la ventana y suspiro. - Aquí vamos.. - dijo y comenzó a sacudir su cuerpo. - Okey, allá voy.. - iba a tocar el timbre, pero se arrepintió. - No, debo ensayar antes lo que diré.. - susurró y carraspeo su garganta. - 'Doyoung, ¿cómo estás?' - comenzó a decir a la pared. - No, muy seco.. - tocó su barbilla pensando en opciones para saludar adecuadamente a su Ex. - 'Hola, Doyoung, que bien te ves hoy'. - dijo coquetamente y con una sonrisa, sonrisa que se borró inmediatamente. - Tampoco, Taeyong, demasiado desesperado, ¡agh! - se tomó el cabello con desesperación. - ¿Qué debería decirle? - recargo su hombro en la pared, dando la espalda a la puerta.

- ¿Un simple hola, tal vez? - hablaron detrás de él.

- ¡Ah! - gritó asustado girandose y viendo a Doyoung frente a él riendo fuertemente. - ¡Casi me matas del susto! - le reclamó sobando su pecho y tratando de calmar su respiración.

- Si, bueno, me preocupó ver a un chico hablándole a la pared fuera de mi casa. - contestó burlón.

- ¿Me viste? - preguntó avergonzado pasando su mano por su cabeza nerviosamente.

- Mi puerta es de cristal, Taeyong. - se rió.

- Cielos, que vergüenza. - murmuró Taeyong tapando su rostro con ambas manos.

- ¿Quieres pasar? - pregunto riendo. Taeyong levantó su vista lentamente y sonrió.

- Me encantaría.

Doyoung sonrió tiernamente y se hizo a un lado para que Taeyong pasara.

- ¿Quieres algo de tomar? - preguntó el menor de ambos dirigiéndose a la cocina.

- Si, agua, por favor. - pidió sentándose en el sofá, algo incómodo.

- Enseguida. - Taeyong sonrió por el tono que uso el menor.

Lo observó en la cocina, mientras sacaba un vaso y lo llenaba de agua y hielos. Sonrió bobamente y suspiro.

Doyoung era tan hermoso, tanto por fuera como por dentro. Y vaya que los años le habían sentado bien.

- Aquí tienes. - le entregó el vaso, sacando a Taeyong de sus pensamientos.

- Oh, gracias. - lo tomó y le dió un sorbo.

- Y bien, Taeyong, ¿que haces acá? - habló Doyoung sentándose en el sofá a su lado, poniéndolo nervioso.

- Am.. Bueno.. - rió nerviosamente. - Solo quería saludarte. - Doyoung sonrió.

- Si, lo noté. - ambos rieron, pero luego se formó un silencio demasiado incómodo para los dos.

- Cuéntame como te ha ido éstos últimos años. - Taeyong rompió el hielo.

- Me ha ido demasiado bien. - sonrió felizmente. - Jaehyun consiguió un trabajo días después de haber llegado a Busan, ahora es un arquitecto, ¡¿no es grandioso?! Ese era su sueño de pequeño. - sonrió tiernamente.

'Mierda, tenía que mencionar a ese idiota. Aunque.. Estoy feliz por él, finalmente cumplió dos de sus más grandes sueños, convertirse en arquitecto y formar una banda. Estoy realmente orgulloso.'

- Me alegro. - sonrió.

- Y yo, bueno conseguí trabajo en una tienda de música. - contó. - Solo trabajo medio tiempo, pero aún así tengo buena paga.

- Vaya, debería conseguirme un trabajo yo también. - se rió.

- ¿Porqué deberías? - pregunto confundido.

- ¿Que no sabes? ¡Me mudé a Busan!

Los ojos de Doyoung comenzaron a brillar por esa gran noticia.

Amaba tener a Taeyong tan cerca de él otra vez.

Lo había anhelado por años, y ahora lo tenía.