Fall (Hoseok , Jungkook y Tú)

Capítulo 16

• Narra Jungkook.

Pasaron dos largos años desde que había regresado a America. Logre terminar la universidad con honores y conseguir un trabajo con un sueldo jugoso.

Ahora nada me impedía regresar a Corea y recuperar a _____. Compre una pequeña, pero lujosa y bien amueblada, casa. Llegue a Corea y fui directamente a la casa de mi madre, de alli fui a mi hogar.

— ¿Te gusta? — pregunte a princesa, cuando esta regreso de inspeccionar el living. Ella solo ladro en respuesta y movió su colita. Princesa era mi caniche toy blanco, me lo había regalado una compañera de la universidad.

Acomode mis cosas y me recosté sobre el sofá. Con mi vista fija al techo y perdido en mis pensamientos. No sabia que debía hacer, ya había vuelto eso era un gran paso. Ahora ¿Que procede? Estaba tan inseguro que no sabia como actuar...¿Vale la pena? ¿Y si ella ya no siente nada por mi? Sacudí mi cabeza varias veces intentando alejar aquellos pensamientos.

Era ella, ella era la persona que me hacia feliz. Ella era para mi, yo era paraella. Si no era _____, entonces no quería a nadie mas. No era tarde para volvera intentarlo...al menos eso quería creer. Los recuerdos latentes de nuestra felicidad me motivaban a seguir. Esome daba fuerzas a seguir; Las promesas de amor eterno, su sonrisa en mi mente.
Mañana iria a verla, sabia donde trabajaba. _____ termino la universidad yahora enseña en un jardín de Infantes. Sigue viviendo con Hoseok y no sé masnada de ella.

El día paso lento y tortuoso, estaba tan ansioso que los minutos parecieronhoras. La hora por fin había llegado, subí a mi auto y fui directo al Jardín.Me estacione en frente de este y espere que cada uno de los niños saliera...vicomo ____ los ayudaba cariñosamente a llegar hasta sus padres.

Una enorme sonrisa se dibujo en mi rostro al verla alli, con decenas de niños rodeándola.Su sonrisa iluminaba su rostro. Llevaba un guardapolvo rosa y su pelo amarrado,parecía una autentica maestra. Esa imagen me dio demasiada ternura, por unmomento imagine que aquellos niños eran nuestros hijos.

Los padres se marcharon dejándola completamente sola, vi lo que parecía mioportunidad. Baje del coche y camine hacia ella. Mientras me acercaba pude oírcomo se despedía de sus compañeras, dándome la espalda.

— ¿Maestra, podría ayudarme? Me dijeron que aquí trabaja el amor de mi vida.¿Sabe usted donde esta? — pregunte quedando a unos cuantos pasos de distancia.

Ella giro lentamente y su expresión no reflejaba nada bueno. En ese momento mepercate de mis entupidas palabras. Tendría que haber tenido una entradadescomunal, inigualable.

— ¿Jungkook? — Su ceño se frunció al pronunciar mi nombre. Vi como de sus ojos salían chispas y se acercaba a mi con paso firme. Bastaron segundos para sentir un leve picor en mi mejilla, seguido de dolor. Ella acababa de abofetearme. — ¿Qué mierdas haces aquí? — la rabia y rencor de sus palabras me demostraron que ya nada quedaba.

— Te amo y vine a recuperarte — Confesé con mi vista fija en sus ojos, intentando demostrarle la sinceridad de mis palabras. Ella alzo su mano e intento abofetearme otra vez, pero esta vez tome su mano y la deje en el aire. Allí pude darme cuenta del anillo de compromiso que decoraba su dedo.

Mi pecho se hundió y sentí como absolutamente toda mi vida se venia abajo. La desesperación me invadió, la necesidad de romper en llanto y la incalculable rabia y odio hacia mi.

Sin pensarlo dos veces, la tome en mis brazos y la colgué en mi hombre, como si de un costal se tratase. Ella pataleo pero fue en vano, yo era mucho mas fuerte. A lo lejos vi que las mujeres, sus compañeras, se acercaban a nosotros, pero fue en vano.

— Tranquilas, ¡Todo esta bien! ¡Yo lo conozco! — Grito _____, cesando sus movimientos. Sabia que ella no quería venir conmigo, pero tampoco quería alarmar a sus compañeras.

La subí alasiento de copiloto y arranque a toda velocidad. Ella tan solo decía groseríasy estaba histérica. En minutos llegue a mi casa, baje y la subí nuevamente a mihombro. Entre a mi hogar y cerré la puerta con llave.

Sabia que esta no era la solución, sabia que esto no estaba bien, pero era midesesperado intento de recuperarla. Quería que ella me escuchara y la únicamanera de que lo hiciera era sometiéndola, de lo contrario huiría.