Versos De Chocolate. [En Edición]

10.- "The troubles": Zombie.

El cielo gris, nublado, escondido tras el humo asfixiante que el fuego incontrolable provoca.
El sonido inquietante, estruendoso, grotesco de las bombas, de los tanques, de las balas.
Y lo peor... Aquellas miradas de terror... Esos orbes cristalinos atrapados por el paisaje agresivo y miserable, llenos de inseguridad, temblando a cada segundo... Y pronto... Desapareciendo uno a uno.

Eso es la guerra.

¿Y qué es lo peor de ella? Miles de civiles inocentes caen cada día que ella está presente, personas con sueños rotos, corazones con profundos hoyos hechos por balas, sonrisas despintadas, irises apagados. Todas flotando sobre un vasto mar carmesí al igual que el fuego que les vió morir.

Niños que solamente salen a jugar la pelota, niños que no tienen idea de que en vez de eso, una enorme bomba puede sustituir esa bola de hule en cualquier momento.
Es lo que ocurre en la actualidad.

¿Cómo empezó todo? ¿Acaso fue de un día para otro? No.
El inicio se encuentra en el deseo de independencia de la parte norte de York Shin, que era reconocida como integrante de el gran Reino Nostrade, un país bastante poderoso.
Los ciudadanos, o al menos la mitad, se sentían segregados de su propio país, pues ellos no tenían los mismos privilegios de los cuales la otra parte gozaba cada día, todo debido a la diferencia étnica: Unos de piel morena, descendientes de Paphricka después de la conquista de Nostrade a dicho lugar y trasladados a York Shin; los restantes, en cambio, piel crema y de sangre pura. Sangre sin manchas...

El levantamiento ocasionado por los piel canela y la respuesta agresiva de los sangre pura fue lo que dió inicio a la guerra civil, llamada también "The troubles". El año 1916 estaba en curso.

Y eso no era todo, los pálidos al verse en mayor ventaja, formaron el Ejército de Piel Original (EPO) con el fin de volverlo un grupo terrorista, un grupo aliado con el Reino Nostrade para conseguir la sumisión de las sobras de York Shin del Norte.
Ante esto, Nostrade se negó firmemente. Aún así, eso no impidió que el EPO avanzara a su objetivo.

»19 de mayo, 1993. Ballena.«
Presente.

-Mito-San, Killua no quiere probar su comida.

En una habitación amablemente iluminada por candiles amarillos, flanqueada por paredes marrones y suelo con rastros de tierra, cuatro personas se encontraban sentadas sobre sillas que rodeaban una mesa lo suficientemente grande. Sobre ella, platos de comida, servilletas, cubiertos y vasos de agua descansaban vagamente.

-La verdad yo tampoco tengo mucha hambre, dejaremos que Killua no toque su comida por hoy. -Una dulce voz femenina llenó los oídos del pequeño niño de 5 años, así como también los de una mujer de edad avanzada, y otro niño más.

-Oye, ¿Me puedo comer tu plato? Tengo mucha hambre. -Habló nuevamente el pequeño azabache dirigiéndose al mayor sentado a su lado. Este, por su parte, soltó un pequeño suspiro antes de esbozar una linda sonrisa en sus finos labios.

Era un joven albino que guardaba celosamente sus 12 primaveras en una cajita mental.
Sí, el chico pertenecía a los Sangre Pura, una historia difícil de contar es la que sucedió para que finalmente cayera en manos de una familia de piel canela justo en Ballena, pequeño pueblo en la frontera del Reino Nostrade y York Shin del Norte. En una breve paráfrasis que él mismo escribió en una libreta vieja sobre el principio de su encuentro, se podía leer solamente esto:

//~"Hoy es lunes, soy Killua y tengo 8 años.

Mi papá y mi mamá me dejaron en un camión muy feo y estuve por horas ahí hasta que se detuvo en una carretera de tierra. Las llantas se habían ponchado.
Todos se fueron y yo me quedé solamente con Alluka, mi oso de felpa. Después de eso, llegó una señora pelirroja para sacarme de ahí pensando que era un perrito perdido, pero no, yo era un niño así que se sorprendió. Tenía un bebé en los brazos.