Desde aquel incidente ya habían pasado tres días, aun recordaba la tracción de Max, estaba adherida a mí como una espina, mi querido amigo Javier es de gran ayuda y apoyo emocional para mí, me ha hecho el favor de hacerme compañía en las noches. Cuando al fin abrí los ojos, palmee la cama pero el guapo moreno que dormía a mi lado no estaba, me ardía muchos mis ojos, la amargura aún estaba presente. Estire un poco mi cuerpo para iniciar mi día laboral con o sin un príncipe azul, mi vida debe continuar. Max no será el causante de poner mi vida en un desastre. Una nota llamativa estaba en mi mesa de noche, esbozo una leve sonrisa y la leo.
Cariño te deje listo el desayuno, tengo unos pendientes en el trabajo así que no puedo acompañarte. Esta noche saldremos de rumba nos alocaremos hasta perder la conciencia como las perras que somos
Javi
Me dirijo a la cocina. Había hecho café y unos sándwiches. La intención es la que importa, jale un banquillo de madera para ponerme a comer. En eso observo el reloj de pared de la cocina, ¡llegare tarde! Bebo varios sorbos de café que queman mi lengua, doy dos mordiscos al sándwich después dejo todo y salgo corriendo hacia la habitación.
***
Cuando me dirijo al estacionamiento para buscar mi coche, me congelo en el lugar. Era él, estaba recostado en mi coche como si me estuviera esperando, no me noto porque estaba ocupado con su celular, me acerque a él.
—Puedes moverte, necesito ir al trabajo
Él levanto su vista y esbozo una leve sonrisa que hizo que mi corazón se acelerara, pero la perturbación duro poco al escucharlo hablar.
—Princesa vine a recogerte, vamos a una cita
— ¿Acaso no entiendes español?, o la cachetada de hace días no te dio una pista, ¿quieres que te refresque la memoria con otra?
Levante mi mano pero él la sostuvo y me encaro con una sonrisa burlona, mis piernas flaquearon al instante.
—Tú no entiendes las cosas aquí, eres mía, vamos ya tengo una reservación de un hermoso restaurante, te encantara...
Yo solté su agarre y lo interrumpí furiosa
—No tengo nada contigo, me has decepcionado. Nuestra relación está terminada, ¿quieres que acepte el rol de amante?, ¿Quién crees que soy?
—Que tiene de malo ser mi amante, considéralo un gran honor, yo el gran Maximiliano Pritzker te estoy considerando a ti, piénsalo llevaras una vida de reina, te llenare de lujos, No te sientas celosa por Adelina solo nos casaremos por intereses, no te preocupes por ello.
¿Quién es este tipo?, ¿esta es la verdadera cara de la persona que me enamore?, una gran amargura inundo mi corazón
—Lo que tu consideras un honor, para mi es una humillación. Max si por lo menos me quieres un poco o al menos sientes algo de lastima por mí, por favor no me vuelvas a buscar.
— ¿Es esta tu respuesta? —el cinismo de su parte fue cambiado por el leve temperamento violento, apenas me podía sostener en pie
Yo solo logre asentir, me sentía francamente intimidada, me dolía, yo aún lo amaba, incluso pensé en aceptar su oferta aunque sea muy doloroso, pero Javier me había abierto los ojos, tengo que recuperar algo de mi dignidad.
—Si esa es tu respuesta, no tengo nada más que hacer aquí, haz perdido tu oportunidad de ascenso.
Ese quebró más mi corazón, está hablando como si la relación fuera un negocio, ¿una oportunidad de ascenso?, ¿acaso siempre ha usado una máscara, es esta su personalidad?
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No me mires, tu mirada es ilegal (LTFL #2)
RomanceSofia watson, trabaja de abogada en el prestigioso bufete Hamilton y asociados. Ella sueña con la idea de conocer a su príncipe azul, cree en el amor a primera vista y que las historias contadas en los libros puede ser ciertas. Conoce a un príncipe...