Dos amores.↠ Exatlón México

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⇨_____ Piña

Llegamos al restaurante de la villa el menú era comida mexicana, algo que todos habíamos extrañado.

Por mi parte yo pedí unos tacos, los había extrañado demasiado. Me senté a lado de Daniel.

—Tenias hambre ¿no?—hable riendome de Daniel.

—Dejame ser feliz con la comida.— reí

—Espero que tengas mejor rendimiento en las pruebas por tanta comida.— volteo a verme

—Digamos que tu tampoco pediste tan poquito.— mire mi plato y esta bien todo lo que había pedido.

—Deja de molestar, Corral.— empecé a comer.

—Tu te llevas y no te aguantas, tonta.— lo mire riendo.

Toda la comida se la paso  haciéndome bromas. Pagamos y nos subimos a la camioneta.

Nos llevaron a la fortaleza como siempre lo hacían. Todos estábamos cansados, lo primero que hicimos fue ir a dormir.

(...)

Todos habíamos terminado de desayunar, estaba a fuera de la puerta del baño esperando a que Ana saliera de bañarse.

Daniel se acerco con la intención de abrir la puerta.

—No puedes entrar.— se acerco a mi.

—Eso ya lo se, solo quería molestar.— empezó a reír y me empujo.

—Así que quieres empezar una pelea—lo mire divertida y lo volví a empujar pero no logre moverlo.

—Tendras que tener más fuerza para moverme.— se empezó a reír de mi.

Retrocedí para volverlo a empujar pero solo logre que se moviera un poco.

Ana abrió la puerta y se fue directo al cuarto.

—Voy yo.— hablamos al mismo tiempo Daniel y yo. Nos volteamos a ver y corrimos para ver quien se  bañaba primero.

—Llegue primero.— iba a cerrar la puerta pero él logro pasarse.

—Pues yo ya estoy aquí.—se cruzo de brazos y se recargo en la puerta.

—Pues salte por que te lo vuelvo a repetir yo llegue primero.— me cruce de brazos.

—Tengo una idea.— me cargo y abrió la puerta.

—Eso es trampa Corral.— me dejo a fuera del baño.

—No me interesa Piña, te gane.— cerro la puerta.

Me fui y me senté en el sillón, ahora tengo que esperar a que él salga.

Después de aproximadamente 15 minutos salio.

—Tardaste demasiado.— me acerque al baño.

El solo negó riendo y se fue al cuarto, los demás habían salido.

Me metí a bañar, el agua en la fortaleza siempre estaba un poco helada.

Después de 15 minutos salí y me puse mi ropa. Iba abrir la puerta pero estaba atorada.

—Daniel no es gracioso, abre la puerta.— volví a intentar abrirla pero era imposible.

—Daniel no esta aquí.— se escucho que hablo.

Solté una carcajada.

—Claramente estas allá fuera estúpido abre la puerta.

Ni siquiera sabia como la había cerrado por a fuera.