Why not?

Capítulo 8

—Sabes que de nada sirve que nos sigas ocultando la verdad. Dinos todo lo que debamos saber.

—Yo no hice nada de eso... Por favor, deben creerme.

— ¡Está en todos los periódicos! Está en la televisión, la prensa maneja toda esa información ¿y dices que no hiciste nada de eso? –Un golpe en la mesa, el periódico siendo lanzado prácticamente a la cara de la muchacha y un notorio jadeo de sorpresa cuando éste golpeó contra su pecho. –Lárgate de la empresa. Ahora.

—Pero señor... —Lágrimas de impotencia.

—Hablaremos con la prensa, lárgate ahora.

En silencio, sin mediar palabra alguna y sólo con las lágrimas cayendo, se puso de pie y se retiró de la sala con el periódico en sus manos.

En el lugar, se hallaban todos los coach de los equipos y en silencio miraban la escena. Yo, sin poder hacer nada, observaba como ella se retiraba de ahí sin siquiera poder mirarnos.

—DongHae, prepara a tu equipo. Entrégaselo a Changmin y junto a HeeChul, tomen un descanso hasta que todo esto se calme. Buscaremos una nueva integrante para que puedan seguir en competencia, mientras tanto quiero que todos tengan en claro que ella no puede pisar la empresa nunca más ¿entendido? No quiero saber que se pronuncie su nombre por los pasillos ni que su historia llegue a convencerlos. Sabía que debíamos cerrar las puertas a gente como esa.

Con esas palabras, el CEO se retiraba dejándonos a todos en completo silencio. Nadie quería emitir ni un solo comentario, nadie quería decir algo en contra, pero ¿qué estaba haciendo yo? Poniéndome de pie, corrí desesperado hacia la sala donde siempre la veía ensayar, estaba la puerta abierta, era una buena señal ¿cierto? Entré sin pedir permiso y recogiendo sus cosas la vi ahí, arrodillada, llorando como hacía tanto tiempo no le había visto hacerlo.

—Hey... —Susurré inclinándome hasta estar a su altura, con la diestra acaricié sus cabellos notando como se tensaba por mi toque, estaba demasiado nerviosa, podía verlo, podía percibirlo. —No llores, ¿vale? Vamos a encontrar una solución.

—No, no hay solución... Ellos no me creen y tú puedes estar en peligro por mi culpa, DongHae. Esto sólo fue provocado por nada más que mi constante esfuerzo ¿sabes? —Me miraba sin poder detener su llanto— Donghae, entrené más que todos aquí, me pasé horas y horas mejorando todos mis movimientos sólo para que dos fotos se salieran de contexto y terminaran ahí, ¿acaso no pueden preguntarles a ustedes? –Me exigía con la mirada una respuesta pero yo sólo podía escucharle, sus ojos estaban cada vez más apagados. — ¿Cuál fue el mal que yo hice? ¿Qué fue lo que yo hice para que me trataran de esta manera? ¿No estaban ustedes para eso? ¿Para ayudarnos y enseñarnos? —Pero ambos sabíamos que no solamente era eso lo que salía a relucir, sino que en el periódico aparecía ella con varias personas más. Fotos de algún exnovio con el que había mantenido una relación y a esas alturas, ya todo su pasado estaba expuesto. —¿Por qué tiene que afectar eso ahora? ¿No importa más lo que soy en este momento?¿No merezco al menos la oportunidad de que me escuchen una vez? DongHae, mi vida está acabada...

No pude responderle, no pude consolarle, no pude decirle que no lo estaba, que podía confiar en mí, que podía apoyarse en mí, que podía mirarme como un amigo y confidente, que podía ser yo quien le ayudara a comprobar que era mentira todo lo que se hablaba de ella en ese momento porque yo estuve con ella y sabíamos el contexto de esas fotografías, pero ¿qué hice? Quedarme en silencio mientras miraba su rostro lleno de lágrimas, con los ojos hinchados pues no había parado desde que el CEO le había puesto un punto final a su carrera frente a todos los miembros de staff.

–Quizás sea mejor que descanses por hoy y mañana intentes pensar en esto. –Exclamé, ni siquiera sabía porque había dicho eso, no era eso lo que ella necesitaba ¿verdad?