Natsu está vomitando detrás de un arbusto, a los vampiros no nos sienta muy bien el transporte, pero debíamos coger el tren si queríamos llegar a la hora. Gray y yo nos recuperamos hace unos minutos, solo nos queda esperar que Natsu eché toda la sangre que quedé en su sistema.
–Le dije que no se alimentará de las dos chicas de la estación. –gruño cansado de esperar.
–Parece que aún no arregla las cosas con Lucy y no puede alimentarse de ella. Ya sabes alguien le ordenó a Juvia y Lucy que les tendrían mucho miedo a los vampiros. –suspiro, se me olvidó ese detalle. – Juvia ya lo ha superado, sólo falta Lucy.
–¡Qué sepáis que vuelvo corriendo! –Salamander por fin aparece detrás de los arbustos. – Pues ya he dejado mi regalito a la parejita.
Nos reíamos ante su broma. Subimos por las escaleras que se dirigen a la puerta principal, ya abierta, en mitad del camino nos encontramos a Minerva entrando a la fiesta.
–¡Minerva! –grita Natsu haciendo que todos nos miren. Los tres la alcanzamos, no entiendo porque está entrando a la fiesta si ella es la prometida ya debería estar junto Ashdeak. –¿Qué haces aquí?
–Por enésima vez no soy la prometida. Es una simple humana. –mi cabeza trabaja a toda velocidad.
De repente me encuentro ante la idea de que la prometida puede ser Levy, mi corazón muerto duele, arde como el mismísimo infierno. Sin esperar más entro deprisa al salón principal donde se celebra la fiesta. Me recibe las increíbles blancas escaleras. Mi cuerpo se relaja al no ver a Levy. Siento a alguien aclarándose la garganta detrás de mi me giro para encontrarme con Ashdeak. Le hago una pequeña reverencia y me pongo recto al sentir su mano en mi hombro.
–¡Vaya! Cuanto respeto, no es el mismo de hace unas semanas cuando atacaste mi palacio. –carga sus palabras llenas de resentimiento para luego escupirlas mientras mueve la copa de sangre que tiene en su mano. Me doy cuenta que hay unas cuantas miradas posadas en mi y solo por eso ya se que lo han escuchado.
–Lo siento, señor. –una sonrisa de victoria se planta en su rostro. Me quedo mirando su copa moviendo sus átomos con cuidado. – Pero usted cogió algo que no le pertenecía. –la copa estalla en su mano provocando un pequeño corte en esta.
Su sangre es deliciosa y hace que nuestros instintos más vampiros. Está prohibido atacarle así que tenemos que hacer mucho por controlarnos. Su mirada me atraviesa y mi cuerpo por si solo se arrodilla haciéndome saber que está usando unas de sus habilidades en mi. Colocando su mano llena de sangre enfrente de mis ojos.
–Muérdeme y date por muerto. –sus ojos ambarinos brillan con coraje.
Para un vampiro esto es muy duro. Tengo la garganta totalmente en rojo vivo, mis ojos arden ante aquella delicia, sudo para compensar la temperatura de mi cuerpo y mis músculos están tensos.
–Repite, ¡NO VOLVERÉ A IR EN TU CONTRA! –alza la voz para que todos los presentes lo escuchen mientras aprieta su mano empezando a caer gotas de sangre en mi cara haciendo el auto-control más difícil.
–No volveré ir en tu contra. –susurro logrando que aparte la mano. Escucho como la piel se va uniendo.
Otro de sus poderes es controlar su propia sanación,aterrador. Se agacha a mi altura y me entrega una copa de sangre. Que bebo de un sorbo
–Sabía que no lo harías por eso eres mi súbdito más leal ¿cómo has estado, amigo? –cuando voy a contestarle, escucho las bisagras de una puerta y un corazón latir frenético. Su olor a melocotón dulce llega a mi. Escucho sus pequeños pasos aproximándose.
Mi gran miedo se hace realidad, mi alma destinada se va a casar con otro. Mis ojos la ven, es una diosa, está hermosa. Nuestras miradas se cruzan y su corazón empieza a latir con fuerza. Pero mi diosa pasa de largo la escalera, y corre hacia el final del pasillo del pasillo de arriba.
–Si me disculpas. –Ashdeak sube corriendo las escaleras.
Está huyendo.
No quiere casarse.
Tengo que ayudarla.
Corro detrás de él, y me escondo detrás de una esquina que da a una de las habitación.
Entonces lo huelo, agua salada. Levy está llorando. Él la ha hecho llorar.
–¡Suéltame! –su voz hace que mi corazón se encoja– ¿Vas a dañarme de nuevo?
¿¡La ha tocado!?
Mi cuerpo arde en furia. Tengo que controlarme. No soy rival para Ashdeak.
–Te dije ni un espectáculo más e intentas huir el día de nuestra fiesta de compromiso. –puedo ver como Ashdeak cierra la ventana por la que pensaba escapar mi enana. Veo como le da una bofetada haciéndola caer al suelo.
Mi cuerpo reacciona por si solo, camino hacia ellos apretando mis puños. Ignoro las órdenes de Ashdeak diciéndome que me vaya. Me agacho a la altura de Levy y acaricio la mejilla que ha golpeado Ashdeak agarro su mano para levantarla. Sus ojos no se apartan de los míos en ningún momento, es entonces que me doy cuenta de cuanto a sufrido.
–Gajeel... –mi nombre en sus labios suena como una dulce melodía.
Me giro para darle un golpe a Ashdeak, cargo a mi enana en mi espalda y después de reventar la ventana salto al jardín.
Corro con ella en mi espalda mientras sus pequeños brazos rodean mi cuello. Ashdeak se posa ante mis ojos bajo a Levy para no dañarla.
Sin embargo, todo ocurre demasiado rápido. Un ser luminoso baja del cielo a gran velocidad dejando una daga de plata en el pecho de mi rey. Este consigue agarrarlo y atravesar su pecho con su mano sacando su corazón y para después pisarlo. El ser luminoso cae al suelo al instante que mi rey.
Levy se arrodilla a su lado poniendo su brazo en la boca de Ashdeak pero él no la muerde solo niega.
–Ya no tienes peligro, Miguel arcángel... está muerto... por fin puedo desaparecer... –una pequeña sonrisa se cuela en sus labios pero se borra. – Levy... –se incorpora hasta ella y luego la muerde. Pero no oigo la succión de la sangre. Levy se retuerce de dolor en el suelo. – Gajeel haz que... beba mi sangre... Ella será tu... nueva reina.... encárgate de que lo sea...–muerdo su brazo manteniendo su sangre en mi boca con mucha difícultad.
Agarro el rostro de Levy, y plasmo en su labios el amor que siento, por todo el tiempo que la he extrañado y dejando paso a la sangre de Ashdeak. Sin embargo, no me detengo. La sigo besando acabo de descubrir mi nueva droga. Sus labios.
Me detengo al sentir sus filosos colmillos contra mislabios. Tengo que parar o me matará.
–Sed... –es lo único que logra decir. Haciendo mucha fuerza la llevo de nuevo al palacio, todas la miran impresionados pues lleva la sangre que nuestro anterior rey pero eso ellos no lo saben. Levy con su nueva velocidad corre hasta las copas de sangre se bebe como quince hasta que consigue parar.
La gente empieza a arrodillarse, al entender la situación. Seguro que alguien vio el cuerpo de Ashdeak en el jardín.
Camino hasta ella entre medias de los arrodillados. Agarro su mano y me arrodillo besando su mano.
–Larga vida a la reina.
FIN
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¡Hola mis queridos lectores!
¿Qué les pasó el capítulo? Me costo mucho escribir "FIN" sinceramente le he cogido mucho cariño a esta historia, yo creo que es porque amo los vampiros.
¿Cuáles vuestra parte favorita de toda la historia? Mi curiosidad me gana estaré leyendo los comentarios.
Recuerden que aún falta el epílogo que estará disponible a lo largo de esta semana. Mientras pueden pasarse por mi nueva historia "La luna del alfa" que arrancará después del epílogo de está hermosa historia. Peroooooooooo, si esa historia supera los los 5 o 6 likes antes del miércoles subiré el primer capítulo antes que el epílogo de esta hermosa historia.
Saludo y besos de Noa-chan
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Tu dulce sangre
FanficLa sinopsis se encuentra dentro espero que disfruten de la lectura tanto como yo amé escribirla. Portada hecha por @-MagaMirajane- Obra registrada en: SafeCreative Código:1901239720280