Mientras caminaba varias cuadras para El Geoffries, revisé mi correo de voz:
Hola Liam. Es tu papá. Estaré en Sacramento el viernes para una reunión de negocios. Si funciona para tu horario, me gustaría ver tu casa antes de irme. Llámame tan pronto como le hayas dado un vistazo a tu calendario. Adiós.
La tensión se arrastró por mi columna vertebral mientras colgaba el teléfono. Desde que Niall me había recordado que mi padre me había dado el pago inicial de mi casa, insignificantes preguntas habían acechado mi cerebro.¿Por qué no mi padre y yo nunca hablábamos de algo profundo? No era como si él fuera autoritario o sentencioso como mi mamá. Debería haber sido capaz de decirle cómo me sentí de abandonado cuando se había mudado a Seattle. Y cómo mi ruptura con mi ex me había devastado. Pegar una sonrisa siempre había sido la dinámica de mi familia, pero estaba empezando a preguntarme si eso era algo bueno. Quiero decir, empecé a abrirme con Zayn muy fácilmente y apenas lo conocía.
Zayn. ¿Por qué estaba pensando en él otra vez?Cuando llegué al hotel, una turba de reporteros me recibió en la puerta y uno puso un micrófono en mi rostro. — Buenas noches caballero. ¿Ha venido a participar a "Descendiendo por la
Diabetes"?
—No, — dije, recordando el anuncio en el vestíbulo. Aunque me preguntaba de qué se trataba el evento, me concentré tratando de pasar por los periodistas dado a que no me gustaba estar en el centro de atención... posar en el fondo era mucho más mi estilo — Estoy, eh, aquí para cenar.
Dos porteros flanqueaban las puertas dobles de oro y me hicieron pasar de manera segura en el interior. Lancé una sonrisa de agradecimiento a cada uno de ellos. — Gracias.
Cuando entré en el vestíbulo, me quedé sin aliento. Una vez más, admiraba la belleza del hotel. Todo era de mármol pulido y madera oscura y una decoración sutil, pero con clase. Era un destino de primera clase en Sacramento, pero nunca antes había tenido que apartar a la prensa para llegar. La suela de mis zapatos hizo clic sobre el piso del vestíbulo y sabía que no había manera de evitarlo. Con el fin de llegar al restaurante del hotel, tenía que pasar por delante del bar. No buscaría a Zayn, sin embargo. Mantendría los ojos al frente. Derechos.
¿A quién estaba engañando? No iba a ser capaz de resistirme a echar un vistazo. Pero eso estaba bien. No era como si me detuviera a charlar. O a conseguir su número de teléfono.Aunque, si lo hacía tendría mi bañera sellada...
Oh Dios. ¿Qué era lo que estaba mal conmigo? Apenas y conocía al tipo. Tal vez sólo estaba mirándolo como una forma de superar a mi ex (la sabandija tramposa). Pero eso era lo tenía que hacer para remodelar mi casa. Y a diferencia de un coqueto incidente con un ardiente barman, mi acogedora nueva casa me mantendría a salvo y caliente para el futuro previsible. Mientras pasaba junto a la barra, casualmente giré la cabeza... luego fruncí el ceño.
Había una mujer barman rubia sirviendo esta noche. No había señales de Zayn. ¿Estaba en un descanso? ¿O se le había olvidado que tenía la noche libre cuando había escrito esa pequeña nota en mi servilleta? Una ráfaga de decepción me inundó, pero traté de quitármelo de encima mientras me dirigía al restaurante donde encontré a Brian esperándome.
Él no era tan guapo como Chase (o Zayn), pero era lindo de una forma deportiva. Además, según mi mamá, era arquitecto. Y los arquitectos debían saber mucho acerca de la renovación de una casa, por lo que podríamos hablar de un interés en común durante la cena. Tal vez aprendería algo de información relevante para mi casa.— Hola Brian. — Elevé mi mano cuando me detuve frente a él. — Así que finalmente te conozco.
Él sonrió de una manera que no era exactamente repugnante e incluso podría ser interpretada como linda si yo estuviera en una cita de verdad, lo cual no estaba. — Encantado de conocerte a ti también, — dijo dándome un suave apretón de manos. — ¿Cómo está tu madre?— Está estupenda, gracias. — Disparé un último vistazo a mis espaldas. Todavía la barman rubia. Lo que sea. Forcé las esquinas de mi boca hacia arriba. — ¿Has estado esperando mucho tiempo? Juntó sus manos apretándolas. — En realidad, llegué un poco temprano como parte de la sorpresa.
Parpadeé. — Bien, no tengo ni idea de lo que quieres decir con eso. ¿No cenaríamos?
— Tendremos la cena después. — Él movió sus cejas, luego giró su cabeza y puso su mano en el lado de la boca. — Mi cita está aquí ahora.
Me estremecí con la sonoridad de su voz.La anfitriona de cabello oscuro se acercó y nos dio una encantadora sonrisa. — ¿Gustan tomar algo antes de comenzar?
Miré desde la anfitriona a Brian. —¿Antes de empezar con qué?— Sí, definitivamente necesitamos un trago primero. — Él me dio una pícara mirada y empezó a seguir a la anfitriona.
Entonces se detuvo cuando se dio cuenta que yo no estaba detrás de él. Él extendió las manos. — Confía en mí, te va a encantar esto.¿Confiar en él? Ni siquiera lo conozco.
— En realidad, no me encantan las sorpresas. — Apreté mi abrigo alrededor de mis hombros, teniendo dificultades para mantener mi compostura. — ¿Podrías por favor decirme lo que estamos haciendo? Si sus planes eran cortos, podría ser capaz de conseguir despegar un poco de papel esta noche.
— Bien, soltaré la sopa. — Su rostro se iluminó como si hubiera ganado la lotería de California, luego levantó los brazos e hizo gestos como si estuviera subiendo una cuerda. — Haremos rappel aquí, en el hotel Geoffries.Me eché a reír. — Lo siento. Sonó como si dijeras que haríamos rappel en el hotel.
Él asintió con entusiasmo. — Eso es correcto.
Mi boca se congeló. — ¿No estás bromeando?
Él negó con la cabeza. — El evento de "Descendiendo por La Diabetes" cuesta $,1000 por ticket y me gané dos boletos en la radio. Haremos rappel desde la terraza de la piscina que está en el quinto piso. ¿No es increíble?
— Sí, — le dije, encontrándolo increíble que él pensara que yo haría rappel por el costado del maldito edificio. Manteniendo la calma, miré mi sedoso abrigo, después mantuve el dedo hacia arriba. — Déjame correr a casa y cambiarme a mi equipo de escalar montaña.Yo no regresaría.
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•|Licencia para citas|•
Romance[Adaptación] Libro por Susan Hatler• Después de descubrir las trampas que su prometido le hizo, Liam se centra en dos cosas: la remodelación de su casa y evitar a los hombres a toda costa. Pero sus amigos insisten en que tome el control y tenga c...