Sostenme, me estoy cayendo

Capítulo 2

Enero 29 - Día 13

Coloqué si expediente en la mesa de la cocina, estaba sentado con una taza de café cerca de mi mano, aún estaba en pijama, disfrutando de un domingo. Había estado cansado últimamente y era agradable tener un día para descansar y permacer acostado sin nada que pensar. En el otro lado de la pequeña cocina, Shouto sacaba la caja de cereal que estaba en la alacena.

–¿Nuevo paciente? –preguntó mientras llenaba su taza.

–Si –dije, mientras abría la carpeta del expediente. La portada ordenada y organizada, una foto de Katsuki en la parte superior, junto a su nombre, edad, y líneas y líneas de información personal–. Lo conocí el miércoles pasado.

Shouto asintió mientras colocaba la leche en su razón de cereal.

–¿fue el "encandor" chico que me despertó en la madrugada?

Sonreí ante su voz cálida que aún estaba en mi mente.

–Si, el mismo. –Shouto tomó su plato de cereal y se acercó a mí mirando la foto de Katsuki que se encontraba en el expediente.

–Tiene bonitos ojos.

Cerré de inmediato el expediente y miré a Shouto.

–Es confidencial.

Shouto me sacó la lengua.

–Solo quería ver como lucía el chico.

–¿No tienes nada que hacer? –le pregunté en un tono de molestia, Shouto lo llamaba "El modo reina gay de Izuku" y debería de ofenderme, pero me parecía gracioso.

–Si, si tengo que hacer. Momo quedó ver una película –sonrió mientras colocaba su razón vacío en la mesa.

–Anda con cuidado –le contesté riendo al ver una rara expresión de emoción. Parecía un niño cuando hablaba de Momo, era adorable.

–Sabes que siempre tengo cuidado, Midoriya –dijo el chico bicolor mientras se dirigía a la puerta–. No vemos al rato.

–¡Adiós! –dije mientras tomaba un sorbo de mi café, deslizando mis dedos hasta la segunda página del expediente. Estaba escrita la información general de Katsuki, todo impreso en letras negras.

Miré la hoja leyendo por partes, me detuve cuando mis ojos leyeron《Intento de suicidio》.

Las palabras impresas parecían difuminarse.

Sobredosis.

Se lecionaba intencionalmente.

Lo admitió el 12 de diciembre... Eso fue hace dos meses.

Pasé mi mano por mi frente, mientras presionaba lo que había leído.

Oh, Katsuki, ¿qué hiciste?

Enero 31 - Día 15

Estaría mintiendo si digo que no he pasado estos últimos días pensando en él. Sabía que no debía estar pensándolo demasiado, pero no podía evitarlo. A veces desearía no tener sentimientos, siempre me preocupaba mucho por el dolor que sentían los demás. Esa era una de las razones por la cual soy bueno en mi trabajo, no era capaz de tomarme a la ligera lo que le ocurría a los demás.

Pide sentir una oleada de alivio cuando entré a su habitación del hospital. Katsuki estaba como lo había dejado: cubierto hasta la cintura, su laptop entre sus piernas u sus ojos pegados a la pantalla.

– Estoy empezando a creer que estás pegado a esa cosa –le dije bromeando desde la puerta, mientras le dedicaba una sonrisa amistosa.

–¡Ha! Pegué la laptop a mis piernas hace meses –respondió sin levantar la vista de la pantalla.