Capitulo 29

1.3K 100 4
                                    

Marinette:


Hoy sería el último día de esta farsa.

Adrien prefirió evitarme durante todo el día, pasó las horas en su despacho y apenas cruzaba palabras conmigo.

Me entró el pánico por perderlo.

Será que ahora si es en serio lo de Kagami.

La angustia duele y aún no soy capaz de saber porque siento esto.

El es mi secuestrador y solo fingimos ser algo más.

Una parte de mi cerebro me echaba la culpa a ser dependiente de el, a una simple ilusión por ser amada, la otra parte de mi cerebro me decía que ya estaba loca y que me había hecho daño ver tantas películas cursis.

Suspiré frustrada y salí de la ducha.

Miré el vestido negro con pequeños destellos plateados.

No podía entender cuando o donde me pondría algo así, en mi otra vida este vestido me hubiese costado una fortuna y ahora era el regalo de Adrien.

Adrien se tomaba muy en serio año nuevo y organizó una fiesta más formal que la de la Navidad.

Me había mandado la orden con Louis, usar el vestido negro con escote en V y la joyería que me había regalado por Navidad.

Cuando terminé de maquillarme y hacerme un chongo algo formal, bajé a la sala.

Toda la casa tenía una melodía armoniosa que era tocada por el grupo de chicas contratadas.

Luces pequeñas color blanco decoraban toda la mansión y jardines.

Los niños vestían su mejor traje en color oscuro.

Las niñas vestidos de gala.

En excepción de una, la más pequeña. Carla de tres años había decidido llevar su disfraz de princesa que usó en Halloween lo más probable. incluyendo la diadema.

La tía de Adrien, Mimi, lucía un poco más creativo; un vestido rojo que tenía plumas saliendo de el,  junto con una boa y casco a juego. Lucia unos zapatos rojos brillantes, guantes largos, y un cigarrillo saliendo de la boquilla a la antigua.

-Espero que no creas que puedes fumar eso en la casa-dijo Adrie, apareciendo de la nada con un esmoquín.

-Ya no respetan a los mayores-lamentó Mimi-Relájate, Adrien Agreste, es parte del look.

Adrien levantó una ceja y su tía siguió saludando a todos.

Miré a Adrien el estaba más serio que de costumbre, ahora no hubo un "te vez bonita".

Se dio la vuelta y caminó hasta el otro lado del jardín para juntarse con sus primos.

Yo por mi parte seguí observando a su familia.

La abuela Esperanza había optado por una vestimenta más informal; un pijama gris con gatitos, desafiando la ocasión.

-Me voy directamente a la cama luego de esto-dijo, en voz alta después de cuarta copa de champagne, que se suponía iba a ser técnicamente para Año Nuevo.

En una mesa tenía copas de champagne con botellas de champagne, y en otra mesa copas de champagne de plástico con una botella de jugo de uva espumoso para los niños.

Una larga bandeja de quesos ocupaba el medio de la mesa.

-Félix me ha comentado que ya es tu amigo-murmuró Lila poniéndose a mi lado con una copa en sus manos.

Los gemelos Agreste © (+18). Adrinette, FelixnetteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora