Su voz.
En medio de mi desesperación, unos brazos tomaron mi pequeño cuerpo congelando mi sangre por la impresión, pero fue su voz la que me calmó, aquella apacible y dulce voz, la voz que pronunció por primera vez una palabra que escucharía siempre de su boca: Obito.
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¿Por Qué Ya No Me Quieres?
Kısa HikayeNo lo entiendo, cada vez que pienso en ti me hago las mismas preguntas, pero siempre es lo mismo, nunca consigo llegar a respuesta alguna... ¿Qué hice mal?, ¿Cómo fue que todo cambió?, ¿Cuánto más durará esta agonía? [...] Te haría miles de pregunta...