Fiebre

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Sungmin:

A las 7:45pm me arregle y fui a encender el auto para ir en busca de Kyuhyun.

-Sungmin espera –Yesung-shii me detuvo en la entrada.

-¿Sucede algo? –me extendió una bolsa.

-Es una bufanda para Kyuhyun, seguro tendrá frío –asentí tomando el paquete, como había predicho el frío se había intensificado.

-Muchas gracias –cerré la ventanilla y me encamine a casa de Heechul-shii.

En el trayecto comenzó a nevar, me entro un escalofrío, cuando regresara le pediría a la señora Eun un chocolate caliente. Prendí las luces, la visibilidad se hacía dificultosa por la ventisca. Repentinamente por la visión periférica divise algo que me hizo frenar de golpe, el carro patino.

-No puede ser –baje la ventanilla. – ¿Kyuhyun...?

Alguien caminaba por la acera abrazándose a sí mismo, encogido. Reconocía esa cabellera castaña y sus ropas las recordaba, era él. Dios mío.

Me apresure a estacionar el auto cerca de donde estaba caminando, jale la bolsa y saque la bufanda. Bajé apresuradamente del carro...sabría Dios cuanto tiempo llevaba caminando bajo la nieve. Le llame pero no volteo. No fue hasta que me atreví a decir su nombre sin formalidades que se detuvo.

-¿Qué hace por aquí caminado bajo la nieve amo...? –le rodee con la bufanda, sus cachetes estaban rojos y temblaba.

-¿DÓNDE ESTABAS? –grito empujándome.

-I...iba camino a buscarlo...

¡Por tu culpa... –su voz se apagó al él tambalearse.

Me acerque rápidamente para sostenerlo.

-No me toques...inútil –estaba molesto, no entendía por qué pero lo estaba.

A duras penas llego hasta el carro, le abrí la puerta y entro. Lo más rápido que pude me subí y di la vuelta a casa, tenía que atenderlo rápido o las consecuencias serían fatales. Cuando llegamos trate de ayudarlo a salir pero me lanzo un manotazo.

-Yo puedo solo... –aún en ese estado su terquedad no flaqueaba.

Entramos y le vi volver a tambalearse, temeroso me acerque tratando de ayudarlo pero nuevamente me alejo.

-Amo...solo quiero ayudar...

-Dije que yo podía solo... –suspire caminando lo más cerca que podía en caso que colapsara.

A mitad de las escaleras se fue hacia atrás, lo atrape... Se había desmayado. Con cuidado lo senté en un escalón para tocar su frente. Estaba ardiendo en fiebre.

-¿Sungmin? –la voz de Leeteuk-shii me sobresalto.

-Buenas noches amo Leeteuk –salude.

-¿Qué paso? –pregunto exaltado al ver a su hermanito.

-Anduvo caminando por la nieve...

-Ay dios mío....este niño –bajo las escaleras agachándose frente a él. – Ayúdame a llevarlo a su habitación –pidió poniéndose de espaldas a Kyuhyun aun inclinado.

-Sí.

Con algo de dificultad logre montar a Kyuhyun en la espalda de Leeteuk-shii. Llegados a su habitación, y tras colocarlo sobre la cama, me pidió que esperase mientras llamaba al médico.

Le observe tendido en la cama, bien sabía yo que no podía quedarse así, tenía que quitarle la ropa y meterlo en la bañera con agua caliente ¿Necesitaban un médico para eso? Sin embargo, me daba miedo hacerlo... En vista que no le agrado si se despierta en medio de me va a terminar pegando y no quiero eso. Una tos gruesa me saco de mis pensamientos, note la respiración de Kyu muy forzada y un recuerdo fugaz de mi hermano vino a mi mente... No podía dejarlo así...que pase lo que tenga que pasar.

Hermoso ErrorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora