Corazón de Hielo (COMPLETA)

Interesante

Ámbar

Estaba con los integrantes del grupo que enviarían hacia Boston.

Quince personas, entre mujeres y hombres, los que más destacaban, eran Bastian, Zac, y una nueva chica que había llegado. Andrea. Que era experta en virus mentales. Una asesina.

Era la que mejor me caía, por detrás de Sascha. Había hablado con ella antes de que se reunieran. Se había caído al saltar del segundo piso de su departamento, cuando tipos raros la querían agarrar. No supo cómo había seguido adelante, pero a pesar de tener a columna fracturada continuó caminando.

— Salir adelante es nuestra primera lucha —le había dicho—.

Ahora ella miraba fijamente al frente.

No era estúpida. La única persona capaz de poder sanar heridas internas de huesos y tejidos, era Bastian. Pero a ella le habían dicho que fueron los médicos.

Ahí estaba de nuevo, tratando de evitar a las personas.

— Muy bien —habló Sahara, la única mujer a la que consideraba como a una verdadera guerrera. Ella se había pintado el cabello de azul—, todos ustedes, han sido seleccionados para formar parte de un grupo de... llamémoslo limpieza —sonríe—... el trabajo de ustedes, es el de exterminar a un grupo de Degenerados muy peligroso que ya logró hacernos daño una vez.

Quedo él nombre de él en el aire. Nadie dijo una palabra.

— Serán perfeccionadas vuestras habilidades para que puedan ser eficaces en el campo de batalla. Aquí —empieza a caminar en círculos—. Las peleas serán con chalecos y balas falsas. Allá fuera, será con la vida y el valor. Aquel que no esté seguro de esto, que se marche ahora.

En las caras de varios, vi dudas, pero de seguro estaban esperando a que uno abandonase, para salir ellos.

— Yo no —dijo Bastian. Todo el mundo giro la vista hacia él—.

Inteligente pensé, había pensado lo mismo que yo.

— Tampoco —saltó otro, y después dos más—.

— Si es así —Sahara extendió el brazo—. Retírense.

Los tres que hablaron a parte de Bastian se fueron caminando, pero él quedo.

Andrea le dio un codazo, para que se "fuese"

Le iba a decir que lo dejase, pero Bastian se dedicó a enviarle una mirada asesina.

Ella se giró de inmediato, tensa.

— Bien. Lo primero que haremos, será probar vuestras habilidades. No les enseñaremos nada, pero si los acostumbraremos a estar en constante peligro —ella se gira—. Les recomiendo que se compren un paquete de vendaje. Puede que lo necesiten.

Sonreí por ello. Todos siguieron a Sahara, pues daba a entender que ella era la líder. Aunque Anderson a mi lado, había estado callado.

— Bastian, Zac, Andrea y Leandro no pueden mezclarse con los demás. Ellos deben de tener otro entrenamiento.

Asentí, mientras me dirigía a Bastian.

— No le presiones —me dijo él—.

Continúe avanzado. Antes de que él se topara con mi mirada, le plante un golpe en el pecho. Como pensaba, lo detuvo.

"Dirígete con Anderson"

Lo mismo le dije a los otros tres. Sahara podía encargarse de los demás. Anderson y Yo lo harías aparte.