If we could turn back time [Yoonmin] ©

Capítulo 15

Un auto se detuvo frente a la casa de Yoongi. Jungkook estaba al volante; Jimin, en el asiento del copiloto y Taehyung, atrás. El menor de los tres hizo sonar la bocina. Minutos después, el pelirrubio salió de la vivienda arrastrando sus maletas. Jimin bajó para ayudarlo.

—¿Ese es Yoongi?

—Así es.

Taehyung se arrimó más cerca de la ventanilla para poder observar lo que sucedía afuera.

—Hyung, déjame ayudarte a guardar estas pesad--

—¿Pensabas que iba a hacerlo yo? En primer lugar, no planeaba venir; en segundo lugar, hiciste que me despertara temprano en vacaciones; por último, tú llenaste estas cosas, así que no te quejes por su peso.

Jimin bufó y abrió el maletero para poder guardar las cosas. Yoongi abrió la puerta de atrás del auto y se sentó junto a Taehyung, quien le mostró una amplia y simpática sonrisa.

—Tenías razón, Jungkookie, parece agradable —mencionó.

—Ya, arranca, cabeza de coco.

Jimin subió de nuevo al auto. Luego de que haya cerrado la puerta, Jungkook comenzó a conducir.

Era un largo camino hacia el bosque en el cual habían decidido ir a acampar, y Yoongi se arrepentía más y más de haber aceptado con cada segundo que pasaba, pues estaba rotundamente en contra de los estúpidos juegos que Jimin había inventado para el camino... y de que siempre dejara ganar a Jungkook, pero ese era otro tema.

Los minutos pasaron y el auto se detuvo en una estación de servicio. Todos bajaron del vehículo para estirar un poco las piernas. Jungkook se acercó a Jimin, abrazándolo de costado.

—Jimin, iré a comprar algo. Ya vuelvo, ¿Sí?

—Está bien.

Jimin lo vio alejarse y mordió su labio inferior para, después, cruzar sus piernas y comenzar a dar saltitos en su lugar. Yoongi, al verlo, alzó una ceja.

—¿Qué te pasa? ¿Estás poseído?

—Tengo que ir al baño, hyung. Termina de cargar la gasolina en el auto. Ya regreso.

—¡Esa era tu tarea, mocoso! —gruñó.

Sin embargo, Jimin ya había corrido lejos de él. Yoongi suspiró y pudo observar de reojo a Taehyung, quien se acercó tímidamente hacia él.

—Hola.

—Te diré sólo una cosa, niño... si te llamaron para emparejarte conmigo--