Keller.

Capitulo 6

Cammeron
Ante los ojos de todos, soy perfecto: tengo familia perfecta, futuro asegurado y la relación más hermosa de la escuela. Mi familia nunca fue perfecta; mi padre es alcoholico y mi madre lo único que hace es pasarse el día gritándole. ¿Mi novia? Es hermosa y nos pasamos bien los días. Yo voy todas las noches a su pequeña casa porque vive sola, ya que su madre falleció y su padre se fue sin dejarle nada. Es extraño, el padre de Marinne se fue un día antes del incendio que causó la muerte de su madre. Volvamos a Marinne, ella es casi perfecta pero aún no sé si la quiero para toda la vida pero Milán... a Milán yo la amaba como no podría amar a nadie pero ella no quiso luchar por nosotros. Y mi futuro... bueno, si no consigo una beca completa en Keltown University me quedaré sin futuro. Quiero dedicarme al deporte completamente y mis padres me apoyan, pero no tienen dinero para costear la universidad.

La luz del sol se refleja en la hermosa melena rubia de mi novia. Estamos comiendo un sándwich en el patio de la escuela. Una de nuestras tradiciones es cortarlo por la mitad y venir a el mismo lugar de la escuela todos los jueves. Este día es el único dia de la semana en el que no puedo ir a casa de Marinne porque ella tiene algo ahí de una labor comunitaria en un hospital psiquiátrico. Nunca entendí bien para qué era que iba, pero no haré mucho caso a ello.

-Cam, mañana si quieres podemos ir por un yogur helado en esa tienda que tanto te gusta-dice mi novia sacándome de mis pensamientos
-Si, pero lo pedimos para llevar y nos lo comemos en tu casa con una película- le invito y le guiño un ojo pervertidamente
-Eres muy pervertido, Cam-mi novia se carcajea. Ella pretende ser así en la escuela, pero fuera de la escuela es otra cosa.
-Shhh. El maestro Evan está cerca, te va a escuchar-me susurra y yo volteo los ojos. Odio a ese maestro. Es de ojos azules, cabello negro y muy musculoso. Todas las chicas babean por él ughhh
-¿Qué?-le pregunto en voz alta confrontándola
-No lo hagas...- Abre los ojos como plato advirtiéndome
-¡Mi novia y yo haremos cosas malas mañana!-
Grito muy alto y Marinne se ríe tapándose los oídos
-¡Ay!-Grita mientras menea la cabeza de un lado al otro y yo río-Voy al baño y después me voy, bai-se despide con un beso y se va. ¿Por qué se va tan de prisa?

Marinne
Estoy caminando tan rapido como puedo através de esta mierda de escuela. Para cuando llego al salón del maestro Evan estoy que me voy a quedar sin aire.

-Ya era hora de que se acabara esa estupida cita de tórtolos-exclama el maestro Evan mirando los exámenes que está corrigiendo-Ven aquí- me invita y me siento en el asiento que tiene a su lado en el escritorio.
-¿Cómo me fue?-le pregunto mirando hacia los papeles que tiene en su escritorio
-¿Como crees?-me dice sarcastico y baja la vista hasta mi escote. Tengo un vestido color verde con el pecho bastante escotado en forma de v, sé que lo provoca. Sé lo que le gusta
-Ah...-es todo lo que consigo decir y me acomodo en la silla
-Por cierto, escuché al imbesil de tu novio gritando que tendrán una noche caliente mañana. ¿Debería ponerme celoso?-me dice mientras se acerca. Aquí vamos otra vez...
-Sabes que no, Evan-me acerco y le doy un corto beso en los labios. Se lo que quiere. No me molesta que quiera más que unos besos, pero en la escuela no es conveniente hacer más
-me invita a sentarme en el escritorio y comienza a subirme el vestido. ¡Oh rayos! No sé lo que quiere. Sigue besándome mientras llega hasta mi ropa interior y comienza a intentar bajarla pero yo me trinco
-Evan...-Le digo protestando. Nunca habíamos llegado tan lejos
-Eres hermosa Marinne-dice entre beso y beso mientras me acaricia los brazos-Me vuelves loco-bajo la vista y ¡Oh rayos! Hay alguien feliz allá abajo
-Me tengo que ir, Evan-intento salirme de sus brazos pero él es muy fuerte
-Puedes faltar hoy...
-Bueno... -le digo y comienza a besarme desesperadamente y yo lo interrumpo-Mejor ve a mi casa hoy, ya me haz llevado otros días
-Esta bien...-lo convenzo y me arreglo el vestido para salir. Como son las cuatro de la tarde, el pasillo está casi vacío. Camino lo más rápido posible para poder salir de la escuela e irme. Cuando llego a la puerta, una mano me agarra por el brazo. Es Cammeron...

-Pensé que ya te habías ido- dice él mientras me volteo
-Si, ya me iba. El maestro Evan me pidió ayuda para corregir los exámenes.
-No sabía que los exámenes se corregían solos...-Dice molesto
-¿Qué? No entiendo Cam...
-No sabía que los exámenes se corregían solos- repite
-¿Por que lo dices?- le pregunto y arqueo una ceja
-Porque te vi Marinne, te vi besando al maestro Evan. Casi tienen relaciones en el escritorio, Marinne. Por Dios. Nunca pensé que caerías tan bajo y menos siendo mi novia
-Cammeron, no entenderás...
-Oh si lo entendí, Marinne. ¿Sabes? Aquí lo dejamos, esto se acabó-Dice y se va sin más

Llevo casi dos horas manejando hacia las afueras de Keltown. Después de unos diez minutos más, llego a un edificio blanco lleno de ventanas. Aparco mi auto en el estacionado y me bajo en seguida. Este lugar está lleno de humedad. Llego a la recepción
-Hola chica-dice una señora de unos cuarenta años con uniforme de enfermera
-Pasiente 406-le informo y le entrego mi identificación. Me lleva atraves del pasillo y me dirige a uno de las habitaciones. La señora cierra la puerta detrás de mi y me deja en la blanca y fea habitación.

-Hoy te tardaste más de lo normal-me reclama sentada sobre la cama mirando hacia la pequeña ventana de la pequeña habitación
-Hola mamá