3)Te extraño: I Found.

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—Gon, ya es tarde. ¿No deberías estar durmiendo?

Mito-San tenía los brazos cruzados. De pie en medio de la cocina, veía con cara de desaprobación al joven azabache, quien yacía sentado en una silla del comedor  toqueteando un pudín bastante frío. La expresión del chico daba a entender que no había dormido en un buen tiempo.

—Huh... Tal vez luego, Mito-San. Perdón, ahora estoy un poco ocupado —respondió sin ganas, a lo que la mujer suspiró derrotada. Batallar tantas veces con un Gon de quince años le tenía casi sin energías.

—Querido, ¿Por qué no quieres decirme qué ocurre? —se animó a preguntar después de unos segundos de meditación.

  A decir verdad, al principio la pelirroja pensaba que solo se trataba de un mal día o algo por el estilo, no obstante, pasadas unas cuantas semanas se empezó a preocupar, pues no le parecía normal que Gon estuviese en ese estado.

—Estoy un poco cansado, Mito-San. No te preocupes —el azabache forzó una sonrisa.

—¿Entonces porqué no vas a dormir?

—Luego...

  Estaba tan claro como el agua que algo andaba mal.
En realidad, Gon se había dado cuenta de algo bastante peculiar; ello le tenía ligeramente confundido y emocionado.

  Ya casi se cumplía un año desde la última vez que vio a Killua. Ging le ordenó regresar a Isla Ballena, ya que al no tener nen no podía ser un cazador. Sin su mejor amigo y sin aura, ¿Qué le quedaba? ¿La normalidad?
No quería ser normal. El quería seguir sus aventuras, y si no era con Ging, ya tenía a alguien en mente... Sin embargo, temía escuchar de Killua las palabras “Lo siento, Gon. Eso ya terminó, tengo que cuidar de Alluka, jamás volveremos a vernos”. Estaba siendo un poco egoísta, sí. El amor lo era.
  Porque sí. Sucedió tal cual.
Recién su visión logró aclararse para mostrarle que todo lo que sentía por el albino podía ser encasillado. Ese cúmulo de sentimientos se llamaba amor, y cuando Gon supo eso, se sintió torturado.
No soportaba más la distancia rígida que los mantenía lejos el uno del otro.

  Hablaban por teléfono todas las noches tratando de ignorar que eso no era lo mismo que estar recostados sobre el suelo, alrededor de una cálida fogata y observando la noche salpicada de estrellas.
  Extrañaba cada cosa de él, cada cosa que hacían juntos.

“And I'll use you as a warning sign
That if you talk enough sense, then you'll lose your mind
And I'll use you as focal point
So I don’t lose sight of what I want
And I've moved further than I thought I could
But I miss you more than I thought I would
Oh I'll use you as a warning sign
That if you talk enough sense, then you'll lose your mind.”

Versos De Chocolate. [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora