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______ Piña

Habíamos llegado a la fortaleza, en l tarde jugaríamos contra Rumania.

Esperó que esta vez no sean tan groseros como la vez pasada.

Estábamos los cinco en la sala.

—¿Cuál creen que sea la recompensa? — nos pregunto Octa.

—A lo mejor una comida.— creo que todos opinábamos lo mismo.

—Solo esperó que no sean groseros como la vez pasada.— habló Ana enfrente mio.

—Solo Anca y Vladimir no eran groseros con los demás ¿se llamaban así no?— hablo y preguntó Kenia.

Todos dijimos que si a su pregunta.

—Por cierto Vladimir no dejaba de mirarte.— me apunto Octa con su cabeza.

—¿a mi?— todos rieron por la cara que había puesto.

—Si a ti, y la tal Claudia no dejaba de mirar a tu novio.— hablo Daniel haciéndome enojar, bufé al recordar lo que había pasado.

—Espero que ya la hayan sacado.— me cruce de brazos.

—Que celosa Piña— Kenia me volteo a ver.

—Solo cuido lo que es mio.— reí.

—Entonces cuida a Daniel.— hablo Octa.

Daniel y yo lo volteamos a verlo mal. Pero al parecer a las chicas les había hecho reír.

—¿Qué? Ustedes dos se la pasan todo el tiempo juntos, cualquier persona que no los conociera pensaría que son novios.— era cierto Daniel y yo no la pasábamos todo el tiempo juntos.

Todo lo que había dicho Octa había sido grabado por lo que la gente nos iba a empezar a shippear.

—Pues Daniel no es mi novio.— me levante y me dirigí a la habitación.

Me dormí al rededor de 15 minutos.

—______ ¿estas enojada?— eran Daniel y Octa

—No, solo estoy algo cansada—me senté en mi cama.

—Pues ya vete cambiando por que ya casi nos vamos al juego.— Octa salio y Daniel se quedo ahí parado.

No me quitaba la vista de en cima.

—Me voy a cambiar ¿te puedes ir?— me levante.

—Nop, yo también me voy a cambiar — Se fue y se sentó en su cama con los brazos cruzados.

—Pero yo llegue aquí primero, Daniel deja de hacer todo una competencia—me senté en el borde de su cama.

—Bien ya me iré.— tomo sus cosas y salió.

Me empecé a cambiar para ir al circuito.

(...)

Habíamos bajado de la camioneta esperando a que empezaran a grabar.

Vi a Ernesto a lo lejos con Doris, llegue corriendo y me subí a su espalda.

—Hola parkour— le di un beso en la mejilla.

—Hola flaquita.— me baje de su espalda y lo abrace.

—¿emocionado por el juego?— me separe de él.

—Bastante.— tomo mi mano y empezamos a caminar con los demás.

La ceremonia había empezado. Vi como había cuatro nuevos en el equipo contrario, también pude ver que Claudia ya no estaba.

Dos amores.↠ Exatlón México Donde viven las historias. Descúbrelo ahora