La tarde del día siguiente ya había caído, el cielo estaba de un color anaranjado, típico de un hermoso atardecer y luego del entierro de Daphne, Jaden y Dannae estaban listos para aparecerse en la casa de Andy.
—¿Quién es él? —preguntó curioso Jaden mientras caminaban rumbo a la casa de Andy.
—Cuando mis padres murieron él apareció en mi vida, fue el único que estuvo conmigo para todo y aunque a pesar de que ahora no estoy de acuerdo en ciertas cosas que dice o hace, sigo con él porque le tengo un gran respeto. Sin él en mi vida no sé qué habría sido.
—Entiendo, ¿Y cuál es la venganza a la que te refieres?
—Eso te lo explicará mejor él —suspira —. Tanto Héctor cómo Andy tienen un pasado sádico en común, pero ahora es cuando pondremos la balanza a nuestro favor.
Siguieron caminando a paso apresurado guardando silencio entre ellos, pensando, meditando, reflexionando a lo que vendría. Después de varios minutos por fin estuvieron en la casa de Andy.
Llamaron a la puerta y los recibió la ama de llaves quién los llevó hasta la biblioteca que era donde se encontraba ahora él con algunas visitas.—Hola Andy —lo saludo con un beso en la mejilla una vez que lo tuvo cerca —. Ya estamos aquí.
Andy responde el saludo y sonríe muy placenteramente al ver a Jaden detrás de ella.
—Aquí te traigo al nuevo integrante. Jaden, él es de quién te venía hablando.
Jaden extendió la mano en claro acto de cordialidad y lo saludo.
—Buenas tardes, señor.
—Así que por fin puedo tenerte en mi casa, en mi equipo —estrechó la mano de Jaden —. Es todo un honor... Y muy aparte lamento mucho lo de tu hermana.
—Muchas gracias —acepta la condolencia —. Es un golpe muy duro que solo será curado cuando tenga las manos manchadas de la sangre de aquellos que osaron hacerle eso a mi hermana.
—Y así será Jaden, así será. Aquí, con nosotros, tu nueva familia explotarás y desarrollarás tu mejor estado sádico —y una sonrisa perspicaz se dibujó en el rostro de Andy.
Jenni se acercó y también hizo el saludo correspondiente y aparte hizo una presentación extra.
—Chicos ellos son Arlen y Nathan, mis hermanos, sádicos como nosotros, han venido a darnos una mano —sonrió —. Necesitaremos todo el apoyo que se pueda.
—Héctor me dijo que nos conoce a todos y que nos tiene vigilados —intervino Dannae —. Así que atacarlo nosotros sería muy tonto de nuestra parte, pienso que debemos tener a alguien que se infiltre y nos ayude a destruirlo desde adentro.
—Eso es cierto, Jenni y yo estábamos pensándolo desde hace varios días, pero, ¿Cómo saber quién es el indicado?
Hubo un pequeño silencio en la biblioteca hasta que Jaden tomó la palabra.
—Si me permite señor, todos sabemos aquí que si a una persona la sometemos a momentos de tensiones muy fuertes, dónde su vida dependa de ello sacará ese lado sádico que todos poseemos. Una vez que sometes a una persona, por naturaleza, buscará siempre la supervivencia y su cuerpo y mente harán lo que sea con tal de lograrlo.
Andy lo observó de pies a cabeza y sonrió.
—Lo ven, lo ven, él es el sádico, sabía que no me había confundido contigo, Jaden —y le dió un apretón a su hombro derecho.
ESTÁS LEYENDO
Sádicos © [+18]
Short StoryLa muerte, la sangre y el sexo comenzaban a dominar la vida de Jaden. Sabía hacer perfectamente sus cosas para que no quede ninguna pista de su trastornada forma de vida. Lástima que escogió mal a su última presa desencadenado así la verdad de su pr...