VII
SHADOW
—Ha pasado un tiempo, Aidan —digo, observándolo. Luce más que enojado, su control haciéndose añicos a su alrededor, está claro en sus ojos; pero lo que sea que lo haya irritado así no es de mi incumbencia. Sin embargo, no puedo dejar que pierda el control con Morgan. Ella es una herramienta, algo que debemos resguardar, no lastimar.
—Shadow —responde entre los dientes apretados, como si despreciara mi nombre. Morgan da un paso adelante para estar en medio de nosotros.
—¿Se conocen? —La confusión clara en su expresión.
No respondemos. Aidan me está mirando furiosamente; sonrío bajo mi máscara, retándolo. Él se pone en una ligera posición defensiva. Morgan lo nota y se congela.
—¿Qué estás haciendo? —pregunta ella, frunciendo el ceño, completamente confundida.
—Han pasado ochenta y cinco años, Shadow. Sabía que era tu sangre la que corría por sus venas —acusa Aidan.
—¿Celoso? —bromeo. De hecho, me divierte molestarlo.
—¿Pueden explicarme qué está pasando? ¿Cómo es que se conocen? ¿Ochenta y cinco años? He sido vampiro durante ochenta y cinco años, ¿es una coincidencia? —pregunta Morgan, perturbada.
No, no es una coincidencia en absoluto. Pero Aidan y yo mantenemos la boca cerrada.
—¡Respóndanme! — ordena, su mirada viajando de mí a su líder y viceversa.
—Arreglemos esto —dice desvaneciéndose. Sé que ha salido.
«Esto podría ser interesante», sonrío maliciosamente.
—¡Shadow! ¡Espera! —Escucho a Morgan gritar antes de desaparecer para seguir a Aidan.
Sé que no puede salir de la cueva: su líder se lo ha ordenado y él es su creador; o eso es lo que ella piensa, pero aún no es lo suficientemente fuerte como para desobedecerlo. Ha pasado mucho tiempo desde que he tenido una buena pelea. Me materializo justo a unos pasos de Aidan. Estamos en la playa, el viento y las olas azotando la costa sin cesar.
—¿Qué quieres, Shadow? —pregunta, como si no lo supiera.
Podría terminar con él, pero hay algo que quiero saber, así que opto por usar los elementos para provocarlo. Inclino la cabeza hacia un lado, levantando ambas manos. Las froto.
—Ignis. —Cuando las separo, hay una pequeña llama entre ellas—. ¿Qué es lo que quiero? —Lentamente, sigo separando las manos, sosteniendo la bola de fuego en la izquierda—. Aer —indico, concentrando viento en mi mano derecha—. ¡Sabes exactamente lo que quiero! —exclamo, enviando las llamas combinada con el viento hacia él.
Aidan se mueve rápido, apenas esquivando el ataque.
—Casi me atrapas.
—Eres rápido, pero eso no es suficiente. ¡Aqua! —Le arrojo una ola de agua. Todo el terreno se moja en cuestión de segundos, convirtiéndose en barro a su alrededor. Aidan me mira de manera retadora. Sonrío bajo mi máscara, levantando la mano y la aprieto en el aire. Ya puedo manipular el barro. Observo cómo este comienza a tragárselo, hundiéndolo.
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La Revelación (Almas Perdidas I) [En librerías]✔️
Vampire[COMPLETADA] Ella es un vampiro convertido. Él es un vampiro purasangre. Ella aún se aferra a su humanidad, él es un asesino frío. Sus mundos son completamente diferentes, son enemigos naturales. ¿Qué pasará cuando sus caminos se crucen? ¿Y si para...