VENTANA ABIERTA

28 2 0
                                    

Su pasado solitario había marcado de manera inesperada su personalidad y para contrarrestar su agonía, internamente había logrado crear a una máquina de artilugios creativos que llenaban los espacios vacíos de su vida y con ello, en adelante, gracias a sus historias, Dana jamás se encontraría sola, pues crearía a todos los personajes, humanos y divinos que fueren necesarios para sobrevivir.

Vale decir que para ella no era una opción el no vivir en estas autocreaciones; sus enigmáticas ideas, incluso absurdas en ocasiones, eran el oxígeno de su consistencia espiritual, sin ellas la muchacha se vería relegada a nada. Así de intensa su vida interna, la apatía parecía consumirla en el exterior...en donde la gente no podía ver ni escuchar lo que ella era capaz de concebir y por tanto, la gente parecía no entenderla.

Captaba a menudo, cómo la gente por el simple gesto que hacía con sus cabezas, se hallaban rondados de dudas críticas acerca de ella, como si se dijeran ¡No encuentra ancla para su vida! No podía ser lo que todos esperaban, porque finalmente, qué era lo que todos ellos esperaban?

Así decidió usar una especie de reina regente de sus emociones, capaz de actuar en momentos difíciles en los que su conciencia se hallaba "desconectada de su voluntad"; una habilidad que la gente normal no pone en práctica cuando se encuentra bajo presión o amenaza, y en donde los demás normalmente actuarían a la defensiva, la reina regente salía al rescate e  intervenía volviendose hacia la dificultad con una carga de protocolar cortesía y automática amabilidad.

Por largo tiempo estuvo buscando la manera de sobrevivir a las fuertes corrientes conductuales agresivas y coercitivas de los grupos en que se encontraba mezclada. Nada había que ella pudiera hacer para cambiar aquello y que diera resultados satisfactorios para agradar a los demás, así que observó cómo la naturaleza practica una especie de cortesía hacia el entorno, pues si éste cambia, la especie que sea, en su naturaleza se adapta; una especie de cortesía abstracta que poseen los débiles frente a sus dificultades y que al final les vuelve tan fuertes que no habrá manera de vencerlos al primer intento... -el camaleón por ejemplo, se encuentra desprovisto de mayores armas de ataque, a cambio logra mimetizarse en el entorno, escapa de la vista de sus captores y armoniza con el ambiente en que se encuentra, volviéndose este último, su guarida salvadora.-

De tanto seguir la corriente, se sobrevive al caudal por fuerte que éste sea. Así lo pensaba Dana y se repetía constantemente, de igual forma enque el agua es un elemento adaptable, que toma la forma de lo que le contenga y no pide permiso si no hay salida, ésta se derramará por donde pueda y simplemente buscará la debilidad del espacio en que se halle para crear una nueva salida. No se requiere la consistencia de roca para tener la fuerza de vencer las cosas de la vida, solamente de la inteligencia emocional y de saberse dejar llevar, algo que además requiere de humildad, para plegarse a la forma del otro de la manera más cortés y amable que pueda, para así imponer la voluntad propia del yo sin que apenas sea perceptible por los demás. 

Un globo rojo y muy brillante atravesaba la ventana entre el subconciente de Dana  y la realidad y dejándose llevar por la advertencia, lo persiguió saltando de un extremo al otro de la ventana, podía ir y venir cuando quisiera y solamente la necesidad de seguir existiendo la hacía cruzar de nuevo el portal hacia la realidad, para reunirse con su cuerpo de nuevo y así poder continuar.


DANA Y EL DESTIERRO DE SU YODonde viven las historias. Descúbrelo ahora