Taylor Ali
-Despierta...-escucho susurros a lo lejos-Taylor...-Siento tres palmadas en el hombro
-¿Qué quieres?- Contesto seca con voz somnolienta y me siento en la cama
-Te he dicho que no salgas de fiesta los viernes. Sabes que los sábados estamos comprometidos-me recuerda mi madre por enésima vez
-No tienes ningún derecho sobre mi desde que te fuiste de esta casa, madre-le reclamo a mi madre y me paro de la cama para dirigirme al baño
-Es mi casa y vengo aquí todos los sábados - camina detrás de mi
-A pretender ser un familia que en realidad no somos
-somos la familia Mendes, Taylor. No hay nada mas que decir-rodeo los ojos al escuchar su ridícula respuesta- ahora date un baño y ve hacia la habitación principal. Ahí estará Perrie, tú maquillista. Date prisa que pronto llegara la familia Johnson-informa y se vaFamilia Jonhson: Familia super adinerada que viven en un pueblo un poco retirado a Keltown. Mi madre quiere casarme con el hijo mayor de los hermanos Jonhson, Mark. No lo niego, Mark es hermoso. Cabello lazio y marrón claro, blanco como la leche con pecas por todas sus mejillas y ojos verdes claro. Además, tiene un cuerpo atlético. Se nota que lleva años en el mundo del tenis. Pero, para que lo quiero si no tengo que siquiera impresionarlo. Yo no estoy enamorada de el. Yo no lo quiero para mi.
-¿rojo o azul?-pregunta Perrie sosteniendo dos vestidos. Ambos son idénticos, solo que con colorles distintos. La parte superior de estos, es de manguillos pegada y la parte de abajo es en estilo de falda circular que quedaría sobre la rodilla.
-Rojo- pido y Perrie quita de mi bata baño y me comienza a vestir, luego, me coloca unos tacones negros..mi maquillaje es un poco sensillo y mi cabello color caramelo esta recogido en una trenza de sirena.-Taylor, la familia Jonhson ha llegado, apúrate por favor.-Se asoma papá en la habitación principal
-Ya voy, padre-le digo y el cierra la puerta. Y aqui esta. Mis padres intentan una vez mas intentan crear su idea de familia perfecta y ellos ni siquiera lo son. Están casados gracias a la estupida prensa que negoció su matrimonio. Gracias a la prensa tenemos todas etas riquezas. Gracias a la prensa lo tenemos todo. Un año luego de su gran boda, tuvieron gemelos, los cuales sus nombres también sus nombres fueron puestos por la prensa, y unos siete años después, luego de hacer toda la publicidad del mundo,cada uno se fue por su lado. No por problemas, si no porque no querían estar juntos. Mi padre se fue con un hombre, con el cual adopto un hijo y mi madre tiene otra hija y un hijastro.Bajo las escaleras de la mansion de la gigante mansion de madera y observo las paredes llenas de portadas de revistas con fotos de mi familia. Al llegar abajo, veo a la familia Jonhson esperandome en una fila perfecta junto a la escalera.
-Buenos dias, Taylor—Saluda la señora Jonhson.- yo le devuelvo el saludo y doy un paso
-Buen dia señorita-Saluda el señor Jonhson con un beso en la palma de mi mano.
-Buenos dias ,Tay- Saludan Adrian y Sarahí los hermanos gemelos de Mark
-Buenos dias Preciosa-Saluda educadamente Mark con un tierno beso en mis labios y yo sonrío educadamente. Él toma de mi mano y me dirijo hasta la mesa del amplio comedor-Señora Mendes...-llama la señora Jonhson
-¿si?-pregunta mi madre comiendo de su pasta
-¿cómo esta su hijo Taylor?
-Está muy bien. Ya casi se recupera-miente mi madre.
-¿Qué era lo que tenía el chico, señora?-Se une el señor Jonhson a la conversación
-Sufre de problemas de drogas. Es adicto a la morfina-Miente mi padre
-Nunca he visto al chico-Habla Mark-Cuando vuelva quiero conocerlo
-Por supuesto-Afirma mi madre y yo me ahogo con no sé qué mierda y comienzo a toser a toser
-¿Está bien, señorita?- Pregunta asustada la señorita Jonhson mientras yo hago un "si" con la cabeza mientras sigo tosiendo. Con lo que sea que me ahogué, ya bajó por mi garganta y logro respirar de nuevo. Miro a mi alrededor y todos tienen una cara de alivio notoria
-¿Salimos?-pregunta Mark y asiento
-Discúlpennos por favor. Saldremos a el patio a tomar un poco de aire- nos paramos del asiento y miramos a mi padre.
-De acuerdo, chicos-nos permite mi padre y salimos al inmenso patio y nos sentamos en unos tranquilos bancos
-Estás hermosa...-Susurra Mark en un suspiro
-Gracias Mark-Respondo y bajo la cabeza
-Tuz padres hablaron con los míos esta mañana... Quiere que te proponga matrimonio en tu cumpleaños 18-Me anuncia
-Ah...-es todo lo que consigo decir. Carajo, no. Mi fiesta y la de Nate debe llevarse en grande. No puede ser una cena en casa.
-¿No te emociona?-Pregunta desconcertado al notar mi reacción de sorpresa
-Creo que aún soy muy joven...-le recuerdo
-Lo se, pero imagínate lo hermoso que sería casarnos y tener hijos jóvenes. Ya tenemos nuestra vida hecha, Taylor-intenta convencerme. Intento disimular mi cara de asco y odio a esa vida tan rutinaria. Yo no quiero hijos, no quiero compromiso. Daría lo que fuera por dejar de ser millonaria para así hacer lo que sea.
-Bueno... cumplo en seis meses, aún hay tiempo
-Lo se. Veamos qué ocurre-se acerca a mi y comienza a besar mis labios. Toma de mis mejillas y profundiza el beso. Su beso es diferente al que me he dado con los demás hombres, no hay llama de pasión, sólo tranquilidad y una aburrida dulzura. Me hace pararme del asiento y toma de mis manos mientras separamos nuestros labios. -Te quiero Taylor. En verdad quiero hacer una vida contigo. Permítemelo. Déjame hacerte la mujer más feliz del mundo, por favor. -Me dice de la manera más sincera que he escuchado mirándome a los ojos. Me da pena, no quiero estar a su lado, pero su dulzura a la vez lo hace diferente a los demás chicos que conozco. Ellos sólo te quieren para cogerte y ya. Me gusta que m cojan, duh, pero nunca he sentido esa dulzura durante la intimidad. Quiero contestarle, pero no sé como.
-¡CHICOOOOOS!-Escucho a Sarah desde la puerta. Me sobresalto un poco y Mark me toma de la mano
-Tenemos que ir-avisa Mark y me da un pequeño beso antes de entrar de nuevo a la casa.
-Ya es hora de irnos-Anuncia la señora Jonhson al llegar a la sala de la casa. Todos comienzan a despedirse. Al la familia Jonhson irse, mis padres esperan unos cinco minutos y recogen sus cosas para irse.
-Madre... -la llamo antes de que salga por la puerta
-¿Si, Taylor?-voltea a mirarme
-¿Donde está Taylor?-le pregunto
-Salió temprano. No lo sé.- responde cortante. Da media vuelta y se va.Al ver como ambos se han ido a seguir con sus vidas normales, subo a mi habitación y miro mi teléfono que tiene un mensaje de Marinne: ¡Fiesta en mi casa chicaaaaa!
Al ver el mensaje, me quito mi horrendo vestido y lo reemplazo por un vestido negro muy pegado y escotado y me cambio los tacones por unos plateados y decido dejarme la trenza y el maquillaje, después de todo no estaba tan mal.
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Keller.
Teen FictionTodos admiramos el mundo de la popularidad. Ser cool, salir con chicos, ir a fiestas, entre muchos beneficios más. Pero ¿qué pasa si te digo que las cosas no son tan "cool" como parecen? Entre chismes, rumores, amoríos y consecuencias se encuentran...