c i n c o

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—¿Cuál es tu mayor miedo?

—Joder, Ren, me matas con tus preguntas, y luego dices que yo soy el profundo aquí—riéndose Yuma comenta y yo me encojo de hombros, mientras observo su estante llenos de libros, buscando uno que me llame la atención.

—Tú solo responde—exijo mientras tomo un libro con lomo rosado, cuando miro la tapa observo que está escrito con marcador negro "recuerdos y memorias".

—Tengo miedo de enamorarme—él responde honesto, llamando mi atención.

—¿Y eso?—Sorprendida pregunto, sin palabras, él se baja su gorro, tímido.

—No lo sé, solo he visto lo que hace el amor en las personas, los vuelve tan bobos y extraños. Había ésta chica que se enamoró de mi hace un tiempo, se llamaba Ia y era realmente buena, yo solo acepté su propuesta para ver si podía sentir algo con el transcurso del tiempo pero...

—No sentiste nada—confirmo yo mientras le veo asentir, él juega con su pluma y mira sus apuntes con aire ausente.

—Sí, cuando intenté terminar ella quedó destrozada y saber que la causa era debido a mi me hacía sentir culpable. El amor es malo, deja a la gente triste y algunos apenas se pueden recuperar... si es que lo hacen—yo tenso mi agarre al libro, al cual abrazo, en un vano intento de no sentirme tan fría.

—Yo no lo veo de ese modo... —murmuro mientras miro los demás libros.

—Bueno, todos tenemos diferente puntos de vista, lo grandioso de conocer gente, ¿eh?—Yo sonrío suavemente antes de asentir y sentarme en frente suyo, poniendo el libro entre ambos, él lo mira—. ¿Y tú? ¿A qué le tienes miedo?—Yo abro el libro para darme cuenta de que en realidad es un álbum de fotos, para mi desgracia es de sus diez años en adelante.

    Y yo que quería burlarme de verlo en pañales.

—A las cucarachas—respondo divertida mientras observo sus fotos, se ve adorable.

—Vamos, eso no es justo—reclama con un puchero y yo me río, mientras observo una foto que me llama la atención, está con un gato—. Se llamaba Titán, lo tuve cuando tenía doce y en ese tiempo insistía en que un Titán sostenía la tierra y mi madre me corrigió diciéndome que se llamaba Atlas quien era un Titán, intenté cambiarle el nombre pero ya era tarde y mi gato solo acudía al nombre de Titán—yo me río y él resopla—. A los extraños les digo que le había puesto Titán porque es el satélite más grande de Saturno.

—Oh, me siento halagada ya que no soy una extraña—él sonríe antes de prestar atención a sus apuntes de nuevo.

—Claro que no, eres una amiga—yo le observo algo sorprendida, pensando que simplemente éramos conocidos pero recibir el título de amiga por alguna razón me da una sensación de calidez—. Aunque no responde a mi pregunta...—se queja mirándome con ojos entrecerrados, yo miro la foto nuevamente.

—Mi mayor miedo es que mi hermano me odie—confieso mientras acaricio la foto, la superficie es suave y la mirada de Yuma pesada.

—¿Por qué?

—Creo que ya lo sabes—digo mientras paso la página y veo fotos de él en un viaje en Tokio.

—Sí, pero no pensé que serías honesta conmigo, es una sorpresa agradable—yo le observo confundida y él sonríe, como si escondiera más secretos—. Me gusta la idea de que confíes en mi teniendo en cuenta lo difícil que es para ti.

    Ah, así que esto es amistad.

—No te acostumbres, a menudo suelo mentir y esconder cosas, me es inevitable. Mi forma de autodefensa, aunque, solo debes tenerme paciencia y a medida que lo crea correcto te revelaré cosas sobre mi.

Bajo el agua.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora