Impresiones

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Atsushi despertaba incomodo, abrió sus ojos con pesadez, miro a su alrededor, Ryunosuke le abrazaba mientras dormía, aquello le pareció tierno al albino, aun así le quito el brazo de encima y se sentó en aquella enorme cama, se estiro y miro el reloj

- ¡¿La-las 9?! – grito el albino despertando a Akutagawa

Akutagawa miraba como el albino se levantaba a gran velocidad y tomaba sus cosas, se vestía y preparaba una mochila

- ¿Qué haces? – pregunto el hombre de negocios

- Debo ir a clases ¿lo olvidas?

- Tienes permiso de celo

- Mi celo lo redujiste ¿recuerdas? No quiero perder más clases

- ¿Puedes esperar a mañana? Tengo una cita a donde quiero llevarte

- ¿Qué? No, mi estudio es primero

- Tienes permiso

- Akutagawa – se quejó el albino

- Jinko, es una reunión clásica de empresarios, simplemente que son muy familiares, si te llevo el negocio se cerrara más rápido

- Así que para eso querías a un esposo – se quejó el albino – me voy a la escuela

- Atsushi, solo obedece, también iremos a una fiesta el sábado en la noche

- No quiero hacer nada de eso – se quejó el albino

- Eres mi esposo, no tienes alternativa, hoy el mundo sabrá que estamos casados

- ¿eh? ¿Planeas hacerlo público?

- Soy una figura publica

- ¡No! No quiero que la gente me mire como un aprovechado

- ¿Disculpa?

- Todos en mi facultad saben que vengo de un orfanato, si se enteran que me case contigo me verán como un oportunista

- ¿Qué importan los demás?

- Son mis amigos

- Si piensan así no lo son

- ¡Akutagawa!

- Se hará público, quieras o no, es mi forma de protegerte

- ¿protegerme? ¿estás loco?

- ¿Sabes cuánto alfas irán por ti?

- No lo sé, jamás tuve uno y el primero fue un loco que me amenazo – dijo Atsushi cruzándose de brazos

- De verdad eres todo un caso – se quejó Ryunosuke

Atsushi termino prácticamente huyendo de la mansión después de un rato de peleas Ryunosuke le dejo ir con el hecho que no faltará al almuerzo a las 12:00. Atsushi había llegado a la universidad, se topó con Chuuya y estos disfrutaron de su día escolar

- Akutagawa, un gusto verle – decía un rubio

- Mr Scott – dijo el pelinegro – un gusto verlo igualmente

- ¿Qué tal están los negocios aquí en Asia?

- Tengo competencia, pero no me va mal, los negocios de Dazai-san hacen a los míos más influyentes

¿Te amaré? - AkuAtsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora