Un Suicida Desquiciado [Editado]

Historia de encierro

Desperté en una mañana fría y miré por la ventana, el día estaba raramente gris, aunque era Verano. Era la fecha de mi graduación por lo que empecé a preparar cosas para ese día, como siempre me puse mi abrigo con bolsillo de canguro donde llevaba una navaja, jeans chupines azules oscuros y zapatos negros para un toque de formalidad.
Solo esperaba que mi otra personalidad se comporte.
Estaba yendo al colegio en mi longboard y a Vyctor (Álter Ego) se le ocurrió venir en el momento que llegué al colegio.
-Relata Vyctor-
Todo parecía una excusa para poder asesinar a alguien o a un par .Por ejemplo:
Un hombre que me chocó con el hombro mientras pasaba, las risas falsas de mujeres comiendo o el director del colegio hablando en contra de los que no pensaban como el -Si un dictador de director-.
Pero trataba de controlarme, de todos modos era el colegio de Pricer.
El universo se manifestaba en mi contra . Entré al baño,y al lado de la pileta había una hoja de afeitar con sangre en ella. Ya no pude resistirme, abrí la navaja, la guardé abierta en mi bolsillo de canguro y me fui al zoom con fuertes ganas de escuchar gritos de pánico, para ver gente sufrir , pero sobre todo para ver la hermosa, excitante y deliciosa sangre otra vez. Está vez no me importaba ir al manicomio aunque ya me habían advertido...
Recuerdo--- 6 Semanas antes---
-Pricer, debes tratar de que Vyctor no cometa ningún homicidio más, tendremos que aislarte de todos.-Me informó el psiquiatra.
-Lo sé pero, no lo puedo controlar por completo.-Comente llorando.
-Pricer , su plan fue muy bueno , si no lo confesabas vos nunca íbamos a descubrir quien hubiera sido. Pero lo confesaste 5 meses tarde.
-Déjenme en paz.-Susurré-. Perdón, son las alucinaciones.
--- Vuelta al tiempo de la historia ---
...Solo necesitaba darle menos trabajo a la parca.
Todo comenzó con una fuerte risa psicópata y una apuñalada en la yugular del cuello de el director, continuó con un tajo desde hombro a hombro de la preceptora, se extendió en la muerte de un grupo de 7 jóvenes, el fallecimiento provocado de 4 profesores, una concejal de gabinete y siguió en , robarle el rifle de asalto a un gendarme descuidado y disparar 42 veces matando 36 personas que concurrían en ese lugar, incluidos 3 médicos y 3 oficiales.
Empecé a escapar en longboard riendo con la risa que me caracteriza, pero la ambulancia y patrulla me alcanzaron, no obstante igual me resistía.
Terminaron lanzándome un dardo sedante y recuerdo despertar en una sala con una cama, paredes sucias, una habitación mas con un baño y un escritorio con un asiento. Obviamente era un manicomio.