PARA PALABRAS DULCES AMOR PROHIBIDO

IX

La calidez de tu cuerpo me hace sentir tan vivo, y a la misma vez tan malditamente muerto.

Observó el cántico de tus labios al mismo sentido en que van mis manos rozando cada parte de tu pulcra y pura piel pálida, tan pálida cuál copo de nieve.

El de piel pálida más bajo, posaba para la cámara que se estaba encargando de inmortalizar su belleza, tan pura y sensual, los ojos de él despertaban pasión pura, pero en una parte sólo esa pasión desataba aquel joven frente a él.

Fue pura coincidencia que Sehun sea el fotógrafo a cargo de la marca que BaekHyun iba a modelar, y parecía no molestarle las miradas insinuadoras del menor, sin embargo al menor le molestaba las miradas de las demás mujeres que se comían a SU hombre con la mirada y quien no diría con el pensamiento ya le estuvieran teniendo al estilo las 50 sombras de Grey.
Pero y a pesar de todo el enojo celopático que sentía el menor por culpa de esas chicas, sabía de sobra que Sehun sólo lo busca tener a él, es decir, su belleza cegaba a todo el personal masculino, Sehun no era la excepción.
La primera parte de la sección culminó, se dirigió hacia el vestidor para cambiar su ropa y retocar el maquillaje.
Todo hubiese ido de acuerdo a como el tiempo y Dios quería, si, claro eso hubiese seguido ese rumbo, si no fuera porque Baek iba tan alegre en busca del rubio, a quien, encontró con una chica sonriéndole con poco, mucho, demasiado brillo en sus ojos.
Bien, eso tiró un detonador en el pequeño pero endemoniado cuerpo.

─ Hola Sehun. ─ dijo arrastrando las palabras sin total cordialidad o ternura como su imagen muestra.

─ Oh, BaekHyun, estás muy hermoso. ─ dijo Sehun, con una sonrisa aún más grande.

─ Gracias. ─ su sonrojo no era frecuente, claro según el personal no era muy frecuente ver á Baekhyun sonrojado, pero para Sehun se le hacía muy hermoso ese dato, se volvió un fetiche para él hacerlo sonrojar cuando estaban juntos, o cuando tenían sexo.

─ ¿Se te ofrece algo? ─ y sí, fue en ese momento en el que Baekhyun recordó por qué iba a descargar su furia con Sehun. Sí era por la bendita chica que los observaba anonada.

─ Ay!! Sehunnie, tu novio es tan, pero tan hermoso, ¿por qué los chicos guapos son gay? ─ dijo con un sonrojo, tan emocionada que parecía no caber en su cuerpo.

─ deja tus ridículas imaginaciones Gabriela, no todos son Gay. Que te guste el yaoi no quiere decir que todos los hombres son Gay. ─ rió el rubio, a veces su prima era un caso perdido, era tan imposible como Dios la manda a ser.

─ ¿No te gusta Sehunnie? ─ le pregunta la joven a Baekhyun, este un poco nervioso y siendo carcomido por la mirada de Sehun asiente lentamente y con un sonrojo. ─ Ves Sehunnie, le gustas. Y por su cara sonrojada supongo o es un hecho de que ha formado parte de tu cama.─ rió la joven. ─ si Sehun te hace algo Llámame, yo me encargo.

La joven mujer de cabello color Tabaco se retiró dejando una tensión tan palpable como adictilla en el ambiente.

─ Ella...

─ Si ella es rara, parece ser de familia. ─ rió por su comentario, sacando una sonrisa también en el menor.

─ ¿Quién es ella Hunnie? ─ pregunto con un puchero, sabía como mantener su eterna viviría en el mayor.

─ es una prima, se llama Gabriela ─ rió─ está tan loca por el yaoi que cree que todos los hombres son Gays.

─ la rareza parece ser de familia, Chanyeol también es raro. ─ sonrió el menor, recordando las veces en que su novio hacia una que otra bobada para hacerlo reír. Eran buenos tiempos, quizás en ese entonces se amaban, o quizás sólo intentaron amarse.

─ Si... dime ¿Qué vas a hacer? ─ pregunto el mayor.─ se que soy tu plato de segunda mesa, pero dime ¿me rindo o no?─ preguntó y por primera vez Baekhyun sintió miedo de que Sehun ya no lo buscará y lo mimara con sonrisas, besitos y canciones.

─ no... por favor no te rindas... ─ dijo bajando su cabecita, sintiéndose más culpable por atar al mayor sin dejar ir a Chanyeol, no quería lastimar a su pareja, no se le daba eso de lastimar a las personas.

─ entonces dime ¿Qué mierda hago cuando te veo despedirte de él tan alegre, o cuando esté a punto de proponerte matrimonio? ─ suspiro─ Baek, sabes que te amo como nunca podré amar a alguien, sabes que tú me sacas de mi zona de confort, sabes lo poco y todo que puedo dar por ti, pero ya me cansé.

─ no, Sehunnie... Por favor ─ las lágrimas caían crueles de sus ojos. No podía permitir que el mayor lo dejará.

El tiempo, y el lugar de ambos en el espacio se detuvo, como queriendo que los mensajes llegarán a sus corazones consumiendo su poca razón de vida.
Sehun observó detenidamente cada parte del rostro de Baek.
Podía morir y volver a vivir entre sus manos, quizás no le importe ser sólo un amante del más bajo, sólo quería estar entre sus brazos y reclamarlo antes de que otro tenga potestad entera del cuerpo más pequeño.

─ Lo siento Baek. Te amo, y lo hago tanto, pero no puedo seguirme engañando. Y tampoco engañándote. ─ dijo con una muy apaga sonrisa.

─ Sehun...

─ No te disculpes, serás feliz en brazos de Chanyeol, tu y yo volveremos a ser desconocidos, si nos toca trabajar juntos, pues entonces sólo te hablaré lo necesario para las tomas y la vestimenta que has de usar, no te besaré por más horrible tentación que tenga de hacerlo, pero lo principal, olvidare cada momento nuestro, sea como amantes en una cama y sin ropa, hasta lo de amantes sonriéndole a la hermosa mañana. Haré lo posible por olvidarte.

Hubo un silencio, el más alto secaba las lágrimas que se escurrían del menor, aquellas lágrimas que disfrutaban su viaje hasta el cuello del menor, se odio tanto por haber hecho llorar a su razón de vida, tanto por no hacerlo reír, tanto por no poder dejarlo escapar de sus manos y de su corazón.

Quizás sí, el tiempo se detiene para las personas completamente enamoradas del olvido, enamoradas del anterior vino de vida corta y feliz.

─ Terminaré con Chanyeol. No me dejes. ─ sollozo, para luego levantar sus ojos llenos de lágrimas hacia el mayor y besar sus labios.