I CAN'T LOVE HIM, BUT I DO

'La nueva Isabella'

Capítulo 24.

*Narra Wes*

Primer día de instituto desde que Iss y yo habíamos vuelto de California.

Cada vez que pensaba en California no podía parar de sonreír. Estar con Isabella era lo mejor que me había pasado en mucho tiempo. Estar con ella me hacía sentirme la persona más feliz del mundo.

Con ella no tenía prisa. No mentiré, tengo muchísimas ganas de hacer el amor con ella, pero esperaré lo que haga falta. Una chica como Isabella no se encuentra todos los días.

No mentiré tampoco si digo que esa noche en la que me pidió que durmiera con ella no tenía ganas de hacerlo. Me moría de ganas. Pero conocía el estado en el que se encontraba y también sabía que ella aun no estaba preparada.

Me bastaba con dormir abrazado a ella. Sentía su olor pegado a mi cuello, y esa era una sensación que no comparo con nada. Simplemente increíble.

- ¿En qué piensa tanto, Wesley? .- me interrumpió el profesor de economía. - ¡Atienda de una vez! O mejor aun...¡salga a la pizarra a realizar el ejercicio!

Mierda. Ese puto profesor. No tenía ni idea de economía y encima iba retrasado con respecto a los demás por los días que había perdido de clase.

- Disculpe, pero no se hacerlo.- dije sincerándome.

- Muy bien, eso quería oír. Está usted castigado. Esta tarde le quiero aquí para limpiar el aula.

Asentí y me callé. Para que discutir, si total, acabaría perdiendo. En eso me diferenciaba de Isabella, ella hubiera intentado de todos los modos evitar ese castigo, pero yo, simplemente me callaba y asentía. A veces envidiaba el fuerte carácter que podía tener Iss, otras me daba algo de miedo, siendo sinceros.

Al terminar la última clase fui al taquillero de Isabella para despedirme de ella.

- ¡Wes! .- dijo Lu. -¿Buscas a Isabella? .- asentí.- se va a quedar una hora extra para recuperar las clases de matemáticas de la semana pasada. Está ya en el aula.

- Gracias Lu, ¡nos vemos mañana!

Me dirigí al aula donde dábamos la clase de matemáticas y me asomé a la ventana. Isabella estaba haciendo unos ejercicios. Aproveché que el profesor no estaba y me adentré en la clase.

- ¿Te quedas? .- me dijo con una sonrisa enorme.

- Lo siento, pero no.- su cara cambio y puso morritos tristes. - Ya sabes que voy bien.- asintió.

- Nos vemos mañana entonces.- me dijo posando un beso en mi mejilla.

- Nos vemos mañana .- dije robándole uno en los labios.

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Estaba tirado en el sofá de mi casa disfrutando de mi delicioso trozo de pizza cuando derrepente algo hizo que me atragantara. El castigo. Me había olvidado por completo de que debía quedarme castigado.

Conduje mi moto de nuevo al instituto. Por suerte el castigo era por la tarde, por lo que no me lo había saltado. Me había dado cuenta a tiempo.

Cuando andaba por el pasillo una chica morena de ojos verdes, la cual parecía algo mayor que yo, me frenó.

- Hola .- dijo sin vergüenza alguna.

- Hola, soy Wes.

- Lo sé.- dijo ella sonriendo.- te conozco porque has ido al concurso de California. Quería felicitarte, me han dicho que quedaste segundo.