4. De pánico gay a hormonas revolucionadas.

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No es que Chan estuviera teniendo un gay panic, para nada. Solo resulta ser que no podía respirar, ni moverse voluntariamente o parpadear. Bueno, tal vez sí estuviera un poco en pánico, pero ya quisiera ver sus reacciones cuando la persona de la que estas profundamente enamorado se sienta en tu regazo y comienza a bailar sensualmente. Sí, el chico tiene suerte de seguir vivo después de eso, agonizante, pero vivo.

Tal vez fue toda esa emoción la que le impidió notar que a (muy) escazos centímetros suyos, o mejor dicho, encima de él, el contrario también estaba nervioso. El sistema respiratorio todavía le respondía, pero aún así también estaba incómodo. Realmente no podía entender lo que pasaba. Woojin jamás de los jamases se había sentido atraído hacia un chico, o por lo menos eso creía. Que momento oportuno para darse cuenta que a esta distancia, las facciones de su amigo se veían aún mejor que a la lejanía. O para notar la costumbre provocativa que tenía este por humedecerse los labios con la lengua solo para después morderlos. Sin realmente saber si este gesto había sido realizado voluntaria o involuntariamente, el mayor solo tenía una cosa en claro:

Bang Chan lo estaba confundiendo a niveles estresantes.

Es que nunca se le había pasado por la cabeza el simple hecho de cuestionarse ser gay, pero sus irrefrenables ganas de ser él el que aprese aquellos labios entre sus dientes no gritaba heterosexualidad precisamente.

Quizás fue el alcohol, quizás no, pero de repente se encontró susurrando un "Arriba, tercera puerta a la derecha. Te veo allí en 10 minutos." cuando notó que el reto ya había terminado, resultando con su menor con una prominente erección presionando bajo su trasero.

"Mierda, mierda, mierda"
Su cabeza no paraba de repetir lo mismo, una y otra vez.
Sólo en el cuarto del mayor esperando por éste, el australiano creyó que esta vez sí moriría.
¿Para qué lo llamaba? ¿Habría notado su erección y lo echaría de su casa del disgusto? O peor, ¿Dejaría de hablarle por eso?
Millones de dudas e inquietudes asaltaban la mente de Chris, cuando repentinamente, la puerta se abrió. Era él, con una expresión seria y sin decir una palabra, le puso seguro a la puerta.
La impaciencia de Chan incrementó, en su cabeza el único motivo para encerrarlo en su habitación era que lo fuera a moler a golpes por homosexual. Que obviamente no iba a pasar, pero dejen al chico en paz, ve demasiadas películas de mafiosos y juntar eso con su descabellada imaginación no es buena mezcla.

Pero ni usando toda su capacidad imaginativa habría sido capaz de anticipar lo que lo esperaba. Sin darle tiempo a reaccionar, el más alto de los dos ya había unido sus labios en un beso desesperado, posando sus manos en la piel de sus caderas por debajo de su camiseta, haciéndolo estremecerse con su toque delicado, pero deseoso.

La cantidad de vodka que había ingerido esa noche sumada a la adrenalina y excitación del momento no le permitía recapitular perfectamente los sucesos de aquel momento (y eso que lo intentó durante horas y horas). Pero si hay algo que no puede olvidar es la sensación de suavidad.
Los labios suaves del contrario, su toque gentil sobre la propia piel y la blandeza del colchón hundirse bajo ambos cuerpos.

También fue suave la mirada preocupada que le dedicó ante sus lágrimas cuando la situación se estaba por poner aún más intensa.

-¿Hice algo mal? Perdón, no quería presionarte ni forzarte a nada. Solamente creí que tú también querías esto.- La voz del mayor denotaba culpa y sinceridad. Lo cuál no hizo nada más que acentuar el llanto del de hoyuelos.

Otra vez más, las bebidas que había consumido le jugaron una mala pasada a Chan, que no pudo evitar soltar aquello que llevaba rato guardando.

-Esa es exactamente la cuestión, que quiero esto, demasiado. Quiero todo lo que tenga que ver contigo, sexo, besos, abrazos, charlas interminables o simplemente hacernos compañía sin decir nada. El problema es que necesito todo de ti sabiendo que no puedes dármelo y me lastima.

Sus palabras fueron secundadas de un silencio pesado, en el que Chan se preparaba para asumir el rechazo y Woojin procesaba lo dicho por su dongdaeng mientras que al mismo tiempo intentaba formular una respuesta lo menos dolorosa posible.

-Yo... Yo realmente no sé qué decirte. No puedo corresponder tus sentimientos. Y no es que sea porque no seas atractivo o agradable, todo lo contrario. Solamente es que uno no puede elegir lo que siente. Yo me di cuenta hace menos de dos horas que siquiera podía sentirme atraido hacia un chico y no sé si soy capaz de enamorarme porque jamás pase por algo así, nunca tuve interés en enamorarme. Pero te juro que si pudiera elegir a quien querer serias el primero en la lista. Perdón.

-Entonces dejame ayudarte a averiguarlo.

-¿Qué?

-Dijiste que no sabías si eras capaz de enamorarte, dejame ayudarte a averiguarlo. Dame una oportunidad para intentar ganarme tu corazón, por favor.- Respondió el australiano aún con restos de lágrimas en sus ojos.

Ante lo dicho por su amigo de la infancia, Woojin estaba incluso más confundido que antes. ¿Darle una oportunidad? No estaba seguro de qué debería hacer.

-No lo sé Chan, ¿Eso no sería como jugar con tus sentimientos?

-¿Aún más que bailar sobre mi amigo y besarme con intenciones de llegar a más?

-¡Pero no sabía qué sentias! Es tu culpa, tuya y de tu estúpida manía de morderte los labios.-

Aquello sacó una sonrisa al mencionado, que se relamió la boca sintiendo la marca que le dejó su crush mordiendolo minutos atrás y le dedicó una mirada divertida. Woojin tuvo que utilizar toda la fuerza de voluntad en su cuerpo para no volver a hacerlo, porque ese gesto combinado con su sonrisa burlona había sido demasiado caliente.

-Concientemente o no me la debes, además ahora que sí sabes puedes manejar la situación mejor, y si notas que todo se va demasiado de control entonces prometo rendirme. Por favor, solo te pido un mes para intentarlo.-

Definitivamente el rubio más alto tenía una debilidad por el tono arrepentido y carita de cordero degollado del contrario, por lo que muy a su pesar termino rindiendose a sus peticiones.
Lo cual resultó con un Chan alegre y orgulloso de su logro saltandole encima como agradecimiento, terminando "casualmente" sentado sobre el amigo del opuesto, que de removió nervioso tratando de sacarlo.

-¿Sabes? Podría devolverte el baile de hace rato y podríamos retomar la situación en la que estabamos.

-No gracias, no quiero terminar con tus lágrimas mojando mi camisa de nuevo.

-Ambos sabemos que lo que se mojaría seria otra cosa y no precisamente de lágrimas.- Susurró el extranjero seductoramente al oido del otro mientras mordía el lóbulo de su oreja, rompiendo en carcajadas burlonas cuando lo sintió pasar saliva. Instantáneamente su cara conoció la alfombra del piso al ser empujado de un almohadazo por el mayor.

Así es como terminaron lo que arrancó con hormonas revolucionadas y alcohol en una mezcla de almohadas, risas y provocaciones a modo de broma (o tal vez no...)

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C la kreieron wexd con el lemon, pishinas recuerden k gsus las okzerva 👀


Ahre srry, me aburría así que se me ocurrió dejarles este capítulo raro del woochan que aunque parezca relleno es importante para la trama (ahre todas las escritoras decimos lo mismo siempre)
Shsgsga tengo una debilidad por ellos perdón

Veintitrés [ChangLix]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora