If we could turn back time [Yoonmin] ©

Capítulo 26

La biblioteca se encontraba casi vacía. Afortunadamente, muchos lugares se encontraban disponibles. Jungkook celebró internamente por ello, ya que nadie estaba ocupando su mesa favorita. Luego de haber tomado el material necesario para su trabajo de investigación, se dirigió hacia su lugar. Estaba a punto de sentarse, pero unas voces se lo impidieron.

—Está dormido,¿Lo despertamos?

—No, déjalo así.

Esas dos personas, luego de haber dicho aquello, se marcharon. Jungkook se atrevió a asomarse para ver del otro lado del estante de libros. Un joven bastante conocido para él estaba tomando una siesta, con su cabeza recostada sobre sus brazos cruzados, los cuales estaban apoyados arriba de un libro. Sigilosamente, se acercó y tomó asiento a su lado. Lo miró durante largos segundos.

Jamás se había dado cuenta de lo hermoso que era: largas pestañas, piel dorada y un perfecto perfil. Todo de él era más que bello y no podía creer que recién lo estaba notando. Y también sonrió al pensar en que no sólo era precioso por fuera. El chico era una de las personas más buenas que conocía... y tenía una voz muy bonita.

Sacudió su cabeza. No debía pensar así. Él estaba saliendo con Jimin, no debía--

De pronto, Taehyung, el chico que había estado siendo observado mientras dormía, comenzó a despertar. Arrugó su nariz y frotó sus ojos. Jungkook olvidó de qué debía olvidarse y sonrió ante la tierna imagen. El mayor se sobresaltó al ver al otro junto a él.

—¿Dormiste bien?

—Ah, rayos... no quise hacerlo.

—¿Mala noche?

—Mamá tuvo otra recaída. No pude pegar un ojo en toda la noche, ya que la acompañé en el hospital —bostezó—. Hoy le dirán cuándo empezará con su tratamiento.

—Creí... que ya lo habían empezado.

—Eso iban a hacer, pero creyeron que se podía esperar un poco más.

—Qué mal —frunció sus cejas—. Ellos sabían de su estado.

—Sí, lo sé. Sólo queda esperar a esta tarde. Iré a verla apenas salga de mi última clase.

—Iré contigo.

—No, Jungkook. No tienes por qué--

—Taehyung, tu familia está lejos. Sólo tienes a tus amigos aquí... me tienes a mí, no voy a dejarte solo con todo esto. Te acompañaré y te ayudaré en todo lo posible, sin importar qué sea ¿De acuerdo?

Taehyung miró hacia abajo y jugó con las páginas del libro entre sus dedos. Sus mejillas se sonrojaron levemente.

—Eres tan lindo conmigo...

—Es que eres importante para mí, Tae.

—Tú también lo eres para mí.

El menor, al haber notado lo sensible que se encontraba el otro chico, lo atrajo hacia él en un abrazo. Acarició suavemente su espalda para reconfortarlo y, de manera inconsciente, besó su cabeza.