we don't know - beeches
Las olas chocaban en las enormes rocas con fuerza, el agua salpicaba los dos pares de piernas que colgaban por la ultima roca del sendero que utilizaban los pescadores, estaban alejados de la gente que disfrutaba de la brisa marina.
No hablaban, no se miraban, solo sus rodillas se rozaban, haciendo que Caleb sintiese fuego, un calor agradable que se acumulaba, viendo la espuma del mar desaparecer con sus mejillas rosadas, mientras a su derecha Edgar, con el torso hacia atrás sujetándose con los brazos, miraba las estrellas, y disfrutaba del sonido de las cigarras.
- El verano esta aquí.
Caleb asintió sin saber que decir, sintió como Edgar se colocaba recto mirando al frente, y sintiendo la fricción de sus rodillas al movimiento.
- ¿Cómo me has encontrado?
No estaba a la defensiva, solo preguntaba curioso.
- Jordan.
- Me lo imaginaba. - Rió sin esfuerzo. - Ese diablillo...
-Oh, vaya, que confianzas ¿no?
- Lo puedo llamar por su nombre, tengo su permiso.
Se miraron por un segundo mientras reían relajados, Edgar vio las manos de Caleb que yacían abrazadas, entendiendo rápidamente, desató la chaqueta de su cintura y la puso sobre los hombros del moreno.
- Gracias.
- De nada.
Lentamente ambos se acercaban al centro de ambos, juntando sus cuerpos, notando como por medio de los brazos compartían calor, la noche refrescaba, el mayor se apoyó sobre su brazo dejando su hombro libre para que Caleb se apoyase, y así lo hizo...
No se miraron en ningún momento, admiraban la luna llena iluminada, se sentían como un par de adolescentes tímidos, aún así Edgar descansó su cabeza en la de Caleb.
- Gracias.
Edgar cerró los ojos mientras preguntaba.
- ¿Por qué?
- Por venir a verme.
- Siempre... - Antes de volver a hablar espero que la espuma silenciase. - Tu padre...
- Todo bien. - Habló antes de que terminase de hablar. - Muy bien.
- Me alegro. - Giró su cabeza para dejarle un beso en la de Caleb. - Tengo que decirte algo.
- Dime.
- Antes, tienes que responderme a algo... ¿Volverás?
Cuando terminó de formular la pregunta, el otro asintió con la cabeza.
- Bien... Bien... - Volvió a darle otro beso en la cabeza.
- Dime.
- Te hecho de menos.
Sintió en su hombro el escalofrío del otro, cuando iba a mirarlo a los ojos sin mover la cabeza, Caleb si lo hizo, escondiéndose.
- Yo también.
El mayor sintió como Caleb se abrazaba a su brazo, acomodándose.
- Te esperaré.
- Lo sé.
Hablaban tan poco, pero ambos sabían que no hacia falta, el calor que emanaban sus cuerpos superaba la salada brisa, el olor del mar no existía para Caleb, sino que sentía el delicioso aroma de Edgar desde su chaqueta.
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Despierto (LGBT)
Romance| 2⃣° Finalista Romance - PREMIOS GUM 2018 | 30/11/17 | El anillo de compromiso que descansaba en su dedo, era símbolo de amor y esfuerzo tras años de relación. Pero tras volver a casa, Caleb se encuentra a su futuro marido compartiendo cama con otr...