Capítulo 12

52 7 0
                                    

-Escúchame -

Dakota me hizo entrar en su habitación, sentarme en su hamaca en el cuarto, para que escuchara su nueva crisis.

- Todo esta planeado en el libro de la vida -

Tome un respiro- Estás hablando de la película -.

- Sí, pero tiene su verdad. Que nos mudásemos uno al lado del otro y nos convirtiéramos en mejores amigos, cuando, en realidad, ¡ni siquiera nos parecemos! -

Dakota está concentrada, se le nota en su ceño fruncido y en como camina de lado a lado. No es inusual en ella. Se pasa su vida leyendo o viendo ficción, y encontrando maneras en las que le afecte en su vida real.

Hice una mueca ante su punto, pues si somos diferentes, pero no creo que no hayamos podido ser amigos en cualquier otra circunstancia.

- No me vengas con esa mierda - la miré sorprendido  de que supiera que estaba pensando con tan solo verme a la cara- se que piensas que seríamos amigos de todos modos, pero, oh, no Tyler, tienes ese - haciendo una mueca, señalo - porte -.

Me miré de arriba abajo. Tenía un pantalon negro, camiseta gris y vans negros. Estaba casual, ¿de que porte hablaba?

- Pensaba que los colores oscuros me quedaban bien - medio bromeé.

- Ese porte- se paró a unos centimetros de mi evaluándome. Señalándome con su dedo indice de arriba a abajo explicó - de "puedo tener lo que quiera porque soy hermoso" -

Solté una carcajada - No soy hermoso, Ko -.

-Sí, sí, claro, como sea, - movió sus manos, retomando la pasarela que estaba haciendo.- también está el factor de que tus amigos son unos idiotas. Bueno, todos excepto Tom, él es agradable -

- No dejes que Scott escuche eso - me burle, pero luego recordé que habíamos tenido una pequeña discusión, haciendo que borrara la sonrisa en mi rostros.

- Ni lo menciones. - Ko no sé dio cuenta de mi cambio de humor.- Como sea, creo que todo ya está escrito y es frustrante - suspiró con resignación. - Hay que aceptarlo - se tiró a su cama, que esta al lado de la hamaca.

Su cuarto era un color rosa pastel, su cama frente a la ventana que daba a mi casa con sábanas cremas, cortinas de madera, la hamaca en una esquina y una mesita de noche. Sus demas cosas en su closet, dándole un toque minimalista a la habitación.

- Yo creo que puedes cambiarlo - me encogí de hombros, volviendo al tema.

- Yo creo que está predestinado - contradijo.

- Creo - murmuré, frunciendo un poco el ceño. - que tenemos diferentes puntos de vista -

- Creo que es cierto - nos miramos a los ojos, nos quedamos en silencio, y unos segundos después estallamos en una carcajada.

Estar con Dakota, en su cuarto, me hacía relájarme. No había manera de estar mucho tiempo de mal humor alrededor de ella.

Cuando nos calamos, Dakota dio un largo suspiro y sonriendo, se dirigió hacia mi.
- ¿Y tu qué?- preguntó.

- ¿Yo qué? - le pregunté subiendo los pies a la malla de tela.

- He visto el carro de Calum afuera - eso me tomó desprevenido, tragué saliva fuertemente, no quería mentir.

-Sí... somos amigos - me encogí de hombros, para restarle importancia.

- ¿Fue por eso de la fiesta? - preguntó, mirando al techo, con total casualidad.

Mixed ColorsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora