Flecha en el Agua

Ayuda

—Lo siento Gran espada... — Arthur pudo escucharlo claramente porque a pesar de lo que muchos pensaban Arthur tenía un muy buen oído, muy similar al de superman

—¡Roy! —la camioneta se alejó a toda velocidad dejando tras de sí el rechinido de las llantas y el olor a quemado del caucho—Tu...— Arthur se acercó de nuevo a Oliver—¡Lo arruinaste!

—¿yo lo arruiné? —Oliver habló de manera irónica—no sabes quién está arruinando a quien, el no necesita tu ayuda...

—¿y qué? ¿Necesita la tuya? —Arthur tomó a Oliver de las ropas y lo sacudió—el no parecía estar muy bien cuando lo encontré en la calle bebiendo...

—¡Eso no fue mi culpa!

—¡Lo abandonaste!

—¡Y Tú lo encubres! —Gritó Oliver enojado mientras le lanzaba otro puñetazo al atlante, el cual para su sorpresa le hizo caer de espaldas y rodar varios metros acompañado de un ruido ensordecedor, mientras que el rubio arquero sentía como algo lo golpeaba en el pecho y lo hacía caer hacia atrás.

—¡Suficiente! — la única voz femenina cercana interrumpió la pelea, Dinah se había decidido a intervenir lanzando una onda sónica al rey de los mares y dándole un buen puñetazo a su esposo—¡Los dos son unos idiotas! —Dinah estaba evidentemente molesta —lo que menos necesita en estos momentos Roy es un pleito como este

—Yo no vine a buscar pleito—dijo Arthur mientras se ponía de pie y se sacudía las ropas—estábamos en casa, durmiendo plácidamente cuando tu estúpido marido interrumpió rompiendo la puerta

—¡Oliver! —Dinah reprendió a su esposo

—No fue intencional—Oliver recibió una mala mirada mientras se ponía de pie—esta bien quizá me pase un poco

—¿Un poco? De quejó Arthur, no se ni siquiera que fue lo que paso, solo comenzaste a atacar a Roy como si se te fuera la vida en ello...

—Cierto ...— Oliver pareció perder la razón nuevamente, regresó corriendo a la casa de Arthur y todos le siguieron

—¿vas a seguir causando destrozos? —dijo el atlante mientras miraba como el arquero rebuscaba por su pequeña sala—¡Ey!

—Cierra la boca pez estúpido...aquí esta...—dijo Oliver más tranquilo —¿ves? — Arthur miraba la pequeña bolsa de droga, no era tonto sabía lo que era

—Eso no es mío

—Claro que no... es de Roy...

—Yo nunca lo había visto —se defendió Arthur

—Claro que no—Oliver se alejó un tanto escandalizado caminando a donde estaban Dinah y Connor—Roy se lo dio a Connor

—Connor ¿es cierto eso? —Arthur se notaba incrédulo

Con algo de trabajo el joven rubio por fin se decidió a hablar —si...es cierto Roy me lo dio—explicó el pequeño, Arthur cerró los ojos y Oliver extendió los brazos—pero no me lo dio para que me lo tome, me lo dio para que lo guarde

—Eso es solo el comienzo—dijo Oliver

—¡No! no es así —dijo Connor un poco ofendido—es que ... Roy ...el día que ... estábamos jugando, mi hermano lo tenía en la bolsa y se le cayó y no quería que lo viera el señor Curry... por eso me lo dio para guardar...

—Ya veo... —dijo Arthur—pobre pequeño Betta

—¿pobre? —Oliver estaba un poco airado y enojado— pobre idiota

—¡Mira las cosas como deben ser Oliver! —se quejó Arthur —el chico lo tenía consigo, no lo estaba consumiendo y se lo dio a Connor para que lo guardara