Luz de Sol y Luna

634 76 16
                                    

-Espero que tu amenaza de ejecutar a nuestro hijo sea sólo eso, una amenaza-Dijo Frigga, sentándose junto a su esposo en esos raros pero encantadores momentos de tranquilidad.

-Por supuesto, mi intención siempre ha sido darle una lección nunca pretendí lastimarlo, mucho menos quitarle la vida-Respondió Odin con la mirada perdida en el horizonte- Nunca sé qué es lo correcto cuando se trata de Loki, hay quienes dicen que soy demasiado severo otros que merece un castigo más permanente...

-Tal vez sea momento de que en lugar de pensar como rey comiences a pensar como un padre. 

-Como siempre, mi reina tiene la razón. 

---------------------------------------------------------------------------

Tony comenzaba a aburrirse. La prisión aesir era lo más tedioso del universo conocido, aun más que sus juicios. Loki se había sentado en una esquina y Hela en la opuesta ambos callados y por lo tanto no proveian una buena distracción para el genio.

Caminaba de un lado al otro de la celda como un tigre enjaulado, 

-Anthony, ven y siéntate. Vas a cavar un surco hasta Helheim. -Dijo el dios señalando el lugar a su lado.

Tony obedeció,  tal vez por primera o segunda vez en su vida. Recargó su cabeza en el hombro del dios, preguntándose si seria su último día juntos.  Tony Stark no era bueno con las despedidas y mucho menos con los sentimientos. Ser optimista era difícil pero se aferraria a la esperanza, debía creer que era posible, que él y Loki tenían un futuro.

-Tony, si no salgo de aquí...

-No hagas eso, no te despidas de mi hasta que no haya alternativa.

-No sé que hice para merecerte...

-Probablemente algo muy malo, todos saben que puedo ser un idiota irresponsable y egocéntrico. -Respondió Tony acariciando ese increíble y suave cabello negro. -Ambos estamos un poco dañados si lo piensas y de seguro acabaremos intentando matarnos algún día. 

-Stark, por los nueve reinos, ¡ve al grano!-Gruñó Hela dando señales de vida por primer vez en horas

Tony suspiró,  como siempre sus intentos de ser romántico no eran bien recibidos aunque ahora Loki lo miraba con curiosidad en esos ojos verdes que lo volvían  loco y le hacían sentir un nudo en el estomago.

-Te amo, Loki y si este es el final estaré feliz de morir a tu lado.

-¿Y ahora quién se está despidiendo?-Respondio Loki sonriendo- Te amo y es un honor haberte conocido.

Se besaron con la desesperación de dos amantes que temen separarse, cada instante preciado porque podría ser el último.

-¡Consigan un cuarto!-Exclamó Hela.

Tony estaba a punto de responder cuando Odin, tan majestuoso como siempre entró a la celda. Vaya  el rey en persona los visitaba, ¿Qué habían hecho para merecer tal honor?

-Padre de Todo, debe escucharme-Dijo la diosa de los muertos.

-He escuchado suficierte.-Interrumpió el rey, su voz transmitía calma y liderazgo- Recientemente noté que al juzgarlos a todos no he pensado como un padre o un abuelo. He intentado poner el ejemplo con ustedes cuando debi guiarlos y ayudarles a entender ciertas verdades.

Tony sintió a Loki aferrarse a su mano, la espera era insoportable.

-Loki, no puedo dejarte libre después de todos tus crímenes. A partir de este día serás exiliado a Midgard donde vivirás el resto de tus días como un mortal. Tony Stark regresará a dicho reino contigo, no es nuestro papel juzgarlo. En cuanto a Hela, puedes continuar viviendo en Helheim si así lo deseas,  al igual que tu padre no podrás regresar a Asgard.

-Bien,  planeo tomarme unas largas vacaciones muy lejos de aqui-Respondió ella.

-Odin... padre, no sé cómo agradecer...-Comenzó Loki,  buscando las palabras adecuadas.

-No me agradezcas a mi, fue la reina Frigga quien hizo a este ciego ver razón. Que tengan buena fortuna.

Dicho eso el dios salio, dejando a los tres con idénticas expresiones de sorpresa.

-¿Alguien quiere shawarma?-Ofreció Tony sonriendo.

FIN.

Luz de Sol y LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora